Las palabras de Jeremías hijo de Hilquías, de los sacerdotes
que estaban en Anatot, en la tierra de Benjamín.
2
La palabra de Jehovah le vino en los Días de Josías hijo de
Amón, rey de Judá, en el año 13 de su reinado.
3
También le vino en los Días de Joacim hijo de Josías,
rey de Judá, hasta el final del año 11 de Sedequías
hijo de Josías, rey de Judá, es decir, hasta la cautividad
de Jerusalén en el mes quinto.
4
Vino a Mí la palabra de Jehovah, diciendo:
5
--Antes que yo te formase en el vientre, te Conocí; y antes que salieses
de la matriz, te consagré y te di por profeta a las naciones.
6
Y yo dije: --¡Oh Señor Jehovah! He Aquí que no sé
hablar, porque soy un muchacho.
7
Pero Jehovah me dijo: --No digas: "Soy un muchacho"; porque a todos a quienes
yo te Envíe Tú Irás, y todo lo que te mande Dirás.
8
No tengas temor de ellos, porque yo estaré contigo para librarte,
dice Jehovah.
9
Entonces Jehovah Extendió su mano y Tocó mi boca. Y me dijo
Jehovah: --He Aquí, pongo mis palabras en tu boca.
10
Mira, en este Día te he constituido sobre naciones y sobre reinos,
para arrancar y desmenuzar, para arruinar y destruir, para edificar y plantar.
11
Entonces vino a Mí la palabra de Jehovah, diciendo: --¿Qué
ves, Jeremías? Y Respondí: --Veo una vara de almendro.
12
Y Jehovah me dijo: --Has visto bien, porque yo vigilo sobre mi palabra para
ponerla por obra.
13
Vino a Mí la palabra de Jehovah por segunda vez, diciendo:
--¿Qué ves? Y Respondí: --Veo una olla hirviente que se
vuelca desde el norte.
14
Entonces Jehovah me dijo: --Del norte se Desatará el mal sobre todos
los habitantes del País.
15
Porque he Aquí que yo convoco a todas las familias de los reinos del
norte, dice Jehovah. Ellos Vendrán, y cada uno Pondrá su trono
a la entrada de las puertas de Jerusalén, junto a todos sus muros
alrededor y en todas las ciudades de Judá.
16
Y proferiré mis juicios contra ellos por toda su maldad con que me
abandonaron, pues ofrecieron incienso a otros dioses y se postraron ante
la obra de sus propias manos.
17
Tú, pues, ciñe tus lomos y Levántate; Tú les
Dirás todo lo que yo te mande. No te amedrentes delante de ellos,
no sea que yo te amedrente delante de ellos.
18
Porque he Aquí que yo te he puesto hoy como una ciudad fortificada,
como una columna de hierro y como un muro de bronce contra todo el País;
tanto para los reyes de Judá, como para sus magistrados, para sus
sacerdotes y para el pueblo de la tierra.
19
Lucharán contra ti, pero no te Vencerán; porque yo estaré
contigo para librarte, dice Jehovah.
"Vé, proclama a los Oídos de Jerusalén y diles que Así
ha dicho Jehovah: 'Me acuerdo de ti, de la lealtad de tu juventud, del amor
de tu noviazgo, cuando andabas en pos de Mí en el desierto, en una
tierra no sembrada.
3
Santo era Israel para Jehovah, primicia de su cosecha. Todos los que le devoraban
eran culpables, y el mal Recaía sobre ellos', dice Jehovah."
4
¡Oíd la palabra de Jehovah, oh casa de Jacob y todas las familias
de la casa de Israel!
5
Así ha dicho Jehovah: "¿Qué maldad hallaron en Mí
vuestros padres, para que se hayan alejado de Mí y se hayan ido tras
la vanidad, haciéndose vanos ellos mismos?
6
No dijeron: '¿Dónde Está Jehovah, que nos hizo subir de
la tierra de Egipto y nos condujo por el desierto, por una tierra árida
y de hoyos, por una tierra reseca y de densa oscuridad, por una tierra por
la cual Ningún hombre ha pasado, ni Habitó Allí hombre
alguno?'
7
Yo os introduje en una tierra fértil, para que comierais de su fruto
y de lo bueno de ella. Pero cuando entrasteis, contaminasteis mi tierra y
convertisteis mi heredad en Abominación.
8
Los sacerdotes no dijeron: '¿Dónde Está Jehovah?' Los
que se ocupaban de la ley no me conocieron. Los pastores se rebelaron contra
Mí, y los profetas profetizaron en nombre de Baal y anduvieron tras
lo que no aprovecha.
9
Por tanto, dice Jehovah, Aún contenderé contra vosotros; contra
los hijos de vuestros hijos contenderé.
10
Pasad a las costas de Quitim y observad. Enviad a Quedar y considerad
cuidadosamente. Ved si acaso se ha hecho algo semejante a esto.
11
¿Acaso alguna Nación ha cambiado sus dioses, a pesar de que ellos
no son dioses? Sin embargo, mi pueblo ha cambiado su gloria por lo que no
aprovecha.
12
"¡Espantaos, oh cielos, y horrorizaos por esto! Temblad en gran manera,
dice Jehovah.
13
Porque dos males ha hecho mi pueblo: Me han abandonado a Mí, que soy
fuente de aguas vivas, y han cavado para Sí cisternas, cisternas rotas
que no retienen el agua.
14
"¿Acaso es Israel un esclavo, o uno nacido en casa? ¿Por qué
ha llegado a ser una presa?
15
Los leones rugieron contra él, emitieron su voz e hicieron de su tierra
una Desolación. Sus ciudades Están devastadas y sin habitantes.
16
Aun los hijos de Menfis y de Tafnes te rompieron el Cráneo.
17
¿No te ha sobrevenido esto porque abandonaste a Jehovah tu Dios cuando
él te Conducía por el camino?
18
Ahora pues, ¿qué tienes Tú que ver con el camino de Egipto,
para que bebas las aguas del Nilo? ¿Y qué tienes que ver con
el camino de Asiria, para que bebas las aguas del Río?"
19
El Señor Jehovah de los Ejércitos dice: "Tu maldad te
Castigará, y tu Apostasía te Condenará. Reconoce, pues,
y ve Cuán malo y amargo es el haber abandonado a Jehovah tu Dios y
el no haberme temido.
20
Porque desde hace mucho quebraste tu yugo y rompiste tus coyundas. Dijiste:
'¡No serviré!' Ciertamente sobre toda colina alta y debajo de
todo árbol frondoso te echabas Tú, oh prostituta.
21
Yo te planté como una vid escogida, como una simiente del todo verdadera.
¿Cómo, pues, te me has convertido en una cosa repugnante, en
una vid extraña?"
22
El Señor Jehovah dice: "Aunque te laves con Lejía y amontones
Jabón sobre ti, la mancha de tu pecado Permanecerá delante
de Mí.
23
¿Cómo puedes decir: 'No estoy contaminada; nunca anduve tras
los Baales'? Mira tu proceder en el valle; reconoce lo que has hecho, oh
camellita liviana que entrecruza sus caminos.
24
Eres un asna montés, acostumbrada al desierto, que en el ardor de
su deseo olfatea el viento. Estando en su celo, ¿quién la
Detendrá? Todos los que la busquen no Tendrán que fatigarse,
pues la Hallarán en su ardor.
25
¡Evita que tus pies anden descalzos y que tu garganta tenga sed! Pero
dijiste: '¡No, es Inútil! Porque amo a los extraños, y
tras ellos he de ir.'
26
"Como el Ladrón se avergüenza cuando es sorprendido, Así
se Avergonzarán los de la casa de Israel--ellos, sus reyes, sus
magistrados, sus sacerdotes y sus profetas--,
27
los que dicen a un árbol: 'Tú eres mi padre', y a una piedra:
'Tú me has dado a luz.' "Ciertamente me han dado las espaldas y no
la cara, pero en el tiempo de su angustia dicen: '¡Levántate
y Líbranos!'
28
Pero, ¿Dónde Están tus dioses que te hiciste? ¡Que
se levanten, si te han de librar en el tiempo de tu desgracia! Porque Según
el Número de tus ciudades, oh Judá, han sido tus dioses.
29
¿Por qué contendéis conmigo? Todos vosotros os habéis
rebelado contra Mí, dice Jehovah.
30
En vano he azotado a vuestros hijos; ellos no han recibido Corrección.
Vuestra espada ha devorado a vuestros profetas como un León destructor.
31
¡Oh Generación, considerad la palabra de Jehovah! ¿Acaso
he sido para Israel como un desierto o como una tierra de tinieblas? ¿Por
qué ha dicho mi pueblo: 'Somos libres; nunca Más volveremos
a ti'?
32
¿Se olvida acaso la virgen de sus joyas, o la novia de su Atavío?
Sin embargo, mi pueblo se ha olvidado de Mí por innumerables Días.
33
"¡Qué bien dispones tus caminos para buscar amor! Ciertamente
aun a las malas mujeres enseñaste tus caminos.
34
Hasta en tus faldas se ha encontrado la sangre de las personas pobres e
inocentes. No los hallaste forzando la entrada. Sin embargo, en todo esto
35
Tú dices: 'Soy inocente; ciertamente él ha apartado su ira
de Mí.' Porque dijiste: 'No he pecado', he Aquí que yo
entraré en juicio contra ti.
36
¡Cuán Frívola eres para cambiar tus caminos! También
Serás avergonzada por Egipto, como fuiste avergonzada por Asiria.
37
También de Allí Saldrás con las manos sobre tu cabeza.
Porque Jehovah ha desechado los objetos de tu confianza, y no Prosperarás
con ellos."
Se dice: "Si alguno despide a su mujer, y ella se va de él y se casa
con otro hombre, ¿Podrá él después volver a ella?
¿No Habrá sido esa tierra del todo profanada? "Tú te has
prostituido con muchos amantes; pero, ¡vuelve a Mí!, dice Jehovah.
2
Alza tus ojos a los cerros y mira: ¿En qué lugar no se han acostado
contigo? En los caminos te sentabas para ellos, como un árabe en el
desierto. Con tus prostituciones y con tu maldad has profanado la tierra.
3
Por esta causa han sido detenidos los aguaceros, y ha faltado la lluvia
Tardía. Sin embargo, tuviste el descaro de una prostituta y no quisiste
tener vergüenza.
4
¿Acaso no me llamas ahora: 'Padre Mío', o 'Tú eres el
amigo de mi juventud'?
5
'¿Guardará enojo para siempre? ¿Eternamente lo Guardará?'
He Aquí que has hablado Así, pero has hecho cuantas maldades
Podías."
6
Jehovah me dijo en los Días del rey Josías: "¿Has visto
lo que ha hecho la Apóstata Israel? Ella ha ido a todo monte alto;
y bajo todo árbol frondoso, Allí se ha prostituido.
7
Y dije: 'Después que ella hizo todo esto, Volverá a Mí.'
Pero no Volvió; y lo vio su hermana, la desleal Judá.
8
Ella vio que precisamente porque la Apóstata Israel Había cometido
adulterio, yo la Había despedido y le Había dado carta de divorcio.
Pero su hermana, la desleal Judá, no tuvo temor; Más bien,
fue y se Prostituyó ella también.
9
Y Sucedió que a causa de que su Prostitución le era liviana,
se Prostituyó con la piedra y con el árbol, y Profanó
la tierra.
10
Con todo esto, su hermana, la desleal Judá, no Volvió a Mí
con todo su Corazón, sino con falsedad", dice Jehovah.
11
Jehovah me dijo Además: "Más justa es el alma de la Apóstata
Israel que la de la desleal Judá.
12
Vé y proclama estas palabras hacia el norte. Dirás: 'Vuelve,
oh Apóstata Israel, dice Jehovah. No haré caer mi ira sobre
vosotros, porque soy misericordioso, dice Jehovah. No guardaré enojo
para siempre.
13
Sólo reconoce tu maldad, porque contra Jehovah tu Dios te has rebelado,
has repartido tus favores a los extraños bajo todo árbol frondoso
y no has escuchado mi voz,' dice Jehovah.
14
"¡Volveos, oh hijos rebeldes, porque yo soy vuestro señor!, dice
Jehovah. Os tomaré, uno por ciudad y dos por familia, y os traeré
a Sion.
15
Os daré pastores Según mi Corazón, y ellos os
Pastorearán con conocimiento y discernimiento.
16
Y Acontecerá, dice Jehovah, que cuando os multipliquéis y
Seáis fecundos en la tierra, en aquellos Días, no Dirán
Más: '¡El arca del pacto de Jehovah!' No Vendrá a la mente,
ni se Acordarán de ella, ni la Echarán de menos, ni la
Volverán a hacer.
17
En aquel tiempo a Jerusalén le Llamarán Trono de Jehovah. Todas
las naciones se Congregarán en Jerusalén por causa del nombre
de Jehovah, y no Andarán Más Según la dureza de su malvado
Corazón.
18
En aquellos tiempos la casa de Judá Caminará con la casa de
Israel, y Vendrán juntas de la tierra del norte a la tierra que hice
heredar a vuestros padres.
19
"Yo Decía: '¿Cómo te he de poner entre los hijos y te
he de dar la tierra deseable, la heredad Más bella de las huestes
de las naciones?' Y yo mismo Decía: 'Me Llamarás Padre Mío
y no te Apartarás de en pos de Mí.'
20
Pero como la mujer que traiciona a su compañero, Así me
habéis traicionado, oh casa de Israel", dice Jehovah.
21
Una voz fue Oída en los cerros: Es el llanto de los ruegos de los
hijos de Israel, porque han pervertido su camino y se han olvidado de Jehovah
su Dios.
22
--¡Volveos, oh hijos rebeldes, y os sanaré de vuestras rebeliones!
--Henos Aquí; nosotros venimos a ti, porque Tú eres Jehovah
nuestro Dios.
23
Ciertamente para engaño son las colinas y el bullicio en los montes.
Ciertamente en Jehovah nuestro Dios Está la Salvación de Israel.
24
Lo vergonzoso ha consumido desde nuestra juventud el esfuerzo de nuestros
padres: sus ovejas y sus vacas, sus hijos y sus hijas.
25
Yacemos en nuestra vergüenza, y nuestra desgracia nos cubre; porque
nosotros y nuestros padres hemos pecado contra Jehovah nuestro Dios desde
nuestra juventud hasta este Día. No hemos escuchado la voz de Jehovah
nuestro Dios.
--Si has de volver, oh Israel, vuelve a Mí, dice Jehovah. Si quitas
tus abominaciones de mi presencia, y no divagas;
2
y si juras con verdad, con derecho y con justicia, diciendo, "¡Vive
Jehovah!", entonces en él Serán benditas las naciones, y en
él se Gloriarán.
3
Porque Así ha dicho Jehovah a los hombres de Judá y de
Jerusalén: --Abríos surcos y no sembréis entre espinos.
4
Circuncidaos para Jehovah; quitad el prepucio de vuestro Corazón,
oh hombres de Judá y habitantes de Jerusalén. No sea que por
la maldad de vuestras obras mi ira salga como fuego y arda, y no haya quien
la apague.
5
Declarad en Judá y hacedlo Oír en Jerusalén, diciendo:
"¡Tocad la corneta en el País! Pregonad a plena voz y decid:
'¡Reuníos y entremos en las ciudades fortificadas!
6
¡Alzad bandera hacia Sion; buscad refugio y no os Detengáis!'
Porque yo hago venir del norte calamidad y gran quebrantamiento.
7
El León sale de su espesura; se ha puesto en marcha el destructor
de las naciones. Ha salido de su lugar para convertir tu tierra en
Desolación. Tus ciudades Serán devastadas y dejadas sin habitantes.
8
Por eso, Ceñíos de cilicio. Lamentad y gemid, porque el ardor
de la ira de Jehovah no se ha apartado de nosotros.
9
"Y Sucederá en aquel Día que Desfallecerá el Corazón
del rey y el Corazón de los magistrados, dice Jehovah. Los sacerdotes
se Quedarán horrorizados, y los profetas Quedarán Atónitos."
10
Entonces dije: "¡Oh Señor Jehovah! De veras has engañado
a este pueblo y a Jerusalén, diciendo: 'Tendréis paz', mientras
que la espada penetra hasta el alma."
11
En aquel tiempo se Dirá a este pueblo y a Jerusalén: "Un viento
caliente viene desde los cerros del desierto en Dirección de la hija
de mi pueblo, pero no para aventar ni para limpiar.
12
Un viento Más fuerte que éstos viene de parte Mía. Ahora
también yo declararé juicios contra ellos."
13
He Aquí que Subirá como las nubes, y sus carros son como
torbellino. Sus caballos son Más veloces que las águilas. ¡Ay
de nosotros, porque somos devastados!
14
Lava de maldad tu Corazón, oh Jerusalén, para que seas salva.
¿Hasta Cuándo Dejarás permanecer en medio de ti tus planes
de iniquidad?
15
Porque ya se oye la voz del que trae las noticias desde Dan y del que informa
de la calamidad desde la Región montañosa de Efraín.
16
Anunciad a las naciones; he Aquí, haced Oír en Jerusalén:
"Vienen guardias de tierra lejana y Alzarán su voz contra las ciudades
de Judá.
17
Como guardias de campo Estarán alrededor de ella, porque se Rebeló
contra Mí", dice Jehovah.
18
Tu camino y tus transgresiones te han acarreado esto. Esta es tu desgracia.
¡Cuán amargo! Porque Llegó hasta tu Corazón.
19
¡Ay, mis entrañas, mis entrañas! Me duelen las paredes
de mi Corazón. Se conmociona mi Corazón dentro de Mí.
No callaré, oh alma Mía, porque lo que has Oído es el
sonido de la corneta, el Pregón de guerra.
20
Quebranto sigue a quebranto, porque toda la tierra es devastada. ¡De
repente son devastadas mis moradas; en un momento, mis tiendas!
21
¿Hasta Cuándo habré de ver la bandera y tendré
que Oír el sonido de la corneta?
22
Porque mi pueblo es insensato; no me conocen. Son hijos ignorantes y carentes
de entendimiento. Son expertos para hacer el mal, pero no saben hacer el
bien.
23
Miré la tierra, y he Aquí que estaba sin orden y Vacía.
Miré los cielos, y no Había en ellos luz.
24
Miré las montañas, y he Aquí que temblaban; todas las
colinas se Estremecían.
25
Miré, y he Aquí que no Había hombre, y todas las aves
del cielo Habían huido.
26
Miré, y he Aquí que la tierra fértil era un desierto.
Todas sus ciudades Habían sido devastadas ante la presencia de Jehovah,
ante el ardor de su ira.
27
Porque Así ha dicho Jehovah: "Todo el País Será desolado,
aunque no lo consumiré del todo.
28
Por esto se enluta la tierra, y se oscurecen los cielos arriba; porque he
hablado, lo he planeado y no cambiaré de parecer, ni desistiré
de ello."
29
Todas las ciudades huyen del estruendo de los jinetes y de los arqueros.
Se meten en la espesura de los bosques y suben a los peñascos. Todas
las ciudades Están abandonadas; nadie habita en ellas.
30
Y Tú, oh devastada, ¿qué Harás? Aunque te vistas
de grana y te adornes con adornos de oro, aunque te agrandes los ojos con
pintura, en vano te embelleces. Tus amantes te Despreciarán; lo que
ellos buscan es tu vida.
31
Porque Oí una voz como de mujer que tiene dolores de parto, angustia
como de primeriza. Es la voz de la hija de Sion que gime y extiende sus manos,
diciendo: "¡Ay de Mí, pues mi alma desfallece ante los asesinos!"
Recorred las calles de Jerusalén; mirad, pues, y sabed. Buscad en
sus plazas a ver si Halláis un solo hombre, a ver si hay alguno que
practique el derecho y que busque la fidelidad; y yo la perdonaré.
2
Pero aunque dicen: "¡Vive Jehovah!", ciertamente juran en falso.
3
Oh Jehovah, ¿no buscan tus ojos la fidelidad? Tú los azotaste,
y no les Dolió; los consumiste, pero rehusaron recibir Corrección.
Endurecieron sus caras Más que la piedra y rehusaron volver.
4
Entonces dije: "Ciertamente ellos son unos pobres; se han entontecido, porque
no han conocido el camino de Jehovah, el mandato de su Dios.
5
Me iré, pues, a los grandes y les hablaré, porque ellos Sí
conocen el camino de Jehovah, el juicio de su Dios." Pero ellos también
quebraron el yugo y rompieron las coyundas.
6
Por eso los Herirá el León del bosque, los Destruirá
el lobo de los sequedales, y el leopardo Acechará sus ciudades. Cualquiera
que salga de ellas Será despedazado; porque sus rebeliones se han
multiplicado, y se ha aumentado su Apostasía.
7
"¿Por qué te he de perdonar por esto? Tus hijos me abandonaron
y juraron por lo que no es Dios. Yo los sacié, pero ellos cometieron
adulterio y frecuentaron casas de prostitutas.
8
Como caballos de Cría, excitados, cada cual relinchaba por la mujer
de su Prójimo.
9
¿No habré de castigar por esto?, dice Jehovah. ¿No Tomará
venganza mi alma de una Nación como ésta?
10
"Escalad las terrazas de sus vides y destruid, pero no la Consumáis.
Quitad sus ramas, porque no son para Jehovah.
11
Porque resueltamente me han traicionado la casa de Israel y la casa de
Judá", dice Jehovah.
12
Negaron a Jehovah y dijeron: "El no existe. No Vendrá el mal sobre
vosotros, ni veremos espada ni hambre.
13
Los profetas Serán convertidos en viento, puesto que la palabra no
Está en ellos. Así se ha de hacer con ellos."
14
Por tanto, Así ha dicho Jehovah Dios de los Ejércitos: "Porque
dijisteis estas palabras, he Aquí que yo pongo mis palabras en tu
boca como fuego. Este pueblo Será la leña, y el fuego los
Devorará.
15
He Aquí, dice Jehovah, yo traigo sobre vosotros, oh casa de Israel,
una Nación distante, una Nación robusta, una Nación
antigua, una Nación cuya lengua ignoras; no Entenderás lo que
diga.
16
Su aljaba es como sepulcro abierto; todos ellos son valientes.
17
Comerá tu mies y tu pan; Comerá a tus hijos y a tus hijas.
Comerá tus ovejas y tus vacas; Comerá tus viñas y tus
higueras. A espada Destruirá tus ciudades fortificadas en las cuales
Confías.
18
Sin embargo, dice Jehovah, no os consumiré del todo en aquellos
Días.
19
"Sucederá que cuando pregunten: '¿Por qué nos hizo Jehovah
nuestro Dios todas estas cosas?', entonces les Responderás: 'De la
manera que me abandonasteis y servisteis a dioses extraños en vuestra
tierra, Así serviréis a extranjeros en tierra ajena.'
20
"Anunciad esto en la casa de Jacob y hacedlo Oír en Judá:
21
'Oíd esto, pueblo insensato y sin entendimiento. Tienen ojos y no
ven; tienen Oídos y no oyen.
22
¿A Mí no me temeréis?, dice Jehovah. ¿No temblaréis
delante de Mí, que puse la arena como Límite del mar, por decreto
eterno que no lo Podrá traspasar? Se Levantarán sus olas, pero
no Prevalecerán; Rugirán, pero no lo Pasarán.'
23
No obstante, este pueblo tiene Corazón obstinado y rebelde; se han
apartado y se han ido.
24
No dicen en su Corazón: 'Temamos, pues, a Jehovah nuestro Dios, que
da en su tiempo la lluvia temprana y la Tardía, y nos guarda los tiempos
establecidos para la siega.'
25
Vuestras iniquidades han desviado estas cosas, y vuestros pecados os han
privado del bien.
26
Porque en mi pueblo se encuentran Impíos que vigilan como quien ha
puesto una trampa. Ponen objetos de Destrucción y atrapan hombres.
27
Como jaulas llenas de Pájaros, Así Están sus casas llenas
de fraude. Así se han hecho grandes y ricos.
28
Se han puesto gordos y lustrosos. Incluso, sobrepasan las obras del malo.
En el juicio no defienden la causa del huérfano de modo que se le
haga prosperar, y no juzgan la causa de los necesitados.
29
"¿No habré de castigar por esto?, dice Jehovah. ¿No Tomará
venganza mi alma de una Nación como ésta?
30
Cosas espantosas y horribles suceden en la tierra:
31
Los profetas profetizan con mentira, y los sacerdotes dirigen por su propia
cuenta. Y mi pueblo Así lo quiere. ¿Qué, pues, haréis
cuando llegue su fin?
"Oh hijos de Benjamín, huid de en medio de Jerusalén y tocad
la corneta en Tecoa. Levantad señales de humo sobre Bet-haquérem,
porque del norte se ve venir el mal y el gran quebrantamiento.
2
"Como una deleitosa pradera es la hija de Sion.
3
Hacia ella vienen los pastores con sus rebaños. Alrededor de ella
ponen sus tiendas; cada cual apacienta en su lugar."
4
¡Haced guerra santa contra ella! ¡Levantaos y subamos a Mediodía!
¡Ay de nosotros, porque el Día va declinando, y se extienden
las sombras del anochecer!
5
¡Levantaos, subamos de noche y destruyamos sus palacios!
6
Porque Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: "¡Cortad
sus árboles y levantad un terraplén contra Jerusalén!
Esta es la ciudad que ha de ser castigada. Todo en ella es Opresión.
7
Como la cisterna preserva frescas sus aguas, Así ella preserva fresca
su maldad. En ella se oye hablar de violencia y Destrucción; continuamente
hay enfermedad y heridas en mi presencia.
8
Corrígete, oh Jerusalén, no sea que mi alma se aparte de ti;
no sea que yo te convierta en Desolación, en tierra no habitada."
9
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: "Al remanente de Israel
lo Rebuscarán como a una vid. Como un vendimiador, vuelve tu mano
a las ramas."
10
¿A quién tengo que hablar y amonestar, para que oigan? He Aquí
que sus Oídos Están sordos, y no pueden Oír. He Aquí
que la palabra de Jehovah les es afrenta, y no la desean.
11
Por tanto, estoy lleno de la ira de Jehovah; cansado estoy de contenerme.
"¡Derrámala sobre el niño en la calle, y sobre el
Círculo de los Jóvenes! Porque tanto el marido como la mujer
Serán apresados, y el anciano con el lleno de Días.
12
Sus casas Serán traspasadas a otros; asimismo, sus campos y sus mujeres,
dice Jehovah. Porque extenderé mi mano contra los habitantes del
País,
13
pues desde el menor hasta el mayor de ellos, cada uno persigue las ganancias
deshonestas. Desde el profeta hasta el sacerdote, todos obran con engaño
14
y curan con superficialidad el quebranto de mi pueblo, diciendo: 'Paz, paz.'
¡Pero no hay paz!
15
"¿Acaso se han avergonzado de haber hecho Abominación?
¡Ciertamente no se han avergonzado, ni han sabido humillarse! Por tanto,
Caerán entre los que caigan; en el tiempo en que yo los castigue,
Tropezarán", ha dicho Jehovah.
16
Así ha dicho Jehovah: "Deteneos en los caminos y mirad. Preguntad
por las sendas antiguas, Cuál sea el buen camino, y andad en él;
y hallaréis descanso para vuestras almas." Pero ellos dijeron: "¡No
andaremos en él!"
17
"También puse sobre ellos centinelas que dijeran: '¡Escuchad
el sonido de la corneta!' Pero dijeron: 'No escucharemos.'
18
Por tanto, Oíd, oh naciones; y conoce, oh Congregación, lo
que les Sucederá.
19
Escucha, oh tierra: He Aquí, yo traigo sobre este pueblo el mal, el
fruto de sus pensamientos. Porque no atendieron a mis palabras; y en cuanto
a mi ley, la han desechado.
20
"¿De qué vale que me Traigáis este incienso de Saba y
caña Aromática de tierra lejana? Vuestros holocaustos no son
aceptables, ni vuestros sacrificios son de mi agrado.
21
Por tanto, Así ha dicho Jehovah, he Aquí que yo pongo tropiezos
a este pueblo, y Caerán en ellos los padres junto con los hijos; el
vecino y su Prójimo Perecerán."
22
Así ha dicho Jehovah: "He Aquí que viene un pueblo de la tierra
del norte; una gran Nación se Despertará en los confines de
la tierra.
23
Empuñan el arco y la lanza. Son crueles; no tienen misericordia. Su
estruendo resuena como el mar. Montan sobre caballos, y como un solo hombre
se disponen para la batalla contra ti, oh hija de Sion."
24
Oímos de su fama, y nuestras manos se debilitaron. La angustia se
Apoderó de nosotros, dolor como de mujer que da a luz.
25
No salgas al campo, ni vayas por el camino; porque la espada del enemigo
y el terror Están por todas partes.
26
Oh hija de mi pueblo, Cíñete de cilicio y revuélcate
en ceniza. Haz duelo como por hijo único, llanto de amargura; porque
Súbitamente Vendrá sobre nosotros el destructor.
27
"Te he puesto en la torre como un centinela en medio de mi pueblo. Conoce,
pues, y observa el camino de ellos.
28
Todos ellos son de lo Más obstinados y andan calumniando. Son bronce
y hierro; todos ellos son corruptores.
29
El fuelle sopla, y el plomo es consumido por el fuego. En vano se esfuerza
el fundidor, pues los malos no se desprenden.
30
Los llaman Plata Desechada, porque Jehovah los ha desechado."
La palabra de Jehovah que vino a Jeremías, diciendo:
2
"Ponte de pie junto a la puerta de la casa de Jehovah y proclama Allí
esta palabra. Diles: Oíd la palabra de Jehovah, todos los de Judá
que Entráis por estas puertas para adorar a Jehovah.
3
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: Corregid
vuestros caminos y vuestras obras, y os dejaré habitar en este lugar.
4
No confiéis en palabras de mentira que dicen: '¡Templo de Jehovah,
templo de Jehovah! ¡Este es el templo de Jehovah!'
5
Porque si realmente Corregís vuestros caminos y vuestras obras, si
realmente Practicáis lo justo entre el hombre y su Prójimo,
6
si no Oprimís al forastero, al huérfano y a la viuda, si no
Derramáis sangre inocente en este lugar, y si no vais tras otros dioses
para vuestro propio mal,
7
entonces os dejaré habitar en este lugar, en la tierra que desde siempre
y para siempre di a vuestros padres.
8
"He Aquí que vosotros Estáis confiando en palabras de mentira
que no aprovechan.
9
Después de robar, de matar, de cometer adulterio, de proferir falso
testimonio, de ofrecer incienso a Baal y de ir tras otros dioses que no
conocisteis,
10
¿vendréis para estar delante de Mí en este templo que
es llamado por mi nombre y para decir: 'Somos libres' (para seguir haciendo
todas estas abominaciones)?
11
¿Acaso este templo, que es llamado por mi nombre, es ante vuestros ojos
una cueva de ladrones? He Aquí que yo también lo he visto,
dice Jehovah.
12
"Id, pues, a mi lugar que estuvo en Silo, donde al principio hice morar mi
nombre, y ved lo que le hice a causa de la maldad de mi pueblo Israel.
13
Ahora pues, dice Jehovah, por cuanto habéis hecho todas estas obras--y
a pesar de que os hablé persistentemente, no escuchasteis; y cuando
os llamé, no respondisteis--,
14
por eso, como hice a Silo, haré a este templo que es llamado por mi
nombre y en el cual Confiáis, a este lugar que os di a vosotros y
a vuestros padres.
15
Y os echaré de mi presencia como eché a todos vuestros hermanos,
a toda la descendencia de Efraín.
16
"Tú, pues, no ores por este pueblo. No levantes por ellos clamor ni
Oración; no intercedas ante Mí, porque no te escucharé.
17
¿No ves lo que hacen éstos en las ciudades de Judá y en
las calles de Jerusalén?
18
Los hijos recogen la leña, y los padres encienden el fuego. Las mujeres
amasan la masa para hacer tortas a la Reina del Cielo y para derramar libaciones
a otros dioses, para ofenderme.
19
¿Me Ofenderán a Mí?, dice Jehovah. ¿Acaso no
Actúan, Más bien, para su propia vergüenza?"
20
Por tanto, Así ha dicho el Señor Jehovah: "He Aquí que
mi furor y mi ira se derraman sobre este lugar, sobre los hombres y sobre
los animales, sobre los árboles del campo y sobre los frutos de la
tierra. Se Encenderá y no se Apagará."
21
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel:
"Añadid vuestros holocaustos a vuestros sacrificios y comed carne.
22
Porque el Día en que los saqué de la tierra de Egipto, no
hablé con vuestros padres ni les mandé acerca de holocaustos
y sacrificios.
23
Más bien, les mandé esto diciendo: 'Escuchad mi voz; y yo
seré vuestro Dios, y vosotros seréis mi pueblo. Andad en todo
camino que os he mandado, para que os vaya bien.'
24
Pero no escucharon ni inclinaron su Oído, sino que caminaron en la
dureza de su malvado Corazón, Según sus propios planes. Caminaron
hacia Atrás y no hacia adelante.
25
Desde el Día en que vuestros padres salieron de la tierra de Egipto
hasta este Día, os envié todos mis siervos los profetas,
persistentemente, Día tras Día.
26
Pero no me escucharon ni inclinaron su Oído; Más bien, endurecieron
su cerviz y actuaron peor que sus padres.
27
"Tú, pues, les Dirás todas estas palabras, pero no te
Escucharán; los Llamarás, pero no te Responderán.
28
Por tanto, les Dirás: 'Esta es la Nación que no Escuchó
la voz de Jehovah su Dios ni Aceptó la Corrección. La fidelidad
se ha perdido; ha sido eliminada de sus bocas.'
29
"Corta tu cabellera y Arrójala. Prorrumpe en lamento sobre los cerros,
pues Jehovah ha rechazado y ha abandonado a la Generación, objeto
de su ira.
30
Porque los hijos de Judá han hecho lo malo ante mis ojos, dice Jehovah.
Han puesto sus ídolos abominables en el templo que es llamado por
mi nombre, Contaminándolo.
31
Han edificado los lugares altos del Tófet, que Están en el
valle de Ben-hinom, para quemar en el fuego a sus hijos y a sus hijas, cosa
que no les mandé, ni me vino a la mente.
32
Por tanto, dice Jehovah, he Aquí Vendrán Días en que
no se Dirá Más Tófet, ni valle de Ben-hinom, sino valle
de la Matanza. En el Tófet Serán sepultados por no haber Más
lugar.
33
Los Cadáveres de este pueblo Servirán de comida a las aves
del cielo y a los animales de la tierra, y no Habrá quien los espante.
34
Haré cesar en las ciudades de Judá y en las calles de
Jerusalén la voz de gozo y la voz de Alegría, la voz del novio
y la voz de la novia; porque la tierra Será arruinada."
Jehovah dice: "En aquel tiempo Sacarán fuera de los sepulcros los
huesos de los reyes de Judá, los huesos de sus magistrados, los huesos
de los sacerdotes, los huesos de los profetas y los huesos de los habitantes
de Jerusalén.
2
Los Extenderán ante el sol, ante la luna y ante todo el ejército
del cielo, a quienes amaron y rindieron culto, a quienes siguieron y consultaron,
y ante quienes se postraron. No Serán recogidos ni sepultados;
Quedarán como abono sobre la superficie de la tierra.
3
Preferible Será la muerte que la vida para el resto de los sobrevivientes
de esta perversa familia, en todos los lugares a donde yo los arroje, dice
Jehovah de los Ejércitos.
4
"Asimismo, les Dirás que Así ha dicho Jehovah: '¿No se
levantan los que se caen? ¿No vuelve el que es tomado cautivo?
5
¿Por qué apostata este pueblo, oh Jerusalén, con perenne
Apostasía? Se aferran al engaño; Rehúsan volver.
6
"Oí atentamente y escuché; no hablan con rectitud. No hay hombre
que se arrepienta de su maldad y que diga: '¿Qué he hecho?' Cada
cual se ha vuelto a su carrera, como caballo que arremete en la batalla.
7
"Hasta la cigüeña en el cielo conoce sus tiempos determinados;
la Tórtola, la golondrina y la grulla guardan el tiempo de sus
migraciones. Pero mi pueblo no conoce el juicio de Jehovah.
8
¿Cómo diréis: 'Nosotros somos sabios, y la ley de Jehovah
Está con nosotros'? Ciertamente he Aquí que la pluma engañosa
de los escribas la ha convertido en engaño.
9
Los sabios son avergonzados, se llenan de terror y son tomados prisioneros.
He Aquí que han rechazado la palabra de Jehovah, ¿y qué
clase de Sabiduría les queda?
10
Por tanto, daré a otros sus mujeres, y sus campos a los conquistadores;
porque desde el menor hasta el mayor, cada uno persigue las ganancias
deshonestas. Desde el profeta hasta el sacerdote, todos obran con engaño
11
y curan con superficialidad el quebranto de la hija de mi pueblo, diciendo:
'Paz, paz.' ¡Pero no hay paz!
12
"¿Acaso se han avergonzado de haber hecho Abominación? Ciertamente
no se han avergonzado, ni han sabido humillarse! Por tanto, Caerán
entre los que caigan; en el tiempo de su castigo Tropezarán, ha dicho
Jehovah.
13
¡De cierto acabaré con ellos!, dice Jehovah. No Quedarán
uvas en la vid, ni higos en la higuera. Hasta las hojas se Marchitarán,
y lo que les he dado Pasará de ellos."
14
¿Por qué nos quedamos sentados? Reuníos, y entremos en
las ciudades fortificadas y perezcamos Allí, porque Jehovah nuestro
Dios nos ha hecho perecer. Nos ha hecho beber aguas envenenadas, porque hemos
pecado contra Jehovah.
15
Esperamos paz, y no hay tal bien; tiempo de sanidad, y he Aquí, terror.
16
Desde Dan se ha Oído el relincho de sus caballos. Toda la tierra tiembla
a causa del relincho de sus corceles. Vienen y devoran la tierra y su plenitud,
la ciudad y sus habitantes.
17
"He Aquí que yo Envío sobre vosotros serpientes, Víboras
contra las cuales no Habrá encantamiento que valga. Y ellas os
Morderán", dice Jehovah.
18
El dolor se sobrepone a Mí sin remedio; mi Corazón Está
enfermo.
19
¡He Aquí, la voz del grito de la hija de mi pueblo que viene
de lejana tierra! ¿Acaso no Está Jehovah en Sion? ¿Acaso
no Está en ella su Rey? ¿Por qué me han provocado a ira
con sus Imágenes talladas, con las vanidades del extranjero?
20
Ha pasado la siega, se ha acabado el verano, ¡y nosotros no hemos sido
salvos!
21
Quebrantado estoy por el quebranto de la hija de mi pueblo. Estoy enlutado;
el horror se ha apoderado de Mí.
22
¿Acaso no hay Bálsamo en Galaad? ¿Acaso no hay Allí
médico? ¿Por qué, pues, no hay sanidad para la hija de
mi pueblo?
¡Quién me diera que mi cabeza fuese agua y mis ojos manantial
de Lágrimas, para que llorara Día y noche por los muertos de
la hija de mi pueblo!
2
¡Quién me diera una posada de caminantes en medio del desierto,
para abandonar a mi pueblo e irme de ellos! Porque todos ellos son unos
Adúlteros, una asamblea de traidores.
3
Dispusieron su lengua como arco; se hicieron fuertes en la tierra para el
engaño, no para la fidelidad. "Procedieron de mal en mal y no me han
conocido, dice Jehovah.
4
¡Cuídese cada uno de su Prójimo! En Ningún hermano
tenga confianza; porque todo hermano suplanta, y todo Prójimo anda
calumniando.
5
Cada uno engaña a su Prójimo, y no hablan verdad; enseñan
su lengua para hablar mentira. Se han pervertido hasta el cansancio.
6
Su morada Está en medio del engaño. Y a causa del engaño
Rehúsan conocerme", dice Jehovah.
7
Por tanto, Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: "He Aquí
que yo los fundiré y los probaré. Pues, ¿de qué
otro modo he de proceder con la hija de mi pueblo?
8
Flecha asesina es la lengua de ellos; hablan engaño. Con su boca habla
de paz a su Prójimo, pero dentro de Sí pone emboscada.
9
¿No habré de castigarles por esto?, dice Jehovah. ¿No
Tomará venganza mi alma de una Nación como ésta?"
10
Prorrumpiré en llanto y lamento por los montes, en canto Fúnebre
por los pastizales del desierto. Porque han sido devastados hasta no quedar
quien pase, ni se escucha el mugido del ganado. Desde las aves del cielo
hasta el ganado Huirán y se Irán.
11
"Yo convertiré a Jerusalén en montones de piedras y en guarida
de chacales. Convertiré las ciudades de Judá en una
Desolación, sin habitantes."
12
¿Quién es el hombre sabio que entienda esto? ¿A quién
ha hablado la boca de Jehovah, de manera que lo pueda declarar? ¿Por
qué ha perecido la tierra y ha sido devastada cual desierto, de modo
que nadie pase por ella?
13
Y Jehovah dijo: "Porque dejaron mi ley, la cual puse delante de ellos. No
obedecieron mi voz, ni caminaron conforme a ella.
14
Más bien, fueron tras la Porfía de sus corazones y tras los
Baales, como sus padres les enseñaron.
15
Por tanto, Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel,
he Aquí que haré comer ajenjo a este pueblo; les haré
beber aguas envenenadas.
16
Los esparciré entre naciones que ni ellos ni sus padres conocieron.
Y enviaré tras ellos la espada, hasta que yo los extermine.
17
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: Considerad y llamad
a las plañideras, y que vengan; enviad a llamar a las Más expertas,
y que vengan."
18
¡Apresúrense y prorrumpan en lamento por nosotros! Derramen
Lágrimas nuestros ojos; fluya agua de nuestros Párpados.
19
Porque en Sion se oye la voz de un lamento: ¡Cómo hemos sido
destruidos! En gran manera hemos sido avergonzados; porque hemos abandonado
la tierra, porque han derribado nuestras moradas.
20
Escuchad, oh mujeres, la palabra de Jehovah; reciba vuestro Oído la
palabra de su boca. Enseñad lamentos a vuestras hijas; cantos
Fúnebres, cada una a su compañera.
21
Porque la muerte ha subido por nuestras ventanas y ha entrado en nuestros
palacios, para barrer a los niños de las calles y a los Jóvenes
de las plazas.
22
Diles que Así dice Jehovah: "Los cuerpos de los hombres muertos
Caerán como abono sobre la superficie del campo. Como manojos Caerán
Detrás del segador, y no Habrá quien los recoja."
23
Así ha dicho Jehovah: "No se alabe el sabio en su Sabiduría,
ni se alabe el valiente en su Valentía, ni se alabe el rico en sus
riquezas.
24
Más bien, Alábese en esto el que se alabe: en entenderme y
conocerme que yo soy Jehovah, que hago misericordia, juicio y justicia en
la tierra. Porque estas cosas me agradan, dice Jehovah.
25
"He Aquí, vienen Días, dice Jehovah, en que traeré el
castigo sobre todo circuncidado y sobre todo incircunciso:
26
sobre Egipto, Judá, Edom, los hijos de Amón y Moab, y sobre
todos los que se rapan las sienes y habitan en el desierto. Porque todas
estas naciones son incircuncisas, y toda la casa de Israel es incircuncisa
de Corazón."
Oíd la palabra que ha hablado Jehovah acerca de vosotros, oh casa
de Israel.
2
Así ha dicho Jehovah: "No Aprendáis el camino de las naciones,
ni Tengáis temor de las señales del cielo, aunque las naciones
las teman.
3
Porque las costumbres de los pueblos son vanidad: Cortan un árbol
del bosque, y las manos del escultor lo labran con la azuela.
4
Lo adornan con plata y oro; lo afirman con clavos y martillo para que no
se tambalee.
5
Son como un Espantapájaros en un huerto de pepinos. No hablan; son
llevados, porque no pueden dar un paso. No Tengáis temor de ellos,
porque no pueden hacer daño ni tampoco tienen poder para hacer bien."
6
¡No hay nadie semejante a ti, oh Jehovah! Tú eres grande; grande
es tu nombre en poder.
7
¡Quién no te Temerá, oh Rey de las naciones! Porque a
ti se te debe temer. Entre todos los sabios de las naciones y en todos sus
reinos, no hay nadie semejante a ti.
8
Son torpes e insensatos a la vez. El mismo ídolo de madera es una
Lección de vanidades:
9
Traen plata laminada de Tarsis y oro de Ufaz, los cuales son trabajados por
el platero y por las manos del fundidor. Sus vestiduras son de material azul
y de Púrpura; todas son obra de expertos.
10
Pero Jehovah es el verdadero Dios; él es el Dios vivo y el Rey eterno.
Ante su enojo tiembla la tierra; las naciones no pueden resistir su furor.
11
Así les diréis: "Los dioses que no hicieron los cielos ni la
tierra Desaparecerán de la tierra y de debajo de estos cielos.
12
El hizo la tierra con su poder; Estableció el mundo con su Sabiduría
y Extendió los cielos con su inteligencia.
13
Cuando él emite su voz, se produce un tumulto de aguas en los cielos.
El hace subir la neblina desde los extremos de la tierra. Hace los
Relámpagos para la lluvia y saca el viento de sus Depósitos."
14
Todo hombre se embrutece por falta de conocimiento. Todo platero es avergonzado
a causa de su ídolo. Porque sus ídolos de Fundición
son un engaño, y no hay Espíritu en ellos.
15
Son vanidad, obra Ridícula; en el tiempo de su castigo Perecerán.
16
No es como ellos la Porción de Jacob; porque él es el Hacedor
de todo, e Israel es la tribu de su heredad. ¡Jehovah de los Ejércitos
es su nombre!
17
Recoge del suelo tu equipaje, Tú que habitas en un lugar bajo asedio.
18
Porque Así ha dicho Jehovah: "He Aquí que esta vez arrojaré
con honda a los habitantes del País, y he de afligirlos para que sean
avergonzados."
19
¡Ay de Mí, por mi ruina! Mi herida es incurable. Sin embargo,
dije: "Ciertamente ésta es mi enfermedad, y debo sufrirla."
20
Mi tienda es destruida, y todas mis cuerdas han sido rotas. Mis hijos se
me han ido, y ya no Están. Ya no hay nadie que extienda mi morada,
ni quien levante mi tienda.
21
Porque los pastores se han embrutecido y no han buscado a Jehovah. Por eso
no prosperaron, y todo su rebaño se ha dispersado.
22
He Aquí que viene un rumor, y gran alboroto de la tierra del norte,
para convertir en Desolación y en guarida de chacales todas las ciudades
de Judá.
23
Reconozco, oh Jehovah, que el hombre no es señor de su camino, ni
el hombre que camina es capaz de afirmar sus pasos.
24
Corrígeme, oh Jehovah, pero con tu juicio; no con tu furor, para que
no me empequeñezcas.
25
Derrama tu ira sobre las naciones que no te conocen y sobre las familias
que no invocan tu nombre. Porque han devorado a Jacob; lo han devorado y
consumido, y han desolado su morada.
La palabra de Jehovah que vino a Jeremías, diciendo:
2
--Escuchad las palabras de este pacto y hablad a los hombres de Judá
y a los habitantes de Jerusalén.
3
Tú les Dirás que Así ha dicho Jehovah Dios de Israel:
"Maldito el hombre que no obedece las palabras de este pacto
4
que mandé a vuestros padres el Día en que los saqué
de la tierra de Egipto, del horno de hierro, diciéndoles: 'Oíd
mi voz y haced conforme a todo lo que yo os mando. Así seréis
mi pueblo, y yo seré vuestro Dios;
5
para confirmar el juramento que hice a vuestros padres, de darles la tierra
que fluye leche y miel, como en este Día.'" Yo Respondí:
--Así sea, oh Jehovah.
6
Entonces Jehovah me dijo: --Proclama todas estas palabras en las ciudades
de Judá y en las calles de Jerusalén, diciendo: "Oíd
las palabras de este pacto y ponedlas por obra.
7
Porque bien Advertí a vuestros padres el Día en que los hice
subir de la tierra de Egipto y hasta el Día de hoy, advirtiéndoles
persistentemente y diciendo: 'Escuchad mi voz.'
8
Pero no escucharon ni inclinaron su Oído. Más bien, se fueron
cada uno tras la Porfía de su malvado Corazón. Por eso traeré
sobre ellos todas las palabras de este pacto que mandé que cumpliesen,
pero que no cumplieron."
9
Además, Jehovah me dijo: --Se ha hallado Conspiración entre
los hijos de Judá y entre los habitantes de Jerusalén.
10
Se han vuelto a las maldades de sus primeros padres, quienes rehusaron escuchar
mis palabras; se han ido tras otros dioses para servirles. La casa de Israel
y la casa de Judá han invalidado mi pacto que concerté con
sus padres.
11
Por tanto, Así ha dicho Jehovah, he Aquí que yo traigo sobre
ellos un mal del que no Podrán escapar. Clamarán a Mí,
pero no los escucharé.
12
Las ciudades de Judá y los habitantes de Jerusalén Irán
y Clamarán a los dioses a los cuales queman incienso, pero éstos
de ninguna manera los Podrán salvar en el tiempo de su calamidad.
13
Porque Según el Número de tus ciudades, oh Judá, han
sido tus dioses; y Según el Número de tus calles, oh
Jerusalén, habéis puesto altares a la vergüenza, altares
para quemar incienso a Baal.
14
Tú, pues, no ores por este pueblo. No levantes por ellos clamor ni
Oración, porque yo no escucharé en el tiempo en que clamen
a Mí, en el tiempo de su calamidad.
15
¿Qué derecho tiene mi amada en mi casa, después de haber
hecho tantas intrigas? ¿Acaso los votos y la carne santa Podrán
apartar tu mal de sobre ti? ¿Puedes entonces alegrarte?
16
Jehovah Llamó tu nombre: "Olivo verde de hermoso fruto y buen aspecto."
Pero con el estruendo de gran tumulto él le Prenderá fuego,
y sus ramas Quedarán arruinadas.
17
Jehovah de los Ejércitos, que te Plantó, ha decretado el mal
contra ti, a causa de la maldad que para Sí mismos hicieron los de
la casa de Israel y de la casa de Judá, al provocarme a ira quemando
incienso a Baal.
18
Jehovah me lo hizo saber, y lo supe; me hizo ver las obras de ellos.
19
Pero yo era como un cordero manso que llevan a degollar, pues no Entendía
que contra Mí maquinaban planes diciendo: "Eliminemos el árbol
en su vigor. Cortémoslo de la tierra de los vivientes, y nunca Más
sea recordado su nombre."
20
Pero, oh Jehovah de los Ejércitos, que juzgas con justicia y
escudriñas la conciencia y el Corazón, deja que yo vea tu venganza
contra ellos; porque ante ti he expuesto mi causa.
21
Por tanto, Así ha dicho Jehovah acerca de los hombres de Anatot que
buscan mi vida y dicen: "No profetices en nombre de Jehovah, para que no
mueras por nuestra mano."
22
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: "He Aquí que
yo los castigaré; los Jóvenes Morirán a espada, y sus
hijos y sus hijas Morirán de hambre.
23
No Quedará sobreviviente de ellos, porque yo traeré el mal
sobre los hombres de Anatot en el año de su castigo."
--Justo eres Tú, oh Jehovah, para que yo contienda contigo. Sin embargo,
hablaré contigo sobre cuestiones de derecho. ¿Por qué
prospera el camino de los Impíos? ¿Por qué tienen tranquilidad
todos los que hacen Traición?
2
Tú los has plantado, y han echado Raíces; crecen y dan fruto.
Cercano Estás Tú de sus bocas, pero lejos de sus conciencias.
3
Sin embargo, oh Jehovah, Tú me conoces. Tú me has visto y has
probado Cómo es mi Corazón para contigo. Sepáralos,
como a ovejas destinadas para el matadero; Apártalos para el Día
de la matanza.
4
¿Hasta Cuándo ha de estar de duelo la tierra, y se Secará
la hierba de todo campo? Por la maldad de los que habitan en ella han perecido
los animales y las aves; porque dijeron: "El no Verá nuestro final."
5
--Si corriste con los de a pie y te cansaron, ¿Cómo Competirás
con los caballos? Y si en tierra de paz te caes al suelo, ¿qué
Harás en la espesura del Jordán?
6
Porque aun tus hermanos y la casa de tu padre te han traicionado; aun ellos
gritan Detrás de ti con fuerte voz. No les creas, aunque te hablen
de bondades.
7
He abandonado mi casa, he desamparado mi heredad, he entregado lo que amaba
mi alma en mano de sus enemigos.
8
Mi heredad Llegó a ser para Mí como el León en el bosque.
Contra Mí Levantó su voz; por tanto, la Aborrecí.
9
¿Es para Mí mi heredad como una ave de rapiña pintada,
contra la cual Están alrededor otras aves de rapiña? Id, reunid
a todos los animales del campo; sean Traídos para que la devoren.
10
Muchos pastores han arruinado mi viña y han pisoteado mi heredad.
Han convertido mi preciosa heredad en un desierto desolado.
11
La han convertido en una Desolación. Por Mí Está de
duelo, desolada; toda la tierra ha sido desolada, porque nadie lo toma a
pecho.
12
Sobre todos los cerros del desierto han venido los destructores, porque la
espada de Jehovah devora desde un extremo de la tierra hasta el otro. No
hay paz para Ningún mortal.
13
Sembraron trigo y segaron espinas. Están exhaustos, pero de nada les
aprovecha. Se Avergonzarán de sus cosechas, a causa del ardor de la
ira de Jehovah.
14
Así ha dicho Jehovah: --Con respecto a todos mis malos vecinos que
atacan la heredad que hice poseer a mi pueblo Israel, he Aquí que
yo los arrancaré de su tierra. También arrancaré de
en medio de ellos a la casa de Judá.
15
Pero Sucederá que después que los haya arrancado, volveré
a tener misericordia de ellos y los haré volver cada uno a su heredad,
y cada cual a su tierra.
16
Y Sucederá que si con diligencia aprenden los caminos de mi pueblo
para jurar en mi nombre, diciendo: "¡Vive Jehovah!" (tal como
enseñaron a mi pueblo a jurar por Baal), entonces ellos Serán
edificados en medio de mi pueblo.
17
Pero si no escuchan, yo arrancaré a tal Nación. La arrancaré
y la destruiré, dice Jehovah.
Así me ha dicho Jehovah: "Vé, compra un cinto de lino,
Cíñete con él y no lo metas en agua."
2
Entonces compré el cinto, conforme a la palabra de Jehovah, y me
Ceñí con él.
3
Luego vino a Mí la palabra de Jehovah por segunda vez, diciendo:
4
"Toma el cinto que has comprado y que tienes ceñido. Levántate
y vé al Eufrates; Escóndelo Allí, en la hendidura de
una peña."
5
Fui, pues, y lo Escondí junto al Eufrates, como me Había mandado
Jehovah.
6
Y Sucedió que después de muchos Días Jehovah me dijo:
"Levántate, vé al Eufrates y toma de Allí el cinto que
te mandé que escondieses Allá."
7
Entonces fui al Eufrates y cavé. Tomé el cinto del lugar donde
lo Había escondido, y he Aquí que el cinto se Había
podrido, y no Servía para nada.
8
Entonces vino a Mí la palabra de Jehovah, diciendo:
9
"Así ha dicho Jehovah: 'Así haré que se pudra la soberbia
de Judá y la mucha soberbia de Jerusalén.
10
Este pueblo malo, que Rehúsa escuchar mis palabras, que anda en la
Porfía de su Corazón y va tras otros dioses para rendirles
culto y para postrarse ante ellos, Vendrá a ser como este cinto que
no sirve para nada.
11
Porque como el cinto se adhiere a los lomos del hombre, dice Jehovah, Así
hice que se adhirieran a Mí toda la casa de Israel y toda la casa
de Judá, para que me fuesen pueblo y para renombre, alabanza y honra.
Pero no escucharon.'
12
"Entonces les Dirás esta palabra que ha dicho Jehovah Dios de Israel:
'Toda tinaja ha de ser llenada con vino.' Ellos te Responderán:
'¿Acaso no sabemos que toda tinaja ha de ser llenada con vino?'
13
Entonces les Dirás que Así ha dicho Jehovah: 'He Aquí
que yo lleno de embriaguez a todos los habitantes de esta tierra; a los reyes
que se sientan en el trono de David, a los sacerdotes, a los profetas y a
todos los habitantes de Jerusalén.
14
Yo los destrozaré, unos contra otros, a los padres y a los hijos a
la vez, dice Jehovah. No tendré Compasión, no tendré
Lástima ni tendré misericordia como para no destruirlos.'"
15
Oíd y prestad Atención; no Seáis altivos, pues Jehovah
ha hablado.
16
Dad gloria a Jehovah vuestro Dios, antes que él haga que se oscurezca;
antes que vuestros pies tropiecen contra montañas tenebrosas y la
luz que Esperáis él os la vuelva densa oscuridad y la convierta
en tinieblas.
17
Pero si no Escucháis esto, mi alma Llorará en secreto a causa
de vuestra soberbia. Mis ojos Llorarán amargamente y Derramarán
Lágrimas, porque el rebaño de Jehovah es tomado cautivo.
18
Di al rey y a la reina madre: "Humillaos, sentaos en tierra, porque la corona
de vuestra gloria Caerá de vuestras cabezas.
19
Las ciudades del Néguev han sido cerradas, y no hay quien las abra.
Todo Judá es llevado cautivo, llevado cautivo del todo.
20
"Alza tus ojos y observa a los que vienen del norte. ¿Dónde
Está el rebaño que te fue dado, la grey de tu gloria?
21
¿Qué Dirás cuando Dios designe como jefes sobre ti a tus
amigos, a quienes Tú misma enseñaste? ¿No te
Sobrevendrán dolores como de mujer que da a luz?
22
Cuando digas en tu Corazón: '¿Por qué me ha sobrevenido
esto?', sabe que por tu mucha maldad fueron levantadas tus faldas y fueron
desnudados tus talones.
23
¿Podrá el negro cambiar de piel y el leopardo sus manchas? Así
tampoco vosotros podréis hacer el bien, estando habituados a hacer
el mal.
24
"Por tanto, os esparciré al viento del desierto como al tamo que pasa.
25
Esta es tu suerte, la Porción que recibes de mi parte por tu
autosuficiencia, dice Jehovah; porque te olvidaste de Mí y confiaste
en la mentira.
26
También yo levantaré tus faldas sobre tu cara, y Será
vista tu vergüenza:
27
tus adulterios, tus relinchos, la infamia de tu Prostitución. Sobre
las colinas en el campo he visto tus abominaciones. ¡Ay de ti, oh
Jerusalén! ¿Hasta Cuándo no te Purificarás en pos
de Mí?"
La palabra de Jehovah que vino a Jeremías con motivo de la Sequía:
2
--Se ha enlutado Judá, y las puertas de sus ciudades Están
por caer. El pueblo Está abrumado en el suelo, y se levanta el clamor
de Jerusalén.
3
Sus nobles Envían a sus sirvientes por agua; van a las cisternas y
no hallan agua. Regresan con los Cántaros Vacíos. Son avergonzados
y afrentados, y cubren sus cabezas.
4
Por cuanto el suelo Está ardiente, pues no ha habido lluvia en la
tierra, los labradores Están avergonzados; cubren sus cabezas.
5
Hasta la gacela en el campo, al parir, abandona su Cría, porque no
hay hierba.
6
Los asnos monteses se ponen sobre los cerros y aspiran el viento como los
chacales. Sus ojos se debilitan, porque no hay hierba.
7
--Aun cuando nuestras iniquidades testifican contra nosotros, oh Jehovah,
Actúa por amor de tu nombre. Ciertamente nuestras rebeliones se han
multiplicado, y contra ti hemos pecado.
8
Oh Esperanza de Israel, su Salvador en el tiempo de Aflicción, ¿por
qué has de ser como forastero en la tierra, y como caminante que levanta
su tienda Sólo para pasar la noche?
9
¿Por qué has de ser como un hombre Atónito o como un valiente
que no puede librar? Sin embargo, Tú Estás entre nosotros,
oh Jehovah, y nosotros somos llamados por tu nombre. ¡No nos desampares!
10
Así ha dicho Jehovah a este pueblo: --¡De veras que les gusta
vagar, y no detienen sus pies! Por tanto, Jehovah no los acepta. Ahora se
Acordará de su iniquidad y los Castigará por sus pecados.
11
--Además me dijo Jehovah--: No ores por el bien de este pueblo.
12
Aunque ayunen, yo no escucharé su clamor; y aunque ofrezcan holocaustos
y ofrendas, no los aceptaré. Más bien, los consumiré
con espada, con hambre y con peste.
13
Y yo dije: --¡Oh, Señor Jehovah! He Aquí que los profetas
les dicen: "No veréis espada, ni os Sobrevendrá el hambre;
sino que en este lugar os daré verdadera paz."
14
Entonces Jehovah me dijo: --Mentira profetizan los profetas en mi nombre.
Yo no los he enviado, ni les he mandado ni les he hablado. Os profetizan
Visión mentirosa, Adivinación vana y el engaño de sus
propios corazones.
15
Por tanto, Así ha dicho Jehovah acerca de los profetas que profetizan
en mi nombre (a los cuales yo no envié, y quienes dicen: "Ni espada,
ni hambre Habrá en esta tierra"): Por la espada y por el hambre
Perecerán tales profetas.
16
Y el pueblo al cual ellos profetizan Será echado en las calles de
Jerusalén, a causa del hambre y de la espada. No Habrá quien
los sepulte, ni a sus mujeres, ni a sus hijos, ni a sus hijas. Así
derramaré sobre ellos su propia maldad.
17
Tú, pues, les Dirás esta palabra: "Derramen Lágrimas
mis ojos noche y Día, y no cesen, porque con gran quebrantamiento,
con un golpe muy grave, ha sido quebrantada la virgen hija de mi pueblo."
18
--Si salgo al campo, he Allí muertos a espada. Si entro en la ciudad,
he Aquí enfermedades causadas por el hambre. Porque tanto el profeta
como el sacerdote han sido arrastrados a una tierra que no Conocían.
19
¿Has desechado del todo a Judá? ¿Acaso tu alma abomina a
Sion? ¿Por qué nos has herido sin que haya para nosotros sanidad?
Esperamos paz, y no hay tal bien; tiempo de sanidad, y he Aquí, terror.
20
Reconocemos, oh Jehovah, nuestra impiedad y la iniquidad de nuestros padres;
porque contra ti hemos pecado.
21
Por amor de tu nombre, no nos deseches ni desdeñes el trono de tu
gloria. Acuérdate y no invalides tu pacto con nosotros.
22
¿Hay entre las vanidades de las naciones quienes hagan llover? ¿Acaso
los cielos dan lluvia por Sí solos? ¿No eres Tú, oh Jehovah,
nuestro Dios? En ti, pues, pondremos nuestra esperanza, porque Tú
has hecho todas estas cosas.
Entonces Jehovah me dijo: --Aunque Moisés y Samuel se pusiesen delante
de Mí, mi alma no Estaría con este pueblo. Echalos de mi presencia,
y que se vayan.
2
Y si te preguntan: "¿A Dónde iremos?", les Responderás
que Así ha dicho Jehovah: "¡Los que a muerte, a muerte; los que
a espada, a espada; los que a hambre, a hambre; y los que a cautividad, a
cautividad!"
3
Designaré contra ellos cuatro clases de males, dice Jehovah: la espada
para matar, los perros para arrastrar, y las aves del cielo y los animales
de la tierra para devorar y destruir.
4
Haré que sean motivo de espanto para todos los reinos de la tierra,
por causa de Manasés hijo de Ezequías, rey de Judá,
por lo que hizo en Jerusalén.
5
Porque, ¿quién Tendrá Compasión de ti, oh
Jerusalén? ¿Quién te Expresará su condolencia?
¿Quién se Desviará del camino para preguntar por tu bienestar?
6
Tú me dejaste y te volviste Atrás, dice Jehovah. Por tanto,
yo extenderé mi mano contra ti y te destruiré. Estoy cansado
de tener Compasión.
7
Los aventaré con aventador en las puertas del País; los
privaré de hijos. Destruiré a mi pueblo, pues no se volvieron
de sus caminos.
8
Sus viudas se Multiplicarán Más que la arena de los mares.
A Mediodía traeré sobre ellos, sobre la madre de los Jóvenes,
al devastador. Haré que de repente caigan sobre ella Agitación
y terrores.
9
Desmaya la madre de siete hijos; exhala su alma. Su sol se ha ocultado siendo
Aún de Día; ha sido avergonzada y humillada. A sus sobrevivientes
los entregaré a espada delante de sus enemigos, dice Jehovah.
10
--¡Ay de Mí, madre Mía, que me diste a luz, como hombre
de contienda y hombre de discordia para toda la tierra! No he prestado, ni
me han prestado; sin embargo, todos me maldicen.
11
Así sea, oh Jehovah, si no te he servido para bien y si no he intercedido
ante ti por el enemigo en el tiempo de la calamidad y en el Día de
la angustia.
12
--¿Quién Podrá romper el hierro, el hierro del norte,
y el bronce?
13
Tu riqueza y tus tesoros entregaré al saqueo de balde, por todos tus
pecados y en todos tus territorios.
14
Y te haré servir a tus enemigos en una tierra que no conoces, porque
fuego se ha encendido en mi ira y Arderá contra vosotros.
15
--Tú lo sabes, oh Jehovah; acuérdate de Mí, Visítame
con tu favor y toma venganza de mis perseguidores. No sea yo arrebatado por
la Prolongación de tu ira. Tú sabes que por tu causa sufro
la afrenta.
16
Fueron halladas tus palabras, y yo las Comí. Tus palabras fueron para
Mí el gozo y la Alegría de mi Corazón; porque yo soy
llamado por tu nombre, oh Jehovah Dios de los Ejércitos.
17
No me he sentado ni me he regocijado en Compañía de los que
se divierten. A causa de tu mano me he sentado solitario, porque me llenaste
de Indignación.
18
¿Por qué ha sido continuo mi dolor, y mi herida incurable ha
rehusado ser sanada? ¡Oh! ¿Serás para Mí como torrente
engañoso, como aguas de las que no se puede confiar?
19
Por tanto, Así ha dicho Jehovah: --Si Tú vuelves, yo te
restauraré, y Estarás de pie delante de Mí; y si separas
lo precioso de lo vil, Serás mi portavoz. ¡Que ellos se vuelvan
a ti; pero Tú no te vuelvas a ellos!
20
Te pondré ante este pueblo como un muro fortificado de bronce.
Lucharán contra ti, pero no te Vencerán; porque yo estaré
contigo para salvarte y librarte, dice Jehovah.
21
Te libraré de la mano de los malos, y te rescataré de la mano
de los tiranos.
Entonces vino a Mí la palabra de Jehovah, diciendo:
2
"No Tomarás mujer para ti; no Tendrás hijos ni hijas en este
lugar.
3
Porque Así ha dicho Jehovah acerca de los hijos y de las hijas que
nazcan en este lugar, y acerca de las madres que los den a luz y de los padres
que los engendren en esta tierra:
4
Morirán de dolorosas enfermedades; no Serán llorados ni sepultados.
Serán convertidos en abono sobre la superficie de la tierra. Con espada
y con hambre Serán exterminados, y sus Cadáveres Servirán
de comida a las aves del cielo y a los animales de la tierra."
5
Así ha dicho Jehovah: "No entres en la casa donde haya duelo, ni acudas
a lamentar, ni les expreses tu condolencia; porque he quitado de este pueblo
mi paz, y asimismo la Compasión y la misericordia, dice Jehovah.
6
Morirán en esta tierra grandes y pequeños. No Serán
sepultados, ni los Llorarán. No se Sajarán por ellos, ni se
Raparán la cabeza.
7
No Partirán pan de duelo para consolarles por sus muertos, ni les
Darán a beber de la copa de Consolación por su padre o por
su madre.
8
"Asimismo, no entres en casa de banquete, para sentarte con ellos para comer
o beber.
9
Porque Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel:
'He Aquí que yo hago cesar en este lugar, ante vuestros ojos y en
vuestros Días, la voz de gozo y la voz de Alegría, la voz del
novio y la voz de la novia.'
10
"Acontecerá que cuando anuncies a este pueblo todas estas cosas, te
Dirán: '¿Por qué ha decretado Jehovah contra nosotros
todo este mal tan grande? ¿Cuál es nuestra maldad? ¿O Cuál
es nuestro pecado que hemos cometido contra Jehovah nuestro Dios?'
11
Entonces les Dirás: 'Jehovah dice: Porque vuestros padres me abandonaron,
se fueron en pos de otros dioses y les rindieron culto; porque se postraron
ante ellos, mientras que a Mí me abandonaron y no guardaron mi ley.
12
Y vosotros habéis actuado peor que vuestros padres; porque he Aquí
que vosotros os vais cada uno tras la Porfía de su malvado Corazón,
sin escucharme a Mí.
13
Por tanto, os arrojaré de esta tierra a una tierra que ni vosotros
ni vuestros padres habéis conocido. Allá serviréis a
otros dioses Día y noche, porque no os mostraré clemencia.'
14
"Por tanto, dice Jehovah, he Aquí vienen Días en que no se
Dirá Más: '¡Vive Jehovah, que hizo subir a los hijos de
Israel de la tierra de Egipto!',
15
sino: '¡Vive Jehovah, que hizo subir a los hijos de Israel de la tierra
del norte y de todas las tierras a donde los Había desterrado!' Pues
los haré volver a su suelo, el cual di a sus padres.
16
"He Aquí que yo Envío a muchos pescadores, y los Pescarán,
dice Jehovah. Y después enviaré a muchos cazadores, y los
Cazarán sobre todo monte, sobre toda colina y en las hendiduras de
las peñas.
17
Porque mis ojos Están sobre todos sus caminos; no Están ocultos
delante de Mí, ni su maldad se esconde de mis ojos.
18
Pero primero les retribuiré el doble por su iniquidad y por su pecado,
porque han profanado mi tierra con los Cadáveres de sus cosas detestables
y porque sus abominaciones llenaron mi heredad."
19
Oh Jehovah, fuerza Mía y fortaleza Mía, mi refugio en el tiempo
de la Aflicción: A ti Vendrán las naciones desde los extremos
de la tierra y Dirán: "Ciertamente nuestros padres heredaron mentira,
vanidad en la que no hay provecho.
20
¿Ha de hacer el hombre dioses para Sí? ¡Pero ésos
no son dioses!"
21
"Por tanto, he Aquí yo les hago conocer; esta vez Sí, les
haré conocer mi poder y mi fortaleza. Y Sabrán que mi nombre
es Jehovah."
"El pecado de Judá Está escrito con pluma de hierro; con punta
de diamante Está grabado en la tabla de su Corazón y en los
cuernos de sus altares
2
como memorial contra sus hijos. Sus altares y sus árboles rituales
de Asera Están debajo de todo árbol frondoso, sobre las colinas
altas
3
y sobre los montes del campo. Tu riqueza y todos tus tesoros entrego al saqueo
por todos tus pecados y en todos tus territorios.
4
Por ti mismo te Desprenderás de la heredad que yo te di, y te haré
servir a tus enemigos en una tierra que no conoces, porque en mi furor
habéis encendido fuego, y Arderá para siempre."
5
Así ha dicho Jehovah: "Maldito el hombre que Confía en el hombre,
que se apoya en lo humano y cuyo Corazón se aparta de Jehovah.
6
Será como la retama en el Arabá; no Verá cuando venga
el bien, sino que Morará en los pedregales del desierto, en tierra
salada e inhabitable.
7
"Bendito el hombre que Confía en Jehovah, y cuya confianza es Jehovah.
8
Será como un árbol plantado junto a las aguas y que extiende
sus Raíces a la corriente. No Temerá cuando venga el calor,
sino que sus hojas Estarán verdes. En el año de Sequía
no se Inquietará, ni Dejará de dar fruto.
9
"Engañoso es el Corazón, Más que todas las cosas, y
sin remedio. ¿Quién lo Conocerá?
10
Yo, Jehovah, escudriño el Corazón y examino la conciencia,
para dar a cada hombre Según su camino y Según el fruto de
sus obras."
11
Como la perdiz, que incuba lo que no puso, es el que acumula riquezas, pero
no con justicia. En la mitad de sus Días las Dejará, y en su
Postrimería Resultará ser un insensato.
12
Trono de gloria, sublime desde el principio, es el lugar de nuestro santuario.
13
Oh Jehovah, esperanza de Israel, todos los que te abandonan Serán
avergonzados, y los que se apartan de ti Serán inscritos en el polvo;
porque han abandonado a Jehovah, la fuente de aguas vivas."
14
Sáname, oh Jehovah, y seré sano. Sálvame, y seré
salvo; porque Tú eres mi alabanza.
15
He Aquí que ellos me dicen: "¿Dónde Está la palabra
de Jehovah? ¡A ver, pues, que se cumpla!"
16
Pero yo no he insistido Detrás de ti para traer el daño, ni
he anhelado el Día de la calamidad; Tú lo sabes. Lo que ha
salido de mi boca fue en tu presencia.
17
No me causes terror; Tú eres mi refugio en el Día del mal.
18
Avergüéncense los que me persiguen, y no me avergüence yo.
Atemorícense ellos, y no me atemorice yo. Trae sobre ellos el Día
del mal, y Quebrántalos con doble quebrantamiento.
19
Así me ha dicho Jehovah: "Vé y ponte a la puerta de los hijos
del pueblo, por la cual entran y salen los reyes de Judá, y en todas
las puertas de Jerusalén.
20
Y diles: 'Oíd la palabra de Jehovah, oh reyes de Judá, todo
Judá y todos los habitantes de Jerusalén que Entráis
por estas puertas.
21
Así ha dicho Jehovah: Guardaos a vosotros mismos, no trayendo cargas
en el Día del Sábado para introducirlas por las puertas de
Jerusalén.
22
Tampoco saquéis carga de vuestras casas en el Día del Sábado,
ni Hagáis obra alguna. Más bien, santificad el Día del
Sábado, como mandé a vuestros padres.
23
Pero ellos no escucharon ni inclinaron su Oído, sino que endurecieron
su cerviz para no escuchar ni recibir Corrección.
24
Sin embargo, dice Jehovah, si vosotros de veras me obedecéis, no
introduciendo cargas por las puertas de esta ciudad en el Día del
Sábado, sino santificando el Día del Sábado y no haciendo
en él Ningún trabajo,
25
entonces Entrarán por las puertas de esta ciudad, en carros y a caballo,
los reyes y los magistrados que se sientan sobre el trono de David, ellos
y sus magistrados, los hombres de Judá y los habitantes de
Jerusalén. Y Así esta ciudad Será habitada para siempre.
26
Entonces Vendrán de las ciudades de Judá, de los alrededores
de Jerusalén, de la tierra de Benjamín, de la Sefela, de la
Región montañosa y del Néguev, trayendo holocaustos,
sacrificios, ofrendas vegetales e incienso, y trayendo a la casa de Jehovah
sacrificios de Acción de gracias.
27
Pero si no me obedecéis para santificar el Día del Sábado,
y para no llevar cargas ni entrar por las puertas de Jerusalén en
Día del Sábado, prenderé fuego a sus puertas, el cual
Devorará los palacios de Jerusalén, y no se Apagará.
La palabra que vino a Jeremías de parte de Jehovah, diciendo:
2
"Levántate y desciende a la casa del alfarero. Allí te haré
Oír mis palabras."
3
Descendí a la casa del alfarero, y he Aquí que él estaba
trabajando sobre la rueda.
4
Y el vaso de barro que Hacía se Dañó en la mano del
alfarero, pero el alfarero Volvió a hacer otro vaso Según le
Pareció mejor.
5
Entonces vino a Mí la palabra de Jehovah, diciendo:
6
"¿No podré yo hacer con vosotros como hace este alfarero, oh
casa de Israel?, dice Jehovah. He Aquí que vosotros sois en mi mano
como el barro en la mano del alfarero, oh casa de Israel.
7
En un instante hablaré acerca de una Nación o de un reino,
como para arrancar, desmenuzar y arruinar.
8
Pero si esa Nación de la cual he hablado se vuelve de su maldad, yo
desistiré del mal que Había pensado hacerle.
9
Y en un instante hablaré acerca de una Nación o de un reino,
como para edificar y para plantar.
10
Pero si hace lo malo ante mis ojos, no obedeciendo mi voz, desistiré
del bien que Había prometido hacerle.
11
"Ahora pues, habla a los hombres de Judá y a los habitantes de
Jerusalén, y diles que Así ha dicho Jehovah: 'He Aquí
que yo produzco contra vosotros un mal, y trazo un plan contra vosotros.
Vuélvase cada uno de su mal camino, y mejorad vuestros caminos y vuestras
obras.'
12
Pero ellos Dirán: 'Es Inútil; pues en pos de nuestras imaginaciones
hemos de ir, y hemos de realizar cada uno la Porfía de su malvado
Corazón.'
13
Por tanto, Así ha dicho Jehovah: 'Preguntad entre los pueblos quién
ha Oído cosa semejante. Una cosa horrible ha hecho la virgen de Israel:
14
¿Desaparecerá la nieve del Líbano de los peñascos
de las montañas? ¿Se Agotarán las aguas Frías que
fluyen de lejanas tierras?
15
Pero mi pueblo se ha olvidado de Mí, ofreciendo incienso a lo que
es vanidad. Les hacen tropezar en sus caminos, las sendas antiguas, para
andar por senderos, por un camino no preparado,
16
convirtiendo su tierra en una Desolación, en una rechifla perpetua.
Todo el que pase por ella Quedará horrorizado y Moverá su cabeza.
17
Como el viento del oriente, los esparciré delante del enemigo. Les
daré las espaldas y no la cara en el Día de su desastre.'"
18
Ellos dijeron: "Venid, hagamos planes contra Jeremías; porque la
Instrucción no Faltará al sacerdote, ni el consejo al sabio,
ni la palabra al profeta. Venid e Hirámosle con la lengua, y no prestemos
Atención a ninguna de sus palabras."
19
Oh Jehovah, ¡Escúchame y oye la voz de los que contienden conmigo!
20
¿Acaso se paga mal por bien? Ciertamente han cavado fosa para mi vida.
Recuerda que me puse de pie delante de ti para hablar el bien acerca de ellos,
para apartar de ellos tu ira.
21
Por tanto, entrega sus hijos al hambre, y Arrójalos al poder de la
espada. Queden sus mujeres privadas de hijos, y viudas. Sean sus maridos
expuestos a la muerte, y sus Jóvenes sean heridos a espada en la guerra.
22
Oigase clamor en sus casas cuando de repente traigas tropas sobre ellos.
Porque han cavado una fosa para prenderme y han escondido trampas para mis
pies.
23
Pero Tú, oh Jehovah, conoces todo su consejo contra Mí para
matarme. No hagas Expiación de su pecado, ni borres su pecado de delante
de ti. Tropiecen delante de ti; haz Así con ellos en el tiempo de
tu furor.
Así ha dicho Jehovah: "Vé y compra del alfarero una vasija
de barro. Lleva contigo ancianos del pueblo y ancianos de los sacerdotes.
2
Saldrás al valle de Ben-hinom que Está a la entrada de la puerta
de los Tiestos, y Allí Proclamarás las palabras que yo te hable.
3
Dirás: 'Oíd la palabra de Jehovah, oh reyes de Judá
y habitantes de Jerusalén. Así ha dicho Jehovah de los
Ejércitos, Dios de Israel: He Aquí que yo traigo un mal tan
grande sobre este lugar, que a quien lo oiga le Retiñirán los
Oídos.
4
Porque me han abandonado, han hecho de este lugar algo extraño, y
en él han quemado incienso a otros dioses que no conocieron ellos,
ni sus padres, ni los reyes de Judá. Han llenado este lugar con sangre
de inocentes.
5
Han edificado lugares altos a Baal para quemar en el fuego a sus hijos en
holocausto a Baal; cosa que no les mandé, ni hablé, ni me vino
a la mente.
6
Por tanto, dice Jehovah, he Aquí que Vendrán Días cuando
este lugar no se Llamará Más Tófet, ni valle de Ben-hinom,
sino valle de la Matanza.
7
En este lugar anularé el consejo de Judá y de Jerusalén.
Los haré caer a espada delante de sus enemigos y en mano de los que
buscan su vida. Daré sus Cadáveres por comida a las aves del
cielo y a los animales de la tierra.
8
Convertiré a esta ciudad en horror y rechifla: Todo el que pase por
ella Quedará horrorizado y Silbará por causa de todas sus plagas.
9
Les haré comer la carne de sus hijos y la carne de sus hijas. En el
asedio y en la angustia con que les Angustiarán sus enemigos y los
que buscan sus vidas, cada uno Comerá la carne de su Prójimo.'
10
"Luego Quebrarás la vasija ante los ojos de los hombres que vayan
contigo,
11
y les Dirás que Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos:
'Así quebrantaré a este pueblo y a esta ciudad, como quien
quiebra un vaso de barro que no se puede volver a restaurar. En el Tófet
Serán sepultados, porque no Habrá otro lugar para sepultar.
12
Así haré a este lugar y a sus habitantes, dice Jehovah, para
convertir esta ciudad como al Tófet.
13
Las casas de Jerusalén y las casas de los reyes de Judá Serán
inmundas como el lugar del Tófet, todas las casas sobre cuyos terrados
quemaron incienso a todo el ejército del cielo y derramaron libaciones
a otros dioses.'"
14
Jeremías Regresó del Tófet, a donde Jehovah le Había
enviado para profetizar. Luego se puso de pie en el atrio de la casa de Jehovah
y dijo a todo el pueblo:
15
"Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: 'He
Aquí, yo traigo sobre esta ciudad y sobre todas sus aldeas todo el
mal que hablé contra ella; porque han endurecido su cerviz para no
escuchar mis palabras.'"
Entonces el sacerdote Pasjur hijo de Imer, que era funcionario en la casa
de Jehovah, Oyó a Jeremías que profetizaba estas palabras.
2
Y Golpeó Pasjur al profeta Jeremías y le puso en el cepo de
la puerta superior de Benjamín, al lado de la casa de Jehovah.
3
Sucedió al Día siguiente que Pasjur Sacó a Jeremías
del cepo. Y Jeremías le dijo: "Jehovah no ha llamado tu nombre Pasjur,
sino Magor-misabib.
4
Porque Así ha dicho Jehovah: 'He Aquí, yo te convertiré
en terror a ti, y a todos tus amigos. Caerán ante la espada de sus
enemigos, y tus ojos lo Verán. Y a todo Judá entregaré
en mano del rey de Babilonia. El los Transportará a Babilonia y los
Herirá a espada.
5
Asimismo, entregaré toda la riqueza de esta ciudad, todo el producto
de su labor y todas sus cosas preciosas. Todos los tesoros de los reyes de
Judá entregaré en mano de sus enemigos. Los Saquearán
y los Tomarán, y los Llevarán a Babilonia.
6
Y Tú, Pasjur, y todos los que viven en tu casa, iréis cautivos.
Entrarás en Babilonia, y Allí Morirás. Allá
seréis sepultados Tú y todos tus amigos a los cuales has
profetizado con engaño.'"
7
Tú me has persuadido, oh Jehovah, y yo fui persuadido. Fuiste Más
fuerte que yo, y has prevalecido. Todo el Día he sido objeto de risa;
cada cual se burla de Mí.
8
Porque cada vez que hablo, grito; proclamo: "¡Violencia y
Destrucción!" Pues la palabra de Jehovah me ha sido afrenta y escarnio
todo el Día.
9
Digo: "No me acordaré Más de él, ni hablaré Más
en su nombre." Pero hay en mi Corazón como un fuego ardiente, apresado
en mis huesos. Me canso de contenerlo y no puedo.
10
He Oído la calumnia de muchos: "¡El terror Está por todas
partes! ¡Denunciadlo, y denunciémoslo!" Todos mis hombres de
confianza aguardan mi tropiezo. Dicen: "Quizás sea persuadido, y
prevalezcamos contra él y tomemos de él venganza."
11
Pero Jehovah Está conmigo como poderoso adalid. Por eso los que me
persiguen Tropezarán y no Prevalecerán. Serán avergonzados
en gran manera, porque no Prosperarán. Tendrán perpetua afrenta,
que Jamás Será olvidada.
12
Oh Jehovah de los Ejércitos, que escudriñas a los justos y
ves la conciencia y el Corazón, deja que yo vea tu venganza contra
ellos; porque ante ti he expuesto mi causa.
13
Cantad a Jehovah, alabad a Jehovah, porque ha librado el alma del necesitado
de la mano de los malhechores.
14
Maldito sea el Día en que Nací; no sea bendito el Día
en que mi madre me dio a luz.
15
Maldito el hombre que dio a mi padre las nuevas, diciendo: "Un hijo Varón
te ha nacido", Causándole mucha Alegría.
16
Sea tal hombre como las ciudades que Jehovah Desoló sin misericordia.
Oiga alarma de mañana y gritos de guerra a Mediodía;
17
porque no me hizo morir en el vientre. Así mi madre hubiera sido mi
tumba; su vientre hubiera quedado encinta para siempre.
18
¿Para qué Salí del vientre? ¿Para ver sufrimiento
y tormento? ¿Para que mis Días se consuman en vergüenza?
La palabra que vino a Jeremías de parte de Jehovah, cuando el rey
Sedequías Envió a él a Pasjur hijo de Malquías
y al sacerdote Sofonías hijo de Maasías, para que le dijesen:
2
"Por favor, consulta por nosotros a Jehovah, porque Nabucodonosor rey de
Babilonia nos hace la guerra. Quizás Jehovah haga con nosotros Según
todas sus maravillas, y aquél se vaya de nosotros."
3
Entonces Jeremías les dijo: "Diréis a Sedequías
4
que Así ha dicho Jehovah Dios de Israel: 'He Aquí que yo haré
volver Atrás las armas de guerra que Están en vuestras manos,
con las cuales vosotros Combatís contra el rey de Babilonia y contra
los caldeos que os tienen sitiados fuera de la muralla. Y los reuniré
en medio de esta ciudad.
5
Yo mismo combatiré contra vosotros con mano extendida y brazo fuerte,
con furor, ira y gran Indignación.
6
Heriré a los habitantes de esta ciudad, a los hombres y los animales;
por una gran peste Morirán.
7
Después de eso, dice Jehovah, entregaré en mano de Nabucodonosor
rey de Babilonia, a Sedequías rey de Judá, a sus servidores,
al pueblo y a los que queden en la ciudad después de la peste, de
la espada y del hambre. Los entregaré en mano de sus enemigos y en
mano de los que buscan sus vidas. El los Herirá a filo de espada.
No les Tendrá Compasión, no Tendrá Lástima ni
Tendrá misericordia.'
8
"Y Dirás a este pueblo que Así ha dicho Jehovah: 'He Aquí,
yo pongo delante de vosotros el camino de la vida y el camino de la muerte:
9
El que se quede en esta ciudad Morirá por la espada, por el hambre
o por la peste. Pero el que salga y se pase a los caldeos, que os tienen
sitiados, Vivirá; su vida le Será por Botín.
10
Porque he puesto mi rostro contra esta ciudad para mal, no para bien, dice
Jehovah. Será entregada en mano del rey de Babilonia, y él
la Incendiará.'
11
"Y a la casa del rey de Judá Dirás: 'Oíd la palabra
de Jehovah,
12
oh casa de David. Así ha dicho Jehovah: Juzgad cada mañana
con justicia y librad a quien es despojado de mano del opresor, para que,
por la maldad de vuestras obras, no salga mi ira como fuego y se encienda,
y no haya quien la apague.
13
He Aquí, yo estoy contra ti, oh moradora del valle, oh roca de la
llanura. A vosotros que Decís: ¿Quién Marchará
contra nosotros, o quién Entrará en nuestras viviendas?, dice
Jehovah,
14
yo os castigaré conforme al fruto de vuestras obras, dice Jehovah.
Y prenderé fuego a su bosque, el cual Devorará todos sus
alrededores.'"
Así ha dicho Jehovah: "Desciende a la casa del rey de Judá
y habla Allí estas palabras.
2
Dile: 'Escucha la palabra de Jehovah, oh rey de Judá que Estás
sentado sobre el trono de David, Tú, tus servidores y tu pueblo que
entran por estas puertas.
3
Así ha dicho Jehovah: Practicad el derecho y la justicia; librad a
quien es despojado de mano del opresor; no maltratéis ni tratéis
con violencia al forastero, ni al huérfano ni a la viuda; no
derraméis sangre inocente en este lugar.
4
Porque si realmente ponéis por obra esta palabra, entonces Entrarán
por las puertas de esta casa, en carros y a caballo, los reyes que se sientan
sobre el trono de David, ellos, sus servidores y su pueblo.
5
Pero si no Escucháis estas palabras, por Mí mismo he jurado,
dice Jehovah, que esta casa Será desolada.
6
Porque Así ha dicho Jehovah acerca de la casa del rey de Judá:
Como Galaad eres Tú para Mí, y como la cumbre del Líbano.
No obstante, te convertiré en Desolación y en ciudades no
habitadas.
7
He designado contra ti destructores, cada uno con sus armas. Ellos Cortarán
tus cedros escogidos y los Echarán en el fuego.
8
Muchas naciones Pasarán junto a esta ciudad, y se Preguntarán
unos a otros: ¿Por qué ha hecho Así Jehovah a esta gran
ciudad?
9
Y Responderán: Porque abandonaron el pacto de Jehovah su Dios, y se
postraron ante otros dioses y les rindieron culto.'"
10
No lloréis por un muerto; no os Condoláis por él. Llorad
amargamente por el que se va, porque Jamás Regresará ni
Volverá a ver la tierra donde Nació.
11
Porque Así ha dicho Jehovah acerca de Salum hijo de Josías,
rey de Judá, que Sucedió a su padre Josías y que Salió
de este lugar: "No Regresará Acá Jamás,
12
sino que en el lugar a donde lo han transportado, Allí Morirá
y no Volverá a ver esta tierra.
13
"Ay del que edifica su casa sin justicia, y sus salas sin derecho,
sirviéndose de su Prójimo de balde, sin pagarle su salario.
14
El que dice: 'Edificaré para Mí una casa espaciosa y amplias
salas; le haré ventanas, la cubriré con cedro y la pintaré
de ocre rojo.'
15
¿Acaso Reinarás porque compites con cedro? ¿Acaso no Comió
y Bebió tu padre, y Practicó el derecho y la justicia, y entonces
le fue bien?
16
El Juzgó la causa del afligido y del necesitado; entonces le fue bien.
¿No es esto conocerme?, dice Jehovah.
17
Pero tus ojos y tu Corazón no Están puestos sino Sólo
en tus ganancias deshonestas, en derramar sangre inocente, y en hacer agravio
y Extorsión."
18
Por tanto, Así ha dicho Jehovah acerca de Joacim hijo de Josías,
rey de Judá: "No lo Lamentarán diciendo: '¡Ay, hermano
Mío!' y '¡Ay, hermana Mía!' Ni lo Lamentarán diciendo:
'¡Ay, señor!' y '¡Ay de su esplendor!'
19
Será enterrado con un entierro de asno, arrastrado y echado Más
Allá de las puertas de Jerusalén.
20
"Sube al Líbano y grita; en Basán haz Oír tu voz; grita
desde Abarim. Porque todos tus amantes han sido quebrantados.
21
Te hablé en tu prosperidad, pero dijiste: 'No escucharé.' Este
ha sido tu camino desde tu juventud; que nunca has escuchado mi voz.
22
El viento Apacentará a todos tus pastores, y tus amantes Irán
en cautiverio. Ciertamente te Avergonzarás y Serás afrentado
a causa de toda tu maldad.
23
Habitaste en el Líbano; hiciste tu nido en los cedros. ¡Cómo
Gemirás cuando te vengan los dolores, angustia como la de la mujer
que da a luz!
24
"¡Vivo yo, dice Jehovah, que si Tú, Joaquín hijo de Joacim,
rey de Judá, fueses el anillo de sellar en mi mano derecha, aun de
Allí te Arrancaría!
25
Te entregaré en mano de los que buscan tu vida, en mano de aquellos
cuya presencia temes, en mano de Nabucodonosor, rey de Babilonia, y en mano
de los caldeos.
26
Te arrojaré a ti y a tu madre que te dio a luz, a una tierra extraña
donde no nacisteis, y Allá moriréis.
27
Y a la tierra a la cual anhelan intensamente volver, Allá no
Volverán.
28
¿Acaso es este hombre Joaquín una obra despreciable y rota? ¿Es
acaso una vasija indeseable? ¿Por qué han sido arrojados él
y sus descendientes, y echados a una tierra que no Conocían?"
29
¡Oh tierra, tierra, tierra, escucha la palabra de Jehovah!
30
Así ha dicho Jehovah: "Inscribid a este hombre como uno privado de
descendencia. Será un hombre que no Prosperará en los Días
de su vida. Porque Ningún hombre de su descendencia Logrará
sentarse en el trono de David ni gobernar de nuevo en Judá.
"¡Ay de los pastores, que echan a perder y dispersan a las ovejas de
mi prado!, dice Jehovah.
2
Por tanto, Así ha dicho Jehovah Dios de Israel a los pastores que
apacientan a mi pueblo: 'Vosotros dispersasteis y ahuyentasteis mis ovejas,
y no os ocupasteis de ellas. He Aquí que yo me ocuparé de vosotros
por la maldad de vuestras obras, dice Jehovah.
3
Pero yo reuniré al remanente de mis ovejas de todas las tierras a
donde las eché y las haré volver a sus pastizales. Entonces
Serán fecundas y se Multiplicarán.
4
Sobre ellas pondré pastores que las apacienten. No Temerán
Más, ni se Atemorizarán; no Faltará ninguna, dice Jehovah.'
5
"He Aquí vienen Días, dice Jehovah, en que levantaré
a David un Retoño justo. Reinará un Rey que Obrará con
inteligencia y que Practicará el derecho y la justicia en la tierra.
6
En sus Días Será salvo Judá, e Israel Habitará
seguro. Y este es el nombre con el cual Será llamado: 'Jehovah, justicia
nuestra.'
7
Por tanto, dice Jehovah, he Aquí vienen Días en que no Dirán
Más: '¡Vive Jehovah, que hizo subir a los hijos de Israel de
la tierra de Egipto!',
8
sino: '¡Vive Jehovah, que hizo subir y trajo a los descendientes de
la casa de Israel desde la tierra del norte y desde todas las tierras a donde
los Había desterrado!' Y Habitarán en su propio suelo."
9
Para los profetas: Mi Corazón Está quebrantado dentro de Mí;
todos mis huesos tiemblan. Estoy como un hombre ebrio y como un hombre dominado
por el vino, a causa de Jehovah y a causa de sus santas palabras.
10
Porque la tierra Está llena de Adúlteros; porque por causa
de éstos la tierra Está enlutada, y los pastizales del desierto
se han secado. La carrera de ellos es mala; su Poderío no es recto.
11
"Tanto el profeta como el sacerdote son unos Impíos, dice Jehovah.
Aun en mi casa he hallado su maldad.
12
Por tanto, como resbaladeros en la oscuridad Será su camino. Serán
empujados y Caerán en él, porque yo traeré el mal sobre
ellos en el año de su castigo, dice Jehovah.
13
"En los profetas de Samaria he visto algo repulsivo: Profetizan en nombre
de Baal y hacen errar a mi pueblo Israel.
14
Y en los profetas de Jerusalén he visto algo horrible: Cometen adulterio,
andan en la mentira y fortalecen las manos de los malhechores, de manera
que ninguno se convierta de su maldad. Todos ellos son para Mí como
Sodoma, y sus habitantes como Gomorra.
15
Por tanto, Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos acerca de
los profetas: He Aquí que les haré comer ajenjo y les haré
beber aguas envenenadas, porque de los profetas de Jerusalén ha salido
la Corrupción a todo el País."
16
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: "No escuchéis
las palabras de los profetas que os profetizan. Ellos os llenan de vanas
esperanzas; hablan Visión de su propio Corazón, no de la boca
de Jehovah.
17
Continuamente dicen a los que desprecian la palabra de Jehovah: 'Tendréis
paz.' Y a cualquiera que anda tras la Porfía de su Corazón
dicen: 'No Vendrá el mal sobre vosotros.'"
18
Pero, ¿quién ha estado en el consejo secreto de Jehovah y ha
percibido y Oído su palabra? ¿Quién ha estado atento a
su palabra y la ha obedecido?
19
He Aquí que el Huracán de Jehovah sale con furor. Es un
Huracán que gira e irrumpe sobre la cabeza de los Impíos.
20
No se Apartará la ira de Jehovah hasta que haya hecho y cumplido los
Propósitos de su Corazón. Al final de los Días lo
entenderéis claramente.
21
"Yo no enviaba a aquellos profetas, pero ellos Corrían. Yo no les
hablaba, pero ellos profetizaban.
22
Si hubieran estado en mi consejo secreto, entonces Habrían hecho Oír
mis palabras a mi pueblo, y les Habrían hecho volver de su mal camino
y de la maldad de sus obras.
23
"¿Acaso soy yo Dios de cerca, y no Dios de lejos?, dice Jehovah.
24
¿Acaso Podrá alguien ocultarse en escondrijos para que yo no
lo vea?, dice Jehovah. ¿Acaso no lleno yo el cielo y la tierra?, dice
Jehovah.
25
"He Oído lo que dijeron aquellos profetas que en mi nombre profetizan
mentira, diciendo: '¡He soñado, he soñado!'
26
¿Hasta Cuándo? ¿Qué hay en el Corazón de los
profetas que profetizan mentira y que profetizan el engaño de sus
propios corazones?
27
¿Acaso con sus sueños que cada uno cuenta a su compañero,
piensan hacer que mi pueblo se olvide de mi nombre, de la manera que sus
padres se olvidaron de mi nombre por causa de Baal?
28
El profeta que tenga un sueño, que cuente el sueño; pero el
que tenga mi palabra, que hable mi palabra con fidelidad. ¿Qué
tiene que ver la paja con el trigo?, dice Jehovah.
29
¿No es mi palabra como el fuego y como el martillo que despedaza la
roca?, dice Jehovah.
30
Por tanto, he Aquí, yo estoy contra los profetas que hurtan mis palabras,
cada uno de su vecino, dice Jehovah.
31
He Aquí, yo estoy contra los profetas que con sus lenguas hablan lisonjas
y proclaman: 'Jehovah dice.'
32
He Aquí, dice Jehovah, yo estoy contra los que profetizan sueños
mentirosos y los cuentan, haciendo errar a mi pueblo con sus mentiras y con
su liviandad. Yo no los envié ni les mandé. Ningún provecho
Traerán a este pueblo, dice Jehovah.
33
"Cuando este pueblo o Algún profeta o sacerdote te pregunte diciendo:
'¿Cuál es la Profecía de Jehovah?', les Dirás:
'¿Vosotros sois la Profecía, y yo os rechazaré', dice
Jehovah.
34
"Al profeta, al sacerdote y a cualquiera del pueblo que diga: 'Profecía
de Jehovah', yo castigaré a tal hombre y a su casa.
35
Así diréis cada cual a su compañero y cada uno a su
hermano: '¿Qué ha respondido Jehovah? ¿Qué ha hablado?'
36
Nunca Más os acordaréis de decir: 'Profecía de Jehovah.'
Porque, ¿acaso ha de ser Profecía la palabra de cada hombre?
Vosotros Pervertís las palabras del Dios vivo, Jehovah de los
Ejércitos, nuestro Dios.
37
"Así Dirás al profeta: '¿Qué te Respondió
Jehovah? ¿Qué Habló Jehovah?'
38
Pero si Decís: 'Profecía de Jehovah', por eso ha dicho Jehovah:
Porque dijisteis: 'Profecía de Jehovah', cuando yo os mandé
decir: No Digáis: 'Profecía de Jehovah';
39
por eso, he Aquí que os olvidaré por completo y os arrojaré
de mi presencia a vosotros y a la ciudad que os Había dado.
40
Pondré sobre vosotros afrenta perpetua y eterna Humillación
que no Serán olvidadas."
Después que Nabucodonosor, rey de Babilonia, Había llevado
cautivos a Joaquín hijo de Joacim, rey de Judá, a los magistrados
de Judá, a los artesanos y a los herreros, de Jerusalén a
Babilonia, Jehovah me Mostró una Visión: He Aquí, dos
canastas de higos estaban puestas delante del templo de Jehovah.
2
Una de las canastas Tenía higos muy buenos, como brevas; la otra canasta
Tenía higos muy malos, tan malos que no se Podían comer.
3
Y Jehovah me dijo: --¿Qué ves, Jeremías? Yo dije: --Higos.
Higos buenos, muy buenos; e higos malos, muy malos, tan malos que no se pueden
comer.
4
Entonces vino a Mí la palabra de Jehovah, diciendo:
5
--Así ha dicho Jehovah Dios de Israel: Como a estos higos buenos,
Así consideraré, para bien, a los que fueron llevados cautivos
de Judá, a quienes eché de este lugar a la tierra de los caldeos.
6
Pondré mis ojos sobre ellos, para bien, y les haré volver a
esta tierra. Los edificaré y no los destruiré; los plantaré
y no los arrancaré.
7
Les daré un Corazón para que me conozcan, pues yo soy Jehovah.
Ellos Serán mi pueblo, y yo seré su Dios, porque Volverán
a Mí de todo Corazón.
8
Porque Así ha dicho Jehovah: Como con los higos malos, que por ser
tan malos no se pueden comer, Así procederé con Sedequías
rey de Judá, con sus magistrados, con el remanente de Jerusalén
que ha sido dejado en esta tierra y con los que habitan en la tierra de Egipto,
9
para mal. Y haré que ante todos los reinos de la tierra sean objeto
de espanto, de oprobio, de Refrán, de burla y de Maldición
en todos los lugares adonde yo los empuje.
10
Y enviaré sobre ellos la espada, el hambre y la peste, hasta que sean
exterminados de sobre el suelo que les di a ellos y a sus padres.
La palabra que vino a Jeremías acerca de todo el pueblo de Judá,
en el cuarto año de Joacim hijo de Josías, rey de Judá,
el cual era el primer año de Nabucodonosor, rey de Babilonia,
2
la cual Habló el profeta Jeremías a todo el pueblo de Judá
y a todos los habitantes de Jerusalén, diciendo:
3
"Desde el año 13 de Josías hijo de Amón, rey de Judá,
hasta este Día, durante veintitrés años ha venido a
Mí la palabra de Jehovah. Os he hablado persistentemente, pero no
habéis escuchado.
4
Jehovah os Envió persistentemente todos sus siervos los profetas,
pero no escuchasteis ni inclinasteis vuestro Oído para escuchar.
5
Os Decían: 'Volveos, pues, cada uno de vuestro mal camino y de la
maldad de vuestras obras, y habitad en la tierra que Jehovah os ha dado a
vosotros y a vuestros padres, para siempre Jamás.
6
No Vayáis en pos de otros dioses, para rendirles culto y para postraros
ante ellos. No me provoquéis a ira con la obra de vuestras manos,
y no os haré mal.'
7
Sin embargo, dice Jehovah, no me escuchasteis, de modo que me habéis
provocado a ira con la obra de vuestras manos, para vuestro propio mal.
8
"Por tanto, Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: 'Por cuanto
no habéis escuchado mis palabras,
9
he Aquí yo enviaré a tomar a todas las gentes del norte y a
Nabucodonosor rey de Babilonia, mi siervo, y los traeré contra esta
tierra y contra sus habitantes, y contra todas las naciones de alrededor,
dice Jehovah. Los destruiré por completo y los convertiré en
escarnio, rechifla y ruinas perpetuas.
10
Haré perecer entre ellos la voz del gozo y la voz de la Alegría,
la voz del novio y la voz de la novia, el ruido de las piedras del molino
y la luz de la Lámpara.
11
Toda esta tierra Será convertida en Desolación y espanto. Y
estas naciones Servirán al rey de Babilonia durante setenta años.'
12
"Pero Sucederá que cuando se hayan cumplido los setenta años,
castigaré al rey de Babilonia, a aquella Nación y a la tierra
de los caldeos, por su maldad. Yo la convertiré en perpetua
Desolación.
13
Traeré contra aquella tierra todas mis palabras que he hablado acerca
de ella, todo lo que Está escrito en este libro que ha profetizado
Jeremías contra todas las naciones.
14
Porque también de ellos se Servirán muchas naciones y grandes
reyes. Yo les retribuiré conforme a sus hechos y conforme a la obra
de sus manos."
15
Así me ha dicho Jehovah Dios de Israel: "Toma de mi mano esta copa
del vino de la ira, y da de beber a todas las naciones a las cuales te
Envío.
16
Ellas Beberán y Vomitarán; Enloquecerán a causa de la
espada que yo Envío entre ellas."
17
Tomé, pues, la copa de la mano de Jehovah y di de beber a todas las
naciones a las cuales Jehovah me Había enviado:
18
A Jerusalén y a las ciudades de Judá, a sus reyes y a sus
magistrados, para convertirlos en ruinas, en horror, en rechifla y en
Maldición, como en este Día.
19
Al Faraón rey de Egipto, a sus servidores, a sus magistrados, a todo
su pueblo
20
y a toda su Población asimilada. A todos los reyes de la tierra de
Uz y a todos los reyes de la tierra de Filistea (Ascalón, Gaza,
Ecrón y los sobrevivientes de Asdod).
21
A Edom, a Moab, a los hijos de Amón;
22
a todos los reyes de Tiro, a todos los reyes de Sidón y a los reyes
de las costas que Están al otro lado del mar.
23
A Dedán, a Tema, a Buz y a todos los que se rapan las sienes.
24
A todos los reyes de Arabia y a todos los reyes de la Población asimilada
que habita en el desierto.
25
A todos los reyes de Zimri, a todos los reyes de Elam y a todos los reyes
de Media.
26
A todos los reyes del norte, tanto a los cercanos como a los lejanos, a los
unos como a los otros. Di de beber a todos los reinos que hay sobre la faz
de la tierra, y el rey de Sesac Beberá después de ellos.
27
"Les Dirás que Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos,
Dios de Israel: 'Bebed y embriagaos; vomitad y caed. No os levantaréis
a causa de la espada que yo Envío contra vosotros.'
28
Y Sucederá que si Rehúsan tomar la copa de tu mano para beber,
les Dirás que Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos:
'Tenéis que beberla,
29
porque he Aquí que yo comienzo a hacer mal a la ciudad que es llamada
por mi nombre; y vosotros, ¿quedaréis impunes? ¡No
quedaréis impunes, porque yo llamo la espada contra todos los habitantes
de la tierra!', dice Jehovah de los Ejércitos.
30
"Tú Profetizarás contra ellos todas estas palabras y les
Dirás: 'Jehovah ruge desde lo alto, y da su voz desde su santa
Habitación. Ruge enfurecido contra su morada; y un grito como el de
los que pisan la uva, Responderá a todos los habitantes de la tierra.
31
Tal rugido Llegará hasta el extremo de la tierra, porque Jehovah tiene
litigio contra las naciones. El entra en juicio contra todo mortal;
Entregará los Impíos a la espada,'" dice Jehovah.
32
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: "He Aquí que
el mal Irá de Nación en Nación, y un gran Huracán
se Desatará desde los extremos de la tierra.
33
En aquel Día los muertos por Jehovah Estarán desde un extremo
de la tierra hasta el otro. No Serán llorados; no Serán recogidos
ni sepultados. Serán convertidos en abono sobre la superficie de la
tierra."
34
¡Gemid, oh pastores, y gritad! Revolcaos en el polvo, oh mayorales del
rebaño; porque se han cumplido los Días para que Seáis
degollados y dispersados. Y caeréis como carneros escogidos.
35
Se Acabará el refugio de los pastores, y el escape de los mayorales
del rebaño.
36
Se oye el ruido del Griterío de los pastores, y del gemido de los
mayorales del rebaño. Porque Jehovah ha devastado sus prados.
37
Los apacibles pastizales son devastados a causa del furor de la ira de Jehovah.
38
Cual León, ha dejado su guarida, pues la tierra de ellos se ha convertido
en horror a causa de la ira del opresor y a causa del furor de su enojo.
En el principio del reinado de Joacim hijo de Josías, rey de Judá,
vino esta palabra de Jehovah, diciendo:
2
"Así ha dicho Jehovah: 'Ponte de pie en el atrio de la casa de Jehovah
y habla todas las palabras que te he mandado que hables, a todos los de las
ciudades de Judá que vienen para adorar en la casa de Jehovah. No
omitas ni una sola palabra;
3
Quizás oigan y se vuelvan, cada uno de su mal camino, y yo desista
del mal que he pensado hacerles por causa de la maldad de sus obras.'
4
Les Dirás que Así ha dicho Jehovah: 'Si no me Escucháis
para andar en mi ley, la cual he puesto delante de vosotros,
5
ni Escucháis las palabras de mis siervos los profetas que persistentemente
os he enviado (a los cuales no habéis escuchado),
6
entonces haré a este templo como hice al de Silo y expondré
esta ciudad como una Maldición ante todas las naciones de la tierra.'"
7
Los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo oyeron a Jeremías hablar
estas palabras en la casa de Jehovah.
8
Pero Sucedió que cuando Jeremías Terminó de decir todo
lo que Jehovah le Había mandado que hablase a todo el pueblo, lo apresaron
los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo, diciendo: "Irremisiblemente
Morirás.
9
¿Por qué has profetizado en nombre de Jehovah, diciendo: 'Este
templo Será como Silo, y esta ciudad Será destruida hasta no
quedar habitante en ella'?" Y todo el pueblo se Congregó contra
Jeremías en la casa de Jehovah.
10
Cuando los magistrados de Judá oyeron estas cosas, subieron de la
casa del rey a la casa de Jehovah y se sentaron a la entrada de la puerta
Nueva de la casa de Jehovah.
11
Entonces los sacerdotes y los profetas hablaron a los magistrados y a todo
el pueblo, diciendo: --¡Este hombre merece la pena de muerte, porque
ha profetizado contra esta ciudad, como vosotros lo habéis Oído
con vuestros propios Oídos!
12
Entonces Jeremías Habló a todos los magistrados y a todo el
pueblo, diciendo: --Jehovah me ha enviado para profetizar contra este templo
y contra esta ciudad todas las palabras que habéis Oído.
13
Ahora pues, corregid vuestros caminos y vuestras obras, y escuchad la voz
de Jehovah vuestro Dios, y Jehovah Desistirá del mal que ha hablado
contra vosotros.
14
Y en lo que a Mí respecta, he Aquí estoy en vuestras manos:
Haced de Mí como mejor y Más recto os parezca.
15
Pero sabed con certeza que si me Matáis, echaréis sangre inocente
sobre vosotros, sobre esta ciudad y sobre sus habitantes. Porque en verdad
Jehovah me ha enviado para decir todas estas palabras en vuestros Oídos.
16
Entonces los magistrados y todo el pueblo dijeron a los sacerdotes y a los
profetas: --Este hombre no merece la pena de muerte, porque ha hablado en
nombre de Jehovah, nuestro Dios.
17
Luego se levantaron algunos hombres de los ancianos del País y hablaron
a toda la asamblea del pueblo, diciendo:
18
--Miqueas de Moréset profetizaba en tiempos de Ezequías, rey
de Judá. El Habló a todo el pueblo de Judá, diciendo:
"Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos:' Sion Será arada
como campo. Jerusalén Será convertida en un Montón de
ruinas; y el monte del templo, en cumbres boscosas.'"
19
¿Acaso Ezequías, rey de Judá, y todo Judá lo mataron?
¿Acaso no Temió a Jehovah e Imploró el favor de Jehovah,
y Jehovah Desistió del mal que Había hablado contra ellos?
Nosotros estamos haciendo un mal grande contra nosotros mismos.
20
Hubo también un hombre que profetizaba en nombre de Jehovah: Urías
hijo de Semaías, de Quiriat-jearim, el cual Profetizó contra
esta ciudad y contra esta tierra, conforme a todas las palabras de
Jeremías.
21
El rey Joacim, todos sus valientes y todos sus magistrados oyeron sus palabras,
y el rey Procuró matarlo. Pero Urías se Enteró, tuvo
miedo y Huyó, y se fue a Egipto.
22
El rey Joacim Envió a Egipto unos hombres: a Elnatán hijo de
Acbor y a otros hombres con él.
23
Ellos sacaron a Urías de Egipto y lo llevaron al rey Joacim, quien
lo Mató a espada y Echó su Cadáver en los sepulcros
de la gente del pueblo.
24
Pero la mano de Ajicam hijo de Safán estaba con Jeremías, para
que no lo entregasen en mano del pueblo para matarlo.
En el principio del reinado de Sedequías hijo de Josías, rey
de Judá, vino esta palabra de Jehovah a Jeremías.
2
Jehovah me dijo Así: "Haz coyundas y yugos, y ponlos sobre tu cuello.
3
Luego los Enviarás al rey de Edom, al rey de Moab, al rey de los hijos
de Amón, al rey de Tiro y al rey de Sidón, por medio de los
mensajeros que vienen a Jerusalén a Sedequías, rey de Judá.
4
Y les Mandarás que digan a sus señores que Así ha dicho
Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: 'Así habéis
de decir a vuestros señores:
5
Con mi gran poder y mi brazo extendido hice la tierra, al hombre y a los
animales que Están sobre la faz de la tierra, y la he dado a quien
me place.
6
Ahora yo he entregado todas estas tierras en mano de Nabucodonosor rey de
Babilonia, mi siervo. Le he dado aun los animales del campo, para que le
sirvan.
7
Todas las naciones le Servirán a él, como a su hijo y al hijo
de su hijo, hasta que también le llegue su tiempo a su propia tierra;
luego se Servirán de él muchas naciones y grandes reyes.
8
"Y Sucederá que a la Nación o al reino que no sirva a
Nabucodonosor, rey de Babilonia, y que no ponga su cuello bajo el yugo del
rey de Babilonia, yo castigaré a tal Nación con espada, hambre
y peste, hasta que los acabe por medio de su mano', dice Jehovah.
9
"Vosotros, pues, no escuchéis a vuestros profetas, ni a vuestros
encantadores, ni a vuestros soñadores, ni a vuestros espiritistas
ni a vuestros hechiceros que os hablan diciendo: 'No serviréis al
rey de Babilonia.'
10
Porque ellos os profetizan mentira, de modo que Seáis alejados de
vuestra tierra y que yo os expulse y Perezcáis.
11
Pero a la Nación que someta su cuello al yugo del rey de Babilonia
y le sirva, haré que la dejen en su tierra, y Habitará en ella",
dice Jehovah.
12
Y hablé a Sedequías, rey de Judá, conforme a todas estas
palabras, diciendo: "Someted vuestros cuellos al yugo del rey de Babilonia.
Servidle a él y a su pueblo, y viviréis.
13
¿Por qué habréis de morir Tú y tu pueblo por la
espada, el hambre y la peste, como ha dicho Jehovah acerca de la Nación
que no sirva al rey de Babilonia?
14
No escuchéis las palabras de los profetas quienes os hablan diciendo:
'No serviréis al rey de Babilonia', pues os profetizan mentira.
15
Porque Jehovah dice: 'Yo no los envié; no obstante, ellos profetizan
falsamente en mi nombre, de modo que yo os expulse y Perezcáis vosotros
y los profetas que os profetizan.'"
16
También a los sacerdotes y a todo este pueblo hablé diciendo:
"No escuchéis las palabras de vuestros profetas, quienes os profetizan
diciendo: 'He Aquí que los utensilios de la casa de Jehovah Serán
Traídos pronto de Babilonia', porque os profetizan mentira.
17
No los escuchéis; servid al rey de Babilonia y vivid. ¿Por qué
ha de ser desolada esta ciudad?
18
Si ellos son profetas y si Está con ellos la palabra de Jehovah, que
intercedan ante Jehovah de los Ejércitos, para que no vayan a Babilonia
los utensilios que han quedado en la casa de Jehovah, en la casa del rey
de Judá y en Jerusalén.
19
Porque Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos acerca de aquellas
columnas, de la fuente, de las bases de las pilas Móviles y del resto
de los objetos que quedan en esta ciudad,
20
y que no Llevó Nabucodonosor rey de Babilonia, cuando Llevó
cautivos a Babilonia a Joaquín hijo de Joacim, rey de Judá,
y a todos los nobles de Judá y de Jerusalén.
21
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel, acerca
de los objetos que han quedado en la casa de Jehovah y en la casa del rey
de Judá y en Jerusalén:
22
'Serán llevados a Babilonia y Allí Estarán hasta el
Día en que yo los visite con mi favor, dice Jehovah. Después
los haré volver, y los restituiré a este lugar.'"
Aconteció en el mismo año, en el principio del reinado de
Sedequías rey de Judá, en el mes quinto del cuarto año,
que Ananías hijo de Azur, que era el profeta de Gabaón, me
Habló en la casa de Jehovah, en presencia de los sacerdotes y de todo
el pueblo, diciendo:
2
--Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel, diciendo:
"He roto el yugo del rey de Babilonia.
3
Dentro de dos años haré volver a este lugar todos los utensilios
de la casa de Jehovah que Nabucodonosor rey de Babilonia Tomó de este
lugar y los Llevó a Babilonia.
4
También haré volver a este lugar a Joaquín hijo de Joacim,
rey de Judá, y a todos los de Judá que fueron llevados cautivos
a Babilonia, porque romperé el yugo del rey de Babilonia", dice Jehovah.
5
Entonces el profeta Jeremías Respondió al profeta Ananías,
en presencia de los sacerdotes y de todo el pueblo que estaba de pie en la
casa de Jehovah.
6
Y el profeta Jeremías dijo: --¡Así sea! Así lo
haga Jehovah. Confirme Jehovah las palabras que has profetizado, para hacer
volver de Babilonia a este lugar los utensilios de la casa de Jehovah y a
todos los que fueron llevados cautivos.
7
Sin embargo, escucha esta palabra que yo hablo a tus Oídos y a Oídos
de todo el pueblo:
8
Los profetas que vinieron antes de ti y antes de mi, desde tiempos antiguos,
profetizaron de guerras, de desastres y de pestes contra muchas tierras y
contra grandes reinos.
9
En cuanto al profeta que profetiza paz, cuando su palabra se cumpla, se
Reconocerá que a tal profeta verdaderamente le ha enviado Jehovah.
10
Entonces el profeta Ananías Quitó el yugo del cuello del profeta
Jeremías y lo Rompió.
11
Y Ananías Habló en presencia de todo el pueblo, diciendo:
--Así ha dicho Jehovah: "De esta manera romperé el yugo de
Nabucodonosor, rey de Babilonia, del cuello de todas las naciones, dentro
de dos años." Y Jeremías se fue por su camino.
12
Después que el profeta Ananías Rompió el yugo del cuello
del profeta Jeremías, vino la palabra de Jehovah a Jeremías,
diciendo:
13
--Vé, habla a Ananías y dile que Así ha dicho Jehovah:
"Tú has roto yugos de madera, pero en lugar de ellos Harás
yugos de hierro."
14
Porque Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel:
"He puesto un yugo de hierro sobre el cuello de todas estas naciones, para
que sirvan a Nabucodonosor, rey de Babilonia, y le Servirán. Le he
dado a él aun los animales del campo."
15
Entonces el profeta Jeremías dijo al profeta Ananías: --Escucha,
Ananías: Jehovah no te ha enviado, y Tú has hecho que este
pueblo Confíe en la mentira.
16
Por tanto, Así ha dicho Jehovah: "He Aquí, yo te quito de sobre
la faz de la tierra. Morirás en este mismo año, porque incitaste
a la Rebelión contra Jehovah."
17
En el mismo año, en el mes séptimo, Murió Ananías.
Estas son las palabras de la carta que el profeta Jeremías Envió
de Jerusalén al resto de los ancianos de la cautividad, a los sacerdotes,
a los profetas y a todo el pueblo, que Nabucodonosor Había llevado
cautivo de Jerusalén a Babilonia.
2
Esto Sucedió después de haber salido de Jerusalén el
rey Joaquín y la reina madre, los funcionarios, los magistrados de
Judá y de Jerusalén, los artesanos y los herreros.
3
La carta fue enviada por medio de Elasa hijo de Safán y de Gemarías
hijo de Hilquías, a quienes Sedequías rey de Judá
Envió a Babilonia, a Nabucodonosor rey de Babilonia. Y Decía:
4
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: "A todos
los que Están en la cautividad, a quienes hice llevar cautivos de
Jerusalén a Babilonia:
5
Edificad casas y habitadlas. Plantad huertos y comed del fruto de ellos.
6
Contraed matrimonio y engendrad hijos e hijas. Tomad mujeres para vuestros
hijos y dad vuestras hijas en matrimonio, para que den a luz hijos e hijas.
Multiplicaos Allí, y no Disminuyáis.
7
Procurad el bienestar de la ciudad a la cual os hice llevar cautivos. Rogad
por ella a Jehovah, porque en su bienestar tendréis vosotros bienestar."
8
Porque Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel:
"No os engañen vuestros profetas que Están entre vosotros,
ni vuestros encantadores. No prestéis Oído a sus sueños
que ellos sueñan.
9
Pues ellos os profetizan falsamente en mi nombre. Yo no los envié",
dice Jehovah.
10
Porque Así ha dicho Jehovah: "Cuando Según mi dicho se cumplan
setenta años para Babilonia, os visitaré con mi favor y os
cumpliré mi buena promesa de haceros regresar a este lugar.
11
Porque yo sé los planes que tengo acerca de vosotros, dice Jehovah,
planes de bienestar y no de mal, para daros porvenir y esperanza.
12
Entonces me invocaréis. Vendréis y oraréis a Mí,
y yo os escucharé.
13
Me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis con
todo vuestro Corazón.
14
Me dejaré hallar de vosotros, dice Jehovah, y os restauraré
de vuestra cautividad. Os reuniré de todas las naciones y de todos
los lugares a donde os he expulsado, dice Jehovah. Y os haré volver
al lugar de donde hice que os llevaran cautivos."
15
Vosotros habéis dicho: "Jehovah nos ha levantado profetas en Babilonia."
16
Pero Así ha dicho Jehovah acerca del rey que Está sentado sobre
el trono de David y de todo el pueblo que habita en esta ciudad, vuestros
hermanos que no salieron en cautividad con vosotros;
17
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: "He Aquí, yo
Envío contra ellos la espada, el hambre y la peste. Procederé
con ellos como con los higos malos, que por ser tan malos no se pueden comer.
18
Los perseguiré con espada, con hambre y con peste. Haré que
sean motivo de espanto para todos los reinos de la tierra, y Maldición,
horror, rechifla y afrenta ante todas las naciones a las cuales los he expulsado,
19
dice Jehovah, porque no escucharon mis palabras que persistentemente os he
enviado por medio de mis siervos los profetas. Y no habéis escuchado",
dice Jehovah.
20
Oíd, pues, la palabra de Jehovah, vosotros todos los expatriados que
eché de Jerusalén a Babilonia.
21
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel, acerca
de Acab hijo de Colías y de Sedequías hijo de Maasías,
quienes os profetizan falsamente en mi nombre: "He Aquí, yo los entrego
en mano de Nabucodonosor rey de Babilonia, y él los Matará
ante vuestros ojos.
22
De ellos se Derivará esta Maldición para todos los expatriados
de Judá que Están en Babilonia: 'Jehovah te haga como a
Sedequías y como a Acab, a quienes el rey de Babilonia los Asó
al fuego.'
23
Porque hicieron infamia en Israel, cometiendo adulterio con las mujeres de
sus Prójimos, y porque en mi nombre hablaron falsamente palabras que
no les mandé, lo cual yo lo sé y soy testigo", dice Jehovah.
24
Y a Semaías de Nejelam Hablarás diciendo
25
que Así ha hablado Jehovah de los Ejércitos, por cuanto en
tu propio nombre enviaste cartas a todo el pueblo que Está en
Jerusalén, al sacerdote Sofonías hijo de Maasías y a
todos los Demás sacerdotes, diciendo:
26
"Jehovah te ha hecho sacerdote en lugar del sacerdote Joyada, para que en
la casa de Jehovah te encargues de todo hombre loco que se ponga a profetizar,
y lo metas en el cepo y en el collar de hierro.
27
Ahora pues, ¿por qué no has reprendido a Jeremías de Anatot,
que os profetiza?
28
Porque por cierto nos ha enviado a decir en Babilonia: 'Largo va a ser el
cautiverio. Edificad casas y habitadlas; plantad huertos y comed del fruto
de ellos...'"
29
El sacerdote Sofonías Leyó esta carta a Oídos del profeta
Jeremías.
30
Y vino la palabra de Jehovah a Jeremías, diciendo:
31
"Manda decir a todos los expatriados que Así ha dicho Jehovah acerca
de Semaías de Nejelam: 'Porque Semaías os Profetizó
sin que yo lo enviara, y os hizo confiar en una mentira,
32
por eso Así ha dicho Jehovah: He Aquí que yo castigaré
a Semaías de Nejelam y a su descendencia. No Tendrá un solo
hombre que habite en medio de este pueblo, ni Verá el bien que haré
a mi pueblo, dice Jehovah, porque ha incitado a la Rebelión contra
Jehovah.'"
La palabra de Jehovah que vino a Jeremías, diciendo
2
"Así ha dicho Jehovah Dios de Israel: 'Escribe en un libro todas estas
palabras que te he hablado.
3
Porque he Aquí vienen Días, dice Jehovah, en que restauraré
de la cautividad a mi pueblo Israel y a Judá, ha dicho Jehovah. Los
haré volver a la tierra que di a sus padres, y Tomarán
Posesión de ella.'"
4
Estas son las palabras que Habló Jehovah acerca de Israel y de Judá.
5
Así ha dicho Jehovah: "Hemos Oído una voz de estremecimiento;
hay terror, y no hay paz.
6
Preguntad, pues, y mirad: ¿Acaso un Varón da a luz? ¿Por
qué he visto a todo hombre con las manos sobre las caderas como una
mujer que da a luz, y todas las caras se han vuelto Pálidas?
7
¡Oh, Cuán grande Será aquel Día; tanto, que no
hay otro semejante a él! Será tiempo de angustia para Jacob,
pero Será librado de él.
8
"Sucederá en aquel Día, dice Jehovah de los Ejércitos,
que yo quebraré el yugo de sobre su cuello y romperé sus coyundas.
Los extraños no Volverán a someterlo a servidumbre.
9
Más bien, Servirán a Jehovah su Dios y a David su rey, a quien
yo levantaré para ellos.
10
"Pero Tú no temas, oh siervo Mío Jacob, ni desmayes, oh Israel,
dice Jehovah. Porque he Aquí, yo soy el que te salva desde lejos;
y a tu descendencia, de la tierra de su cautividad. Jacob Volverá
y Estará tranquilo; Estará confiado, y no Habrá quien
lo atemorice.
11
Porque yo estoy contigo para salvarte, dice Jehovah. Ciertamente haré
exterminio en todas las naciones entre las cuales te he dispersado; pero
en ti no haré exterminio, sino que te castigaré con justicia.
De ninguna manera te daré por inocente.
12
Porque Así ha dicho Jehovah: Tu quebranto es incurable, y tu herida
es grave.
13
No hay quien juzgue tu causa; no tienes remedio eficaz para tu úlcera.
14
Todos tus amantes se han olvidado de ti; ya no te buscan. Porque te he herido
como a enemigo con castigo de hombre cruel, a causa del gran Número
de tus maldades y de la multitud de tus pecados.
15
¿Por qué gritas por tu quebranto? Tu dolor es incurable, porque
por la grandeza de tu iniquidad y por tus muchos pecados te he hecho esto.
16
Pero todos los que te devoran Serán devorados; y todos tus enemigos,
todos ellos, Irán en cautividad. Los que te saquean Serán
Víctimas del saqueo, y a todos los que te despojan los entregaré
al despojo.
17
Porque yo te traeré sanidad y curaré tus heridas, dice Jehovah;
pues te han llamado Desechada, diciendo: 'Esta es Sion, a quien nadie busca.'"
18
Así ha dicho Jehovah: "He Aquí, yo restauraré de la
cautividad las tiendas de Jacob; de sus moradas tendré misericordia.
La ciudad Será reedificada sobre su Montículo de escombros,
y el palacio Quedará en su lugar.
19
Acciones de gracias Saldrán de ellos, y la voz de los que se regocijan.
Los multiplicaré, y no Serán disminuidos. Los honraré,
y no Serán insignificantes.
20
Sus hijos Serán como en el pasado, y su Congregación Tendrá
estabilidad delante de Mí. Y castigaré a todos sus opresores.
21
"Uno de ellos Será su soberano, y de en medio de ellos Saldrá
su gobernante. Yo le haré acercarse, y él se Llegará
a Mí. Porque, ¿quién es aquel que arriesga su Corazón
para acercarse a Mí?, dice Jehovah.
22
Vosotros seréis mi pueblo, y yo seré vuestro Dios.
23
"He Aquí que el Huracán de Jehovah sale con furor. Es un
Huracán que gira e irrumpe sobre la cabeza de los Impíos.
24
No se Apartará el ardor de la ira de Jehovah hasta que haya hecho
y cumplido los Propósitos de su Corazón. Al final de los Días
lo entenderéis.
"En aquel tiempo, dice Jehovah, yo seré el Dios de todas las familias
de Israel; y ellos Serán mi pueblo.
2
Así ha dicho Jehovah: Cuando Israel iba en pos de su reposo, el pueblo
que Había sobrevivido de la espada Halló gracia en el desierto."
3
Jehovah me ha aparecido desde hace mucho tiempo, diciendo: "Con amor eterno
te he amado; por tanto, te he prolongado mi misericordia.
4
Otra vez he de edificarte, y Serás edificada, oh virgen de Israel.
Otra vez Serás adornada con tus panderos y Saldrás en las danzas
de los que se regocijan.
5
Otra vez Plantarás viñas en los montes de Samaria, y los que
las planten Gozarán del fruto.
6
Porque Habrá un Día en que Gritarán los guardias en
la Región montañosa de Efraín: '¡Levantaos, y subamos
a Sion, a Jehovah, nuestro Dios!'"
7
Porque Así ha dicho Jehovah: "Regocijaos con Alegría a causa
de Jacob, y gritad de Júbilo ante la cabeza de las naciones. Proclamad,
alabad y decid: '¡Oh Jehovah, salva a tu pueblo, al remanente de Israel!'
8
"He Aquí, yo los traigo de la tierra del norte, y los reuniré
de los confines de la tierra. Entre ellos Vendrán los ciegos y los
cojos, la mujer encinta y la que da a luz. Como una gran multitud Volverán
Acá.
9
Vendrán con llanto, pero con consuelo los guiaré y los
conduciré junto a los arroyos de aguas, por un camino parejo en el
cual no Tropezarán. Porque yo soy un Padre para Israel, y Efraín
es mi primogénito."
10
¡Oh naciones, escuchad la palabra de Jehovah y hacedlo saber en las
costas lejanas! Decid: "El que Dispersó a Israel lo Reunirá
y lo Guardará, como el pastor guarda su rebaño."
11
Porque Jehovah ha rescatado a Jacob; lo ha redimido de mano del que es Más
fuerte que él.
12
Vendrán y Darán alabanza en la cumbre de Sion. Correrán
hacia la bondad de Jehovah: al grano, al vino nuevo, al aceite y a las
Crías de las ovejas y de las vacas. Su vida Será como huerto
de riego; nunca Más Volverán a languidecer.
13
"Entonces la virgen se Regocijará en la danza, y los Jóvenes
y los ancianos juntamente. Porque transformaré su duelo en regocijo;
los consolaré y los alegraré en su dolor.
14
Colmaré de abundancia el alma del sacerdote, y mi pueblo se Saciará
de mi bondad", dice Jehovah.
15
Así ha dicho Jehovah: "Voz fue Oída en Ramá; lamento
y llanto amargo. Raquel lloraba por sus hijos, y no Quería ser consolada
por sus hijos, porque perecieron."
16
Así ha dicho Jehovah: "Reprime tu voz del llanto y tus ojos de las
Lágrimas, porque tu obra tiene recompensa, dice Jehovah. Ellos
Volverán de la tierra del enemigo.
17
Hay esperanza para tu porvenir; tus hijos Volverán a su territorio,
dice Jehovah.
18
"Ciertamente yo he Oído a Efraín que se lamentaba diciendo:
'Me azotaste, y fui castigado como novillo Indómito. Hazme volver,
y volveré; porque Tú eres Jehovah mi Dios.
19
Porque después de desviarme, me Arrepentí; y después
de darme cuenta, golpeé mi muslo. Fui avergonzado y también
afrentado, porque he llevado el oprobio de mi juventud.'
20
"¿Acaso no es Efraín un hijo querido para Mí? ¿Acaso
no es un niño precioso? Porque cada vez que hablo contra él,
lo recuerdo Más. Por eso mis entrañas se enternecen por él.
Ciertamente tendré misericordia de él, dice Jehovah.
21
"Levanta señales, pon indicadores de caminos. Pon Atención
al camino principal, el camino por el cual caminaste. Vuelve, oh virgen de
Israel; vuelve a estas tus ciudades.
22
¿Hasta Cuándo Andarás de un lado para otro, oh hija rebelde?
Pues Jehovah Hará una novedad en la tierra: La mujer Rodeará
al hombre."
23
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: "Cuando
yo los restaure de su cautividad, Dirán otra vez estas palabras en
la tierra de Judá y en sus ciudades: '¡Jehovah te bendiga, oh
morada de justicia, oh monte santo!'
24
Y Habitarán juntos en ella Judá y todas sus ciudades, los
labradores y los que se desplazan con los rebaños.
25
Porque he de saciar al alma fatigada, y he de llenar a toda alma que languidece."
26
En esto desperté y vi que mi sueño Había sido placentero.
27
"He Aquí que vienen Días, dice Jehovah, en que sembraré
la casa de Israel y la casa de Judá con simiente de hombres y con
simiente de animales.
28
Sucederá que como he vigilado sobre ellos para arrancar, desmenuzar,
arruinar, destruir y hacer daño, Así vigilaré sobre
ellos para edificar y plantar, dice Jehovah.
29
"En aquellos Días no Dirán Más: 'Los padres comieron
las uvas agrias, y los dientes de los hijos sufren la dentera';
30
sino que cada cual Morirá por su propio pecado. Los dientes de todo
hombre que coma las uvas agrias Sufrirán la dentera.
31
"He Aquí vienen Días, dice Jehovah, en que haré un nuevo
pacto con la casa de Israel y con la casa de Judá.
32
No Será como el pacto que hice con sus padres el Día que los
tomé de la mano para sacarlos de la tierra de Egipto, mi pacto que
ellos invalidaron, a pesar de ser yo su señor, dice Jehovah.
33
Porque éste Será el pacto que haré con la casa de Israel
después de aquellos Días, dice Jehovah: Pondré mi ley
en su interior y la escribiré en su Corazón. Yo seré
su Dios, y ellos Serán mi pueblo.
34
Ya nadie Enseñará a su Prójimo, ni nadie a su hermano,
diciendo: 'Conoce a Jehovah.' Pues todos ellos me Conocerán, desde
el Más pequeño de ellos hasta el Más grande, dice Jehovah.
Porque yo perdonaré su iniquidad y no me acordaré Más
de su pecado."
35
Así ha dicho Jehovah, quien da el sol para luz del Día, y la
luna y las estrellas para luz de la noche, el que agita el mar de manera
que rugen sus olas--Jehovah de los Ejércitos es su nombre--:
36
"Si esas leyes faltasen delante de Mí, dice Jehovah, entonces la
descendencia de Israel Dejaría de ser Nación delante de Mí,
perpetuamente."
37
Así ha dicho Jehovah: "Si se pueden medir los cielos arriba y se pueden
explorar los cimientos de la tierra abajo, entonces yo desecharé toda
la descendencia de Israel por todo lo que hicieron, dice Jehovah.
38
"He Aquí que vienen Días, dice Jehovah, en que la ciudad Será
edificada para Jehovah desde la torre de Hananeel hasta la puerta de la Esquina.
39
El cordel de medir Irá directamente hasta la colina de Gareb, y Dará
la vuelta hacia Goa.
40
Todo el valle de los Cadáveres y de las cenizas, y todas las terrazas
hasta el arroyo de Quedrón, hasta la esquina de la puerta de los Caballos,
al este, Estará consagrado a Jehovah. Nunca Más Será
arrancada ni destruida."
La palabra que vino a Jeremías de parte de Jehovah en el año
10 de Sedequías, rey de Judá, que fue el año 18 de
Nabucodonosor.
2
En aquel entonces el ejército del rey de Babilonia Tenía sitiada
a Jerusalén. Y el profeta Jeremías estaba preso en el patio
de la guardia que estaba en la casa del rey de Judá,
3
porque Sedequías, el rey de Judá, lo Había apresado,
diciéndole: "¿Por qué profetizas diciendo que Así
ha dicho Jehovah: 'He Aquí, yo entrego esta ciudad en mano del rey
de Babilonia, y él la Tomará;
4
Sedequías, rey de Judá, no Escapará de mano de los caldeos,
sino que ciertamente Será entregado en mano del rey de Babilonia y
Hablará con él cara a cara, y sus ojos Verán sus ojos;
5
él Hará llevar a Sedequías a Babilonia y Estará
Allá hasta que yo le visite, dice Jehovah, y aunque Combatáis
contra los caldeos, no tendréis éxito'?"
6
Jeremías dijo: Vino a Mí la palabra de Jehovah, diciendo:
7
"He Aquí que Hanameel, hijo de tu Tío Salum, viene a ti para
decir: 'Compra mi campo que Está en Anatot, porque tuyo es el derecho
de Redención para adquirirlo.'"
8
Y vino a Mí Hanameel, hijo de mi Tío, al patio de la guardia,
conforme a la palabra de Jehovah, y me dijo: "Compra, por favor, mi campo
que Está en Anatot, en tierra de Benjamín; porque tuyo es el
derecho de Posesión, y a ti te corresponde la Redención.
Cómpralo para ti." Entonces Comprendí que Había sido
palabra de Jehovah;
9
y compré el campo de Hanameel, hijo de mi Tío, el cual estaba
en Anatot. Le pesé el dinero: 17 siclos de plata.
10
Luego Escribí el documento y lo sellé. Convoqué a los
testigos y pesé la plata en la balanza.
11
Luego tomé el documento de la compra, sellado, con las obligaciones
y los términos, y la copia abierta.
12
Entregué el documento de la compra a Baruc hijo de Nerías,
hijo de Maasías, en presencia de Hanameel, hijo de mi Tío,
en presencia de los testigos que Habían firmado el documento de la
compra y en presencia de todos los Judíos que Permanecían en
el patio de la guardia.
13
Luego mandé a Baruc, en presencia de ellos, diciendo que
14
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: "Toma
estos documentos (el documento de compra sellado y la copia abierta), y ponlos
en una vasija de Cerámica para que se conserven por mucho tiempo.
15
Porque Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel:
'Todavía se Comprarán casas, campos y viñas en esta
tierra.'"
16
Después que di el documento de compra a Baruc hijo de Nerías,
oré a Jehovah diciendo:
17
"¡Oh Señor Jehovah! He Aquí que Tú has hecho el
cielo y la tierra con tu gran poder y con tu brazo extendido. Nada hay que
sea Difícil para ti.
18
Tú haces misericordia a millares, pero retribuyes la maldad de los
padres en el seno de sus hijos después de ellos. ¡Oh Dios grande
y poderoso, cuyo nombre es Jehovah de los Ejércitos!
19
Grande eres en designios y Magnífico en hechos, pues tus ojos Están
abiertos sobre todos los caminos de los hijos del hombre, para dar a cada
uno Según sus caminos y Según el fruto de sus obras.
20
Has hecho señales y prodigios en la tierra de Egipto, y hasta este
Día en Israel y entre todos los hombres. Así te has hecho de
renombre, como en este Día.
21
Sacaste a tu pueblo Israel de la tierra de Egipto, con señales y
prodigios, con mano poderosa, con brazo extendido y con gran terror.
22
Y les diste esta tierra, de la cual juraste a sus padres que se la Darías:
una tierra que fluye leche y miel.
23
Ellos entraron y tomaron Posesión de ella; pero no escucharon tu voz,
ni anduvieron en tu ley, ni hicieron nada de lo que les mandaste hacer. Por
eso has hecho que les ocurriera todo este mal.
24
"He Aquí que los terraplenes ya han alcanzado hasta la ciudad para
tomarla. La ciudad va a ser entregada en mano de los caldeos que combaten
contra ella, a causa de la espada, del hambre y de la peste. Ha llegado a
suceder lo que dijiste; y he Aquí, Tú lo Estás viendo.
25
Sin embargo, oh Señor Jehovah, aun cuando la ciudad es entregada en
mano de los caldeos, Tú me dices: 'Cómprate el campo por dinero
y convoca testigos.'"
26
Entonces vino la palabra de Jehovah a Jeremías, diciendo:
27
"He Aquí que yo soy Jehovah, Dios de todo mortal. ¿Habrá
alguna cosa Difícil para Mí?
28
Por tanto, Así ha dicho Jehovah: He Aquí, yo voy a entregar
esta ciudad en mano de los caldeos y en mano de Nabucodonosor, rey de Babilonia;
y él la Tomará.
29
Vendrán los caldeos que combaten contra esta ciudad, le Prenderán
fuego y la Incendiarán; asimismo, a las casas sobre cuyas azoteas
quemaban incienso a Baal y derramaban libaciones a otros dioses,
Provocándome a ira.
30
Porque los hijos de Israel y los hijos de Judá no han hecho desde
su juventud sino lo malo ante mis ojos. Porque los hijos de Israel no han
hecho Más que provocarme a ira con la obra de sus manos, dice Jehovah.
31
Porque esta ciudad me ha provocado a ira e Indignación desde el Día
en que la edificaron y hasta el Día de hoy, de manera que la quitaré
de mi presencia,
32
por toda la maldad que los hijos de Israel y los hijos de Judá han
hecho, Provocándome a ira: ellos, sus reyes, sus magistrados, sus
sacerdotes, sus profetas, los hombres de Judá y los habitantes de
Jerusalén.
33
Ellos me dieron la espalda y no la cara. Y a pesar de que les he enseñado
persistentemente, no han escuchado para recibir Corrección.
34
Más bien, han puesto sus ídolos abominables en el templo que
es llamado por mi nombre, Contaminándolo.
35
Han edificado lugares altos a Baal, que Están en el valle de Ben-hinom,
para hacer pasar por fuego a sus hijos y a sus hijas a Moloc; lo cual no
les mandé ni me vino a la mente que hiciesen esta Abominación,
para hacer pecar a Judá."
36
Ahora pues, Así ha dicho Jehovah Dios de Israel: "Con todo, en cuanto
a esta ciudad de la cual Decís: 'En mano del rey de Babilonia Será
entregada por la espada, por el hambre y por la peste',
37
he Aquí que yo los reuniré de todos los Países a los
cuales los he expulsado en mi furor, con mi ira y con gran Indignación.
Los haré volver a este lugar y les haré habitar seguros.
38
Ellos Serán mi pueblo, y yo seré su Dios.
39
Les daré un solo Corazón y un solo camino, a fin de que me
teman perpetuamente, para su propio bien y para el bien de sus hijos
después de ellos.
40
Haré con ellos un pacto eterno; no desistiré de hacerles bien.
Pondré mi temor en el Corazón de ellos, para que no se aparten
de Mí.
41
Me regocijaré por causa de ellos al hacerles el bien. Los plantaré
en esta tierra con verdad, con todo mi Corazón y con toda mi alma."
42
Porque Así ha dicho Jehovah: "Así como traje sobre este pueblo
todo este gran mal, Así traeré sobre ellos todo el bien que
hablo acerca de ellos.
43
Y se Comprarán campos en esta tierra de la cual vosotros Decís:
'Está desolada, sin hombres y sin animales, y es entregada en mano
de los caldeos.'
44
Comprarán campos por dinero; Harán documentos, los Sellarán
y Llamarán testigos, en tierra de Benjamín, en los alrededores
de Jerusalén y en las ciudades de Judá, en las ciudades de
la Región montañosa, en las ciudades de la Sefela y en las
ciudades del Néguev, porque yo les restauraré de su cautividad",
dice Jehovah.
Vino por segunda vez la palabra de Jehovah a Jeremías, estando él
Todavía detenido en el patio de la guardia, y dijo:
2
"Así ha dicho Jehovah, quien hizo la tierra, Jehovah que la Formó
para afirmarla--Jehovah es su nombre--:
3
'Clama a Mí, y te responderé; y te revelaré cosas grandes
e inaccesibles que Tú no conoces.
4
Porque Así ha dicho Jehovah Dios de Israel acerca de las casas de
esta ciudad y de las casas de los reyes de Judá, que fueron derribadas
para construir defensas contra los terraplenes y la espada:
5
Los caldeos vienen para combatir contra ellos y para llenarlas de Cadáveres
de hombres, a quienes he herido con mi furor y con mi ira, pues he escondido
mi rostro de esta ciudad a causa de toda su maldad.
6
"He Aquí que yo les traeré medicina y sanidad. Yo los sanaré
y les revelaré tiempos de paz y de verdad.
7
Restauraré de la cautividad a Judá y a Israel, y los
edificaré como al principio.
8
Los limpiaré de toda la maldad con que pecaron contra Mí;
perdonaré todos sus pecados con que pecaron y se rebelaron contra
Mí.
9
Y esta ciudad me Será motivo de regocijo, de alabanza y de gloria
para todas las naciones de la tierra que Oirán de todo el bien que
yo les haré. Temerán y se Estremecerán por todo el bien
y por toda la paz que yo les haré."
10
Así ha dicho Jehovah: "En este lugar del cual Decís que Está
destruido, sin hombres y sin animales, en las ciudades de Judá y en
las calles de Jerusalén (que Están desoladas, sin hombres,
sin habitantes y sin animales),
11
Todavía se ha de escuchar la voz del gozo y la voz de la Alegría,
la voz del novio y la voz de la novia, la voz de los que al traer sacrificios
de Acción de gracias a la casa de Jehovah, digan: 'Alabad a Jehovah
de los Ejércitos, porque Jehovah es bueno; porque para siempre es
su misericordia.' Porque restauraré de su cautividad a la tierra,
como al principio", ha dicho Jehovah.
12
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: "En este lugar destruido,
sin hombres y sin animales, y en todas sus ciudades, otra vez Habrá
pastizales donde los pastores hagan recostar a sus ovejas.
13
Otra vez Pasarán las ovejas bajo las manos de quien las cuente en
las ciudades de la Región montañosa, en las ciudades de la
Sefela, en las ciudades del Néguev, en la tierra de Benjamín,
alrededor de Jerusalén y en las ciudades de Judá, ha dicho
Jehovah.
14
"He Aquí vienen Días, dice Jehovah, en que yo cumpliré
la buena promesa que he hecho a la casa de Israel y a la casa de Judá.
15
En aquellos Días y en aquel tiempo haré brotar para David un
Retoño de justicia, que Practicará el derecho y la justicia
en la tierra.
16
En aquellos Días Será salvo Judá, y Jerusalén
Habitará segura. Y éste es el nombre con el cual Será
llamada: 'Jehovah, justicia nuestra.'
17
Porque Así ha dicho Jehovah: No Faltará a David un hombre que
se siente sobre el trono de la casa de Israel.
18
Tampoco a los sacerdotes, los levitas, les Faltará en mi presencia
un hombre que ofrezca holocausto, encienda ofrenda vegetal y presente sacrificios
perpetuamente."
19
Vino a Jeremías la palabra de Jehovah, diciendo:
20
"Así ha dicho Jehovah: 'Si podéis invalidar mi pacto con el
Día y mi pacto con la noche, de modo que no haya Día ni noche
a su tiempo,
21
entonces también Podrá ser invalidado mi pacto con mi siervo
David para que deje de tener un hijo que reine sobre su trono, y mi pacto
con los levitas, los sacerdotes que me sirven.
22
Como no puede ser contado el ejército del cielo, ni se puede medir
la arena del mar, Así multiplicaré la descendencia de mi siervo
David y de los levitas que me sirven.'"
23
Vino a Jeremías la palabra de Jehovah, diciendo:
24
"¿No has observado lo que ha hablado este pueblo, diciendo: 'Jehovah
ha desechado a las dos familias que Escogió'? Han tenido en poco a
mi pueblo, hasta no considerarlo Más como Nación.
25
Así ha dicho Jehovah: Si no he establecido mi pacto con el Día
y la noche, y si no he puesto las leyes del cielo y de la tierra,
26
entonces desecharé la descendencia de Jacob y a mi siervo David, para
no tomar de su descendencia quien gobierne a la descendencia de Abraham,
de Isaac y de Jacob. Porque los restauraré de su cautividad y tendré
de ellos misericordia."
La palabra que vino a Jeremías de parte de Jehovah (cuando Nabucodonosor
rey de Babilonia, todo su ejército, todos los reinos de la tierra
que estaban bajo el Señorío de su mano y todos los pueblos
Combatían contra Jerusalén y contra sus ciudades), diciendo
2
que Así ha dicho Jehovah Dios de Israel: "Vé y habla a
Sedequías, rey de Judá, y dile que Así ha dicho Jehovah:
He Aquí, yo entrego esta ciudad en mano del rey de Babilonia, y la
Incendiará.
3
Tú no Escaparás de su mano, sino que ciertamente Serás
apresado y entregado en su mano. Tus ojos Verán los ojos del rey de
Babilonia; él te Hablará cara a cara, y Entrarás en
Babilonia.
4
No obstante, escucha la palabra de Jehovah, oh Sedequías, rey de
Judá. Así ha dicho Jehovah acerca de ti: No Morirás
a espada.
5
En paz Morirás; y como se Quemó incienso por tus padres, los
reyes que te precedieron, Así se Quemará por ti. Y Harán
Lamentación por ti diciendo: '¡Ay señor!', porque yo he
hablado la palabra", dice Jehovah.
6
El profeta Jeremías Habló todas estas palabras a Sedequías,
rey de Judá, en Jerusalén.
7
El ejército del rey de Babilonia Combatía contra Jerusalén
y contra las ciudades de Judá que Habían quedado: contra Laquis
y contra Azeca. Porque Sólo éstas Habían quedado de
las ciudades fortificadas de Judá.
8
La palabra que vino a Jeremías de parte de Jehovah, después
que el rey Sedequías hizo pacto con todo el pueblo en Jerusalén
para promulgarles libertad,
9
a fin de que cada uno dejase libre a su esclavo o a su esclava hebreos, de
modo que ninguno se sirviese de sus hermanos Judíos como esclavos.
10
Oyeron esto todos los magistrados y todo el pueblo que Habían participado
en el pacto de dejar en libertad, cada uno a su esclavo o a su esclava, para
que ninguno se sirviese Más de ellos como esclavos, y obedecieron
Dejándoles en libertad.
11
Pero después cambiaron de parecer e hicieron volver a los esclavos
y a las esclavas que Habían dejado en libertad, y los sometieron como
esclavos y esclavas.
12
Entonces la palabra de Jehovah vino a Jeremías, de parte de Jehovah,
diciendo:
13
"Yo hice pacto con vuestros padres, ha dicho Jehovah Dios de Israel, el Día
que los saqué de la tierra de Egipto, de casa de esclavitud, diciendo:
14
'Cada siete años dejaréis en libertad, cada uno a su hermano
hebreo que se os haya vendido. Te Servirá seis años, y lo
Dejarás ir libre de ti.' Pero vuestros padres no me escucharon, ni
inclinaron su Oído.
15
Ahora vosotros os Habíais vuelto a Mí y Habíais hecho
lo recto ante mis ojos, al proclamar libertad cada uno a su Prójimo,
y Habíais hecho un pacto en mi presencia, en el templo sobre el cual
es invocado mi nombre.
16
Pero os habéis vuelto Atrás profanando mi nombre, y habéis
vuelto a tomar cada uno a su esclavo y cada una a su esclava que Habíais
dejado en libertad, a su entera voluntad; y los habéis sometido para
seros esclavos y esclavas.
17
Por tanto, Así ha dicho Jehovah, vosotros no me habéis obedecido
en proclamar cada uno libertad a su hermano, y cada uno a su Prójimo.
He Aquí, dice Jehovah, yo os proclamo libertad para la espada, para
la peste y para el hambre. Haré que Seáis motivo de espanto
a todos los reinos de la tierra.
18
Haré que los hombres que traspasaron mi pacto y que no han cumplido
las palabras del pacto que hicieron en mi presencia, sean como el becerro
que dividieron en dos partes y pasaron en medio de las mitades.
19
A los magistrados de Judá y a los magistrados de Jerusalén,
a los funcionarios, a los sacerdotes y a todo el pueblo de la tierra que
pasaron entre las partes del becerro,
20
los entregaré en mano de sus enemigos y en mano de los que buscan
sus vidas; y sus Cadáveres Servirán de comida a las aves del
cielo y a los animales de la tierra.
21
Y a Sedequías rey de Judá y a sus oficiales entregaré
en mano de sus enemigos, en mano de los que buscan sus vidas y en mano del
ejército del rey de Babilonia, quienes se han retirado de vosotros.
22
He Aquí, yo daré órdenes y les haré volver a
esta ciudad, dice Jehovah. Ellos Combatirán contra ella; la Tomarán
y la Incendiarán. Y a las ciudades de Judá las convertiré
en una Desolación, de modo que no haya quien las habite."
La palabra que vino a Jeremías de parte de Jehovah en los Días
de Joacim hijo de Josías, rey de Judá, diciendo:
2
"Vé a la familia de los recabitas, habla con ellos, Tráelos
a la casa de Jehovah, a una de las Cámaras, y dales de beber vino."
3
Entonces tomé a Jazanías hijo de Jeremías, hijo de
Habasinías, a sus hermanos, a todos sus hijos y a toda la familia
de los recabitas.
4
Y los traje a la casa de Jehovah, a la Cámara de los hijos de Hanán
hijo de Igdalías, hombre de Dios, la cual estaba junto a la Cámara
de los magistrados, que estaba encima de la Cámara de Maasías
hijo de Salum, guardia de la puerta.
5
Y puse delante de los miembros de la familia de los recabitas tazones llenos
de vino, y vasos, y les dije: --Bebed vino.
6
Pero ellos dijeron: --No beberemos vino, porque nuestro padre Jonadab hijo
de Recab nos Mandó diciendo: "No beberéis vino Jamás,
ni vosotros ni vuestros hijos.
7
No edificaréis casas, ni sembraréis semilla, ni plantaréis
viñas, ni las poseeréis. Más bien, habitaréis
en tiendas todos vuestros Días, para que Viváis muchos Días
sobre la faz de la tierra donde vosotros Vivís."
8
Y nosotros hemos obedecido la voz de nuestro padre Jonadab hijo de Recab
en todas las cosas que nos Mandó: de no beber vino en todos nuestros
Días, ni nosotros, ni nuestras mujeres, ni nuestros hijos, ni nuestras
hijas;
9
de no edificar casas para habitar en ellas, y de no tener viñas, ni
campos ni semilla.
10
Hemos habitado en tiendas y hemos obedecido, haciendo conforme a todo lo
que nos Mandó nuestro padre Jonadab.
11
Pero Sucedió que cuando Nabucodonosor rey de Babilonia Subió
contra el País, dijimos: "Vayamos y entremos en Jerusalén,
a causa del ejército de los caldeos y del ejército de los de
Siria." Y en Jerusalén nos hemos quedado.
12
Entonces vino la palabra de Jehovah a Jeremías, diciendo:
13
--Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: "Vé
y di a los hombres de Judá y a los habitantes de Jerusalén:
'¿No aceptaréis Corrección para obedecer a mis palabras?',
dice Jehovah.
14
Las palabras de Jonadab hijo de Recab, que Mandó a sus hijos que no
bebiesen vino, han sido cumplidas, y no lo han bebido hasta el Día
de hoy, porque han obedecido el mandamiento de su padre. Sin embargo, yo
os he hablado a vosotros persistentemente, y no me habéis obedecido.
15
Os he enviado persistentemente todos mis siervos los profetas, para deciros:
'Apartaos, cada uno de su mal camino; enmendad vuestras obras y no Vayáis
tras otros dioses para servirlos, y habitaréis en la tierra que os
he dado a vosotros y a vuestros padres.' Pero no habéis inclinado
vuestro Oído, ni me habéis obedecido.
16
Ciertamente los hijos de Jonadab hijo de Recab han cumplido el mandamiento
que les dio su padre, pero este pueblo no me ha obedecido.
17
Por tanto, Así ha dicho Jehovah Dios de los Ejércitos, Dios
de Israel: "He Aquí, yo traeré sobre Judá y sobre todos
los habitantes de Jerusalén todo el mal del que he hablado contra
ellos. Porque les hablé, y no escucharon; los llamé, y no
respondieron."
18
Entonces dijo Jeremías a la familia de los recabitas: --Así
ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: "Porque habéis
obedecido el mandamiento de vuestro padre Jonadab; porque habéis guardado
todos sus mandamientos y habéis hecho conforme a todas las cosas que
os Mandó,
19
por esto no Faltará un hombre a Jonadab hijo de Recab que esté
de pie delante de Mí todos los Días", ha dicho Jehovah de los
Ejércitos, Dios de Israel.
Aconteció en el cuarto año de Joacim hijo de Josías,
rey de Judá, que vino a Jeremías esta palabra de parte de Jehovah,
diciendo:
2
"Toma un rollo de pergamino y escribe en él todas las palabras que
te he hablado contra Israel, contra Judá y contra todas las naciones,
desde el Día que comencé a hablarte, en los Días de
Josías, hasta el Día de hoy.
3
Quizás la casa de Judá oiga de todo el mal que yo pienso hacerles,
y se vuelva cada uno de su mal camino, para que yo perdone su maldad y su
pecado."
4
Entonces Jeremías Llamó a Baruc hijo de Nerías, y Baruc
Escribió en un rollo de pergamino todas las palabras que Jehovah le
Había hablado, Según el dictado de Jeremías.
5
Después Jeremías Mandó a Baruc diciendo: "Yo estoy impedido;
no puedo entrar en la casa de Jehovah.
6
Pues entra Tú en la casa de Jehovah en un Día de ayuno, y lee
del rollo las palabras de Jehovah que te he dictado, a Oídos del pueblo,
y también a Oídos de todos los de Judá que vienen de
sus ciudades.
7
Quizás la Súplica de ellos llegue a la presencia de Jehovah,
y se vuelva cada uno de su mal camino. Porque grande es el furor y la ira
que Jehovah ha expresado contra este pueblo."
8
Baruc hijo de Nerías hizo conforme a todo lo que le Mandó el
profeta Jeremías, y Leyó del libro las palabras de Jehovah,
en la casa de Jehovah.
9
Sucedió en el mes noveno del quinto año de Joacim hijo de
Josías, rey de Judá, que proclamaron ayuno delante de Jehovah
para todo el pueblo de Jerusalén y para todo el pueblo que Venía
a Jerusalén de las ciudades de Judá.
10
Y Baruc Leyó del libro, a Oídos de todo el pueblo, las palabras
de Jeremías, en la casa de Jehovah, en la Cámara de Gemarías,
hijo del escriba Safán, la cual estaba en el atrio superior, a la
entrada de la puerta Nueva de la casa de Jehovah.
11
Entonces Miqueas hijo de Gemarías, hijo de Safán, habiendo
Oído del libro todas las palabras de Jehovah,
12
Descendió a la casa del rey, a la Cámara del escriba. Y he
Aquí que todos los magistrados estaban sentados Allí: el escriba
Elisama, Delaías hijo de Semeías, Elnatán hijo de Acbor,
Gemarías hijo de Safán, Sedequías hijo de Ananías
y los Demás magistrados.
13
Miqueas les Refirió todas las palabras que Había Oído
a Baruc leer del libro, a Oídos del pueblo.
14
Entonces todos los magistrados enviaron a Jehudí hijo de Netanías,
hijo de Selemías, hijo de Cusi, para que dijese a Baruc: --Toma en
tu mano el rollo que Leíste a Oídos del pueblo, y ven. Baruc
hijo de Nerías Tomó el rollo en su mano y fue a ellos.
15
Entonces le dijeron: --Siéntate, y léelo a nuestros Oídos.
Baruc lo Leyó a sus Oídos.
16
Y Sucedió que cuando oyeron todas aquellas palabras, cada uno, espantado,
se Volvió a su compañero. Y dijeron a Baruc: --¡Sin falta
hemos de referir al rey todas estas palabras!
17
Luego preguntaron a Baruc diciendo: --Cuéntanos Cómo escribiste
de parte de él todas estas palabras.
18
Baruc les dijo: --El me dictaba todas estas palabras, y yo Escribía
con tinta en el libro.
19
Entonces los magistrados dijeron a Baruc: --Vé, y escondeos Tú
y Jeremías. Que nadie sepa Dónde Estáis.
20
Habiendo depositado el rollo en la Cámara del escriba Elisama, fueron
al rey, en el atrio, y refirieron todas estas cosas a Oídos del rey.
21
Entonces el rey Envió a Jehudí para que tomase el rollo. Este
lo Tomó de la Cámara del escriba Elisama y lo Leyó a
Oídos del rey y a Oídos de todos los magistrados que estaban
junto al rey.
22
Era el mes noveno, y el rey estaba en la casa de invierno, donde Había
un brasero encendido delante de él.
23
Y Sucedió que cuando Jehudí Había Leído tres
o cuatro columnas, el rey lo Rasgó con un cortaplumas de escriba y
lo Echó al fuego que Había en el brasero, hasta que todo el
rollo se Consumió en el fuego que Había en el brasero.
24
Pero ni el rey ni todos sus servidores que oyeron estas palabras sintieron
temor ni rasgaron sus vestiduras.
25
A pesar de que Elnatán, Delaías y Gemarías rogaron al
rey que no quemase aquel rollo, no les quiso escuchar.
26
Al contrario, el rey Mandó a Jerameel hijo del rey, a Seraías
hijo de Azriel y a Selemías hijo de Abdeel que prendiesen al escriba
Baruc y al profeta Jeremías. Pero Jehovah los Escondió.
27
Después que el rey Quemó el rollo que Contenía las palabras
que Baruc Había escrito al dictado de Jeremías, vino la palabra
de Jehovah a Jeremías, diciendo:
28
"Vuelve a tomar otro rollo y escribe en él todas las mismas palabras
que estaban en el primer rollo, el que Quemó Joacim, rey de Judá.
29
Y Dirás a Joacim, rey de Judá, que Así ha dicho Jehovah:
Tú quemaste este rollo diciendo: '¿Por qué escribiste
en él que ciertamente Vendrá el rey de Babilonia y Destruirá
esta tierra y Hará desaparecer de ella a los hombres y los animales?'
30
Por tanto, Así ha dicho Jehovah con respecto a Joacim, rey de Judá:
No Tendrá quien se siente sobre el trono de David, y su Cadáver
Será echado al calor del Día y a la helada de la noche.
31
Castigaré tanto a él como a sus descendientes y a sus servidores
por su maldad. Traeré sobre ellos, sobre los habitantes de Jerusalén
y sobre los hombres de Judá todo el mal de que les he hablado y que
no quisieron escuchar."
32
Entonces Jeremías Tomó otro rollo y lo dio al escriba Baruc
hijo de Nerías. Este Escribió en él, al dictado de
Jeremías, todas las cosas del libro que Joacim rey de Judá
Había quemado en el fuego; y Además, fueron añadidas
muchas otras palabras semejantes.
El rey Sedequías hijo de Josías, al cual Nabucodonosor, rey
de Babilonia, Había puesto como rey en la tierra de Judá,
Empezó a reinar en lugar de Joaquín hijo de Joacim.
2
Pero ni él, ni sus servidores, ni el pueblo de la tierra obedecieron
las palabras que Jehovah Había dicho por medio del profeta Jeremías.
3
El rey Sedequías Envió a Jucal hijo de Selemías y al
sacerdote Sofonías hijo de Maasías, para que dijesen al profeta
Jeremías: "Por favor, ora por nosotros a Jehovah, nuestro Dios."
4
Jeremías entraba y Salía en medio del pueblo, porque Todavía
no lo Habían puesto en la Cárcel.
5
El ejército del Faraón Había salido de Egipto y cuando
la noticia acerca de ellos Llegó a Oídos de los caldeos que
Tenían sitiada a Jerusalén, éstos se fueron de
Jerusalén.
6
Entonces vino la palabra de Jehovah al profeta Jeremías, diciendo:
7
"Así ha dicho Jehovah Dios de Israel que Digáis al rey de
Judá que os Envió para que me consultaseis: He Aquí
que el ejército del Faraón que Salió en vuestro auxilio
va a regresar a su tierra, a Egipto.
8
Entonces los caldeos Volverán a combatir contra esta ciudad; la
Tomarán y la Incendiarán.
9
Así ha dicho Jehovah: No os engañéis a vosotros mismos,
diciendo: 'Los caldeos se han ido definitivamente de nosotros.' Porque no
se Irán.
10
Pues aun cuando derrotarais a todo el ejército de los caldeos que
combaten contra vosotros, y quedasen de ellos Sólo algunos hombres
heridos, cada uno en su tienda, se Levantarían y Prenderían
fuego a esta ciudad."
11
Aconteció que cuando el ejército de los caldeos se fue de
Jerusalén a causa del ejército del Faraón,
12
Jeremías Salía de Jerusalén para ir a la tierra de
Benjamín con el fin de recibir Allí su parte en medio del pueblo.
13
Y cuando Llegó a la puerta de Benjamín, estaba Allí
un jefe de guardia que se llamaba Irías hijo de Selemías, hijo
de Ananías, el cual Tomó preso al profeta Jeremías.
Y le dijo: --¡Tú vas a pasarte a los caldeos!
14
Pero Jeremías dijo: --¡Falso! No voy a pasarme a los caldeos.
Irías no le hizo caso, sino que Prendió a Jeremías y
lo Llevó a los magistrados.
15
Los magistrados se enfurecieron contra Jeremías y le azotaron. Luego
lo pusieron en la Prisión en casa del escriba Jonatán, porque
Habían convertido aquella casa en Cárcel.
16
Entró, pues, Jeremías en el calabozo, en las celdas, y Allí
Permaneció por muchos Días.
17
Entonces el rey Sedequías Envió a sacarlo de Allí, y
le Consultó secretamente en su casa, diciendo: --¿Hay palabra
de parte de Jehovah? Jeremías dijo: --Sí, la hay. --Y
Añadió--: Serás entregado en mano del rey de Babilonia.
18
Dijo también Jeremías al rey Sedequías: --¿En qué
he pecado contra ti, contra tus servidores y contra este pueblo, para que
me Pongáis en la Cárcel?
19
¿Dónde Están vuestros profetas que os profetizaban diciendo:
"No Vendrá el rey de Babilonia contra vosotros ni contra esta tierra"?
20
Ahora pues, escucha, mi señor el rey. Llegue mi Súplica a tu
presencia; no me hagas volver a la casa del escriba Jonatán, no sea
que Allí me muera.
21
Entonces el rey Sedequías dio órdenes para que custodiaran
a Jeremías en el patio de la guardia, haciendo que se le diese cada
Día una torta de pan de la calle de los Panaderos, hasta que todo
el pan de la ciudad se agotase. Así Quedó Jeremías en
el patio de la guardia.
Sefatías hijo de Matán, Gedalías hijo de Pasjur, Jucal
hijo de Selemías y Pasjur hijo de Malquías oyeron las palabras
que Jeremías hablaba a todo el pueblo, diciendo:
2
--Así ha dicho Jehovah: "El que se quede en esta ciudad Morirá
por la espada, por el hambre o por la peste. Pero el que se rinda a los caldeos
Vivirá; su vida le Será por Botín, y Vivirá.
3
Así ha dicho Jehovah: Ciertamente esta ciudad Será entregada
en mano del ejército del rey de Babilonia, y la Tomará."
4
Entonces los magistrados dijeron al rey: --¡Que muera este hombre! Pues
de esta manera, al hablarles tales palabras, desmoraliza a los hombres de
guerra que han quedado en esta ciudad, y a todo el pueblo. Porque este hombre
no busca el bien de este pueblo, sino su mal.
5
El rey Sedequías dijo: --He Allí, él Está en
vuestras manos. Porque nada puede el rey contra vosotros.
6
Entonces tomaron a Jeremías y lo hicieron echar en la cisterna de
Malquías hijo del rey, que estaba en el patio de la guardia. Y bajaron
a Jeremías con sogas. En la cisterna no Había agua, sino lodo;
y Jeremías se Hundió en el lodo.
7
Ebedmelec el Etíope, un funcionario que estaba en la casa del rey,
se Enteró de que Habían metido a Jeremías en la cisterna.
Y estando el rey sentado en la puerta de Benjamín,
8
Ebedmelec Salió de la casa del rey y Habló al rey diciendo:
9
--Oh mi señor el rey, estos hombres han actuado mal en todo lo que
han hecho con el profeta Jeremías, a quien metieron en la cisterna.
Allí Morirá de hambre, pues no hay Más pan en la ciudad.
10
Entonces el rey Mandó al mismo Ebedmelec el Etíope, diciendo:
--Toma contigo treinta hombres de Aquí y saca al profeta Jeremías
de la cisterna antes que muera.
11
Entonces Ebedmelec Tomó consigo a los hombres y Entró en la
casa del rey, al lugar que estaba debajo del Depósito del tesoro,
y Tomó de Allí trapos Raídos y trapos rasgados, y los
Bajó con sogas a Jeremías en la cisterna.
12
Y Ebedmelec el Etíope dijo a Jeremías: --Pon estos trapos
Raídos y rasgados en tus axilas, bajo tus brazos, debajo de las sogas.
Así lo hizo Jeremías.
13
De esta manera sacaron a Jeremías con sogas, y lo subieron de la cisterna.
Y Jeremías Permaneció en el patio de la guardia.
14
Después el rey Sedequías Mandó traer a su presencia
al profeta Jeremías, a la tercera entrada que Había en la casa
de Jehovah. Y el rey dijo a Jeremías: --Yo te voy a preguntar una
cosa. No me encubras nada.
15
Jeremías dijo a Sedequías: --Si te lo revelo, ¿no me
Harás morir? Y si te doy consejo, no me Escucharás.
16
Y el rey Sedequías Juró en secreto a Jeremías diciendo:
--Vive Jehovah que ha hecho nuestras almas, que no te haré morir,
ni te entregaré en mano de esos hombres que buscan tu vida.
17
Entonces Jeremías dijo a Sedequías: --Así ha dicho Jehovah
Dios de los Ejércitos, Dios de Israel: "Si de hecho te rindes a los
oficiales del rey de Babilonia, Vivirá tu alma, y esta ciudad no
Será incendiada. Así Vivirás, Tú y tu casa.
18
Pero si no te rindes a los oficiales del rey de Babilonia, esta ciudad Será
entregada en mano de los caldeos, y la Incendiarán, y Tú no
Escaparás de sus manos."
19
El rey Sedequías dijo a Jeremías: --Yo tengo miedo de los
Judíos que se han pasado a los caldeos, de que me entreguen en sus
manos y se ensañen contra Mí.
20
Jeremías le dijo: --No te Entregarán. Escucha, por favor, la
palabra de Jehovah que yo te hablo, y te Irá bien; y tu alma Vivirá.
21
Pero si Rehúsas rendirte, ésta es la palabra que me ha revelado
Jehovah:
22
"He Aquí que todas las mujeres que han quedado en la casa del rey
de Judá Serán entregadas a los oficiales del rey de Babilonia.
Y ellas mismas Dirán: 'Te incitaron y prevalecieron contra ti tus
hombres Más íntimos. Tus pies se hundieron en el lodo, y ellos
se volvieron Atrás.'
23
A todas tus mujeres y a tus hijos Entregarán a los caldeos. Tú
no Escaparás de sus manos, sino que por mano del rey de Babilonia
Serás apresado, y esta ciudad Será incendiada.
24
Entonces Sedequías dijo a Jeremías: --Nadie sepa de estas palabras,
y no Morirás.
25
Si los magistrados se enteran de que yo he hablado contigo y vienen a ti
y te dicen: "Decláranos, por favor, qué hablaste con el rey,
y dinos qué te dijo el rey. No nos lo encubras, y no te mataremos",
26
les Dirás: "He presentado al rey mi Súplica para que no me
haga volver a la casa de Jonatán, a morir Allí."
27
Vinieron, pues, a Jeremías todos los magistrados y le interrogaron.
El les Respondió conforme a todo lo que le Había mandado el
rey. Con esto dejaron de ocuparse de él, porque el asunto no Había
sido Oído.
28
Y Jeremías Permaneció en el patio de la guardia hasta el Día
en que fue tomada Jerusalén. Allí estaba él cuando
Jerusalén fue tomada.
En el mes décimo del noveno año de Sedequías rey de
Judá, Nabucodonosor rey de Babilonia vino con todo su ejército
contra Jerusalén, y la sitiaron.
2
En el noveno Día del mes cuarto del año 11 de Sedequías,
se Abrió una brecha en la ciudad.
3
Entonces llegaron todos los oficiales del rey de Babilonia: Nergal-sarezer,
Samgar-nebo, Sarsequim el Rabsaris, Nergal-sarezer el Rabmag y todos los
Demás oficiales del rey de Babilonia. Y se instalaron junto a la puerta
del Centro.
4
Sucedió que al verlos, Sedequías rey de Judá y todos
los hombres de guerra huyeron. Salieron de noche de la ciudad por el camino
del Jardín del rey, por la puerta que Había entre los dos muros.
Se dirigieron hacia el Arabá;
5
pero el ejército de los caldeos los Persiguió, y alcanzaron
a Sedequías en las llanuras de Jericó. Lo tomaron preso y lo
llevaron ante Nabucodonosor, rey de Babilonia, en Ribla, en la tierra de
Hamat; y éste Pronunció sentencia contra aquél.
6
El rey de Babilonia Degolló en Ribla a los hijos de Sedequías,
en presencia de éste. Asimismo, el rey de Babilonia hizo degollar
a todos los nobles de Judá.
7
Al rey Sedequías le Sacó los ojos y lo Aprisionó con
cadenas de bronce para llevarlo a Babilonia.
8
Después los caldeos incendiaron la casa del rey y las casas del pueblo,
y demolieron los muros de Jerusalén.
9
Al resto del pueblo que Había quedado en la ciudad, Además
de los desertores que se Habían pasado a él, Nabuzaradán,
Capitán de la guardia, los hizo llevar cautivos a Babilonia, junto
con el resto del pueblo que Había quedado.
10
Sin embargo, Nabuzaradán, Capitán de la guardia, hizo quedar
en la tierra de Judá a la gente Más pobre, que no Tenía
nada, y en ese Día les dio viñas y campos.
11
Nabucodonosor, rey de Babilonia, Había ordenado a Nabuzaradán,
Capitán de la guardia, acerca de Jeremías, diciendo:
12
"Tómalo y cuida de él. No le hagas nada malo; Más bien,
Harás con él como él te lo diga."
13
Entonces dio órdenes Nabuzaradán Capitán de la guardia,
junto con Nabusazbán el Rabsaris, Nergal-sarezer el Rabmag y todos
los altos oficiales del rey de Babilonia.
14
Y ordenaron traer a Jeremías del patio de la guardia. Luego lo entregaron
a Gedalías hijo de Ajicam, hijo de Safán, para que lo llevase
a su casa. Y Habitó en medio del pueblo.
15
La palabra de Jehovah vino a Jeremías cuando estaba preso en el patio
de la guardia. Y dijo:
16
"Vé y habla a Ebedmelec el Etíope, y dile que Así ha
dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: 'He Aquí, yo
cumplo mis palabras sobre esta ciudad para mal, y no para bien; y en aquel
Día Sucederá en tu misma presencia.
17
Pero en aquel Día yo te libraré, y no Serás entregado
en mano de aquellos de cuya presencia temes, dice Jehovah.
18
Ciertamente yo te libraré, y no Caerás a espada, sino que tu
vida te Será por Botín, porque tuviste confianza en Mí'",
dice Jehovah.
La palabra que vino a Jeremías de parte de Jehovah, después
que Nabuzaradán, Capitán de la guardia, le Envió desde
Ramá, cuando le Tomó, estando aprisionado con grilletes en
medio de todos los cautivos de Jerusalén y de Judá que eran
llevados cautivos a Babilonia.
2
El Capitán de la guardia Tomó interés en Jeremías
y le dijo: "Jehovah tu Dios Pronunció este mal contra este lugar,
3
y Jehovah lo ha Traído y ha hecho Según lo Había dicho.
Porque pecasteis contra Jehovah y no escuchasteis su voz; por eso os ha venido
esto.
4
Ahora, he Aquí yo te libero de los grilletes que tienes en tus manos.
Si te parece bien venir conmigo a Babilonia, ven, y yo cuidaré de
ti. Pero si te parece mal venir conmigo a Babilonia, déjalo. Mira,
toda la tierra Está delante de ti; vé adonde mejor y Más
conveniente te parezca."
5
Como Aún no se Volvía, le dijo: "Regresa a Gedalías
hijo de Ajicam, hijo de Safán, a quien el rey de Babilonia ha puesto
a cargo de las ciudades de Judá. Habita con él en medio del
pueblo, o vé adonde te parezca Más conveniente." El Capitán
de la guardia le dio provisiones y obsequios, y lo Despidió.
6
Entonces Jeremías se fue a Gedalías hijo de Ajicam, a Mizpa;
y Vivió con él en medio del pueblo que Había quedado
en el País.
7
Todos los jefes de los soldados que estaban en el campo, ellos y sus hombres,
oyeron que el rey de Babilonia Había puesto a Gedalías hijo
de Ajicam sobre la tierra, y que le Había encomendado los hombres,
las mujeres, los niños y los pobres de la tierra que no fueron llevados
cautivos a Babilonia.
8
Luego fueron a Gedalías en Mizpa: Ismael hijo de Netanías,
Johanán y Jonatán hijo de Carea, Seraías hijo de Tanjumet,
los hijos de Efai, de Netofa, y Jazanías hijo de cierto hombre de
Maaca. Fueron ellos y sus hombres.
9
Entonces Gedalías hijo de Ajicam, hijo de Safán, les Juró
a ellos y a sus hombres, diciendo: "No Tengáis temor de servir a los
caldeos. Habitad en la tierra y servid al rey de Babilonia, y os Irá
bien.
10
En cuanto a Mí, he Aquí que yo habito en Mizpa para servir
a los caldeos que vengan a nosotros. Pero vosotros, tomad vino, frutas de
verano y aceite; ponedlo en vuestras vasijas y habitad en las ciudades que
habéis tomado."
11
Asimismo, todos los Judíos que estaban en Moab, entre los hijos de
Amón y en Edom, y los que estaban en todos los Países, cuando
oyeron decir que el rey de Babilonia Había dejado a Judá un
remanente y que Había puesto frente a ellos a Gedalías hijo
de Ajicam, hijo de Safán,
12
entonces todos estos Judíos volvieron de todas las partes a donde
Habían sido expulsados. Se fueron a la tierra de Judá, a
Gedalías, en Mizpa, y recolectaron vino y Muchísimas frutas
de verano.
13
Entonces Johanán hijo de Carea y todos los oficiales de los soldados
que estaban en el campo fueron a Gedalías en Mizpa,
14
y le dijeron: --¿Sabes que Baalis, rey de los hijos de Amón,
ha enviado a Ismael hijo de Netanías para matarte? Pero Gedalías
hijo de Ajicam no les Creyó.
15
Entonces Johanán hijo de Carea Habló a Gedalías en secreto,
en Mizpa, diciendo: --Permite que yo vaya y mate a Ismael hijo de Netanías,
y nadie lo Sabrá. ¿Por qué te ha de quitar la vida, de
modo que todos los Judíos que se han agrupado alrededor de ti sean
dispersados y perezca el remanente de Judá?
16
Pero Gedalías hijo de Ajicam dijo a Johanán hijo de Carea:
--¡No hagas tal cosa, porque es falso lo que Tú dices acerca
de Ismael!
Aconteció en el mes séptimo que Ismael hijo de Netanías,
hijo de Elisama, de la descendencia real y de los oficiales del rey, fue
con diez hombres a Gedalías hijo de Ajicam, en Mizpa. Y comieron juntos
en Mizpa.
2
Entonces se Levantó Ismael hijo de Netanías, con los diez hombres
que estaban con él, e hirieron a espada a Gedalías hijo de
Ajicam, hijo de Safán. Así dieron muerte a aquel a quien el
rey de Babilonia Había puesto a cargo de la tierra.
3
Asimismo, Ismael Mató a todos los Judíos que estaban en Mizpa
con Gedalías. Ismael también Mató a los hombres de guerra
caldeos que se encontraban Allí.
4
Y Sucedió que un Día después que se Había dado
muerte a Gedalías, cuando Todavía nadie lo Sabía,
5
unos hombres llegaron de Siquem, de Silo y de Samaria: ochenta hombres con
sus barbas rapadas, sus ropas rasgadas y sus cuerpos arañados. Y
Traían consigo ofrendas vegetales e incienso para llevarlos a la casa
de Jehovah.
6
Entonces desde Mizpa Ismael hijo de Netanías les Salió al
encuentro, llorando mientras iba. Y cuando les Encontró, les dijo:
--Venid a Gedalías hijo de Ajicam.
7
Y Sucedió que cuando llegaron al centro de la ciudad, Ismael hijo
de Netanías y los hombres que estaban con él los degollaron
y los echaron en la cisterna.
8
Pero entre aquéllos Había diez hombres que dijeron a Ismael:
--No nos mates, porque tenemos escondidos en el campo tesoros de trigo, cebada,
aceite y miel. Así que Desistió, y no los Mató como
a sus compañeros.
9
La cisterna en que Ismael Echó todos los cuerpos de los hombres que
Mató era la cisterna grande que Había hecho el rey Asa, por
causa de Baasa, rey de Israel. Ismael hijo de Netanías la Llenó
de muertos.
10
Después Ismael Llevó cautivo a todo el remanente del pueblo
que estaba en Mizpa, desde las hijas del rey hasta todo el pueblo que Había
quedado en Mizpa y que Nabuzaradán, Capitán de la guardia,
Había encargado a Gedalías hijo de Ajicam. Ismael hijo de
Netanías los Llevó cautivos y se fue para pasarse a los hijos
de Amón.
11
Entonces Johanán hijo de Carea y todos los oficiales de los soldados
que estaban con él oyeron de todo el mal que Había hecho Ismael
hijo de Netanías.
12
Y tomaron a todos los hombres y fueron para combatir contra Ismael hijo de
Netanías, y le encontraron junto al gran estanque que hay en Gabaón.
13
Aconteció que cuando todo el pueblo que estaba con Ismael vio a
Johanán hijo de Carea y a todos los oficiales de los soldados que
estaban con él, se alegraron.
14
Entonces todo el pueblo que Ismael Había Traído cautivo de
Mizpa Volvió y se Pasó a Johanán hijo de Carea.
15
Pero Ismael hijo de Netanías, con ocho hombres, se Escapó de
Johanán y se Pasó a los hijos de Amón.
16
Entonces Johanán hijo de Carea y todos los jefes de los soldados que
estaban con él tomaron de Mizpa a todo el remanente del pueblo que
Había recuperado de Ismael hijo de Netanías, después
que éste Había dado muerte a Gedalías hijo de Ajicam.
Tomaron a los valientes, hombres de guerra, a las mujeres, a los niños
y a los funcionarios que Johanán Había hecho volver de
Gabaón.
17
Entonces fueron y se quedaron en Gerut-quimjam, que Está cerca de
Belén, con el fin de ir y entrar en Egipto,
18
por causa de los caldeos. Pues Tenían miedo de ellos, porque Ismael
hijo de Netanías Había matado a Gedalías hijo de Ajicam,
a quien el rey de Babilonia Había puesto a cargo del País.
Todos los oficiales de los soldados, Johanán hijo de Carea, Jezanías
hijo de Osaías y todo el pueblo, desde el menor hasta el mayor, se
acercaron
2
y dijeron al profeta Jeremías: --Por favor, llegue nuestro ruego a
tu presencia, y ora por nosotros a Jehovah tu Dios, por todo este remanente
(pues de muchos hemos quedado unos pocos, como tus ojos nos ven),
3
para que Jehovah tu Dios nos enseñe el camino por donde debemos ir
y lo que hemos de hacer.
4
Entonces el profeta Jeremías les dijo: --He Oído. He Aquí
que voy a orar a Jehovah vuestro Dios, conforme a vuestra Petición.
Todo lo que Jehovah os responda os lo declararé; nada os ocultaré.
5
Ellos dijeron a Jeremías: --Jehovah sea entre nosotros testigo fiel
y verdadero de que conforme a todo aquello para lo cual Jehovah tu Dios te
Envíe a nosotros, Así haremos.
6
Sea bueno o malo, obedeceremos la voz de Jehovah nuestro Dios, a quien nosotros
te enviamos. Para que nos vaya bien, ciertamente obedeceremos la voz de Jehovah
nuestro Dios.
7
Aconteció que al cabo de diez Días vino la palabra de Jehovah
a Jeremías.
8
Este Llamó a Johanán hijo de Carea, a todos los oficiales de
los soldados que estaban con él y a todo el pueblo, desde el menor
hasta el mayor;
9
y les dijo: --Así ha dicho Jehovah Dios de Israel, a quien me enviasteis
para que presentase vuestra Súplica delante de él:
10
"Si decididamente permanecéis en esta tierra, os edificaré
y no os destruiré. Os plantaré y no os arrancaré, porque
he desistido del mal que os he hecho.
11
No Temáis al rey de Babilonia, de quien tenéis miedo. No le
Temáis, dice Jehovah, porque yo estoy con vosotros para salvaros y
para libraros de su mano.
12
Os mostraré misericordia, de manera que él se Compadecerá
de vosotros y os Hará volver a vuestra tierra.
13
Pero si Decís: 'No habitaremos en esta tierra', desobedeciendo Así
la voz de Jehovah vuestro Dios,
14
y si Decís: 'No, sino que nos iremos a la tierra de Egipto, en la
cual no veremos guerra ni oiremos el sonido de la corneta, ni tendremos hambre
de pan, y Allí habitaremos',
15
entonces Oíd la palabra de Jehovah, oh remanente de Judá: Así
ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: Si vosotros
habéis decidido ir a Egipto y os vais Allá para residir,
16
Sucederá que Allí en la tierra de Egipto os Alcanzará
la espada que teméis. Allá en Egipto os Acosará el hambre
que os preocupa, y Allí moriréis.
17
Sucederá que todos los hombres que han decidido ir a Egipto para residir
Allí, Morirán por la espada, por el hambre y por la peste.
No Habrá quien quede vivo de ellos, ni quien escape ante el mal que
yo traeré sobre ellos.
18
Porque Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel:
Como se Derramó mi furor y mi ira sobre los habitantes de Jerusalén,
Así se Derramará mi ira sobre vosotros cuando entréis
en Egipto. Seréis objeto de Imprecación, de horror, de
Maldición y de oprobio; y no volveréis a ver este lugar."
19
Oh remanente de Judá, Jehovah ha dicho de vosotros: "No entréis
en Egipto." Sabed ciertamente que hoy os lo he advertido.
20
Os habéis descarriado a costa de vuestras propias vidas, porque vosotros
mismos me habéis enviado a Jehovah vuestro Dios, diciendo: "Ora por
nosotros a Jehovah nuestro Dios; y todo lo que Jehovah nuestro Dios declare,
Háznoslo saber, y lo pondremos por obra."
21
Pues os lo he declarado hoy, pero no habéis obedecido la voz de Jehovah
vuestro Dios en nada de lo que me Envió a deciros.
22
Ahora pues, sabed ciertamente que por la espada, por el hambre y por la peste
moriréis en el lugar a donde Deseáis entrar para residir
Allí.
Aconteció que cuando Jeremías Acabó de hablar a todo
el pueblo todas las palabras que Jehovah, el Dios de ellos, le Había
enviado a decirles,
2
Azarías hijo de Osaías, Johanán hijo de Carea y todos
los hombres arrogantes dijeron a Jeremías: --¡Dices mentiras!
No te ha enviado Jehovah nuestro Dios, para decir: "No entréis a Egipto
para residir Allí";
3
sino que Baruc hijo de Nerías te incita contra nosotros, para entregarnos
en mano de los caldeos, a fin de que nos maten o que nos lleven cautivos
a Babilonia.
4
Así que Johanán hijo de Carea, todos los oficiales de los soldados
y todo el pueblo no obedecieron la voz de Jehovah, para quedarse en la tierra
de Judá.
5
Más bien, Johanán hijo de Carea y todos los oficiales de los
soldados tomaron a todo el remanente de Judá (los que Habían
regresado, para residir en la tierra de Judá, de todas las naciones
a donde Habían sido echados),
6
a hombres, a mujeres, a niños, a las hijas del rey y a toda persona
que Nabuzaradán, el Capitán de la guardia, Había dejado
con Gedalías hijo de Ajicam, hijo de Safán, y también
al profeta Jeremías y a Baruc hijo de Nerías.
7
Entraron en la tierra de Egipto, porque no obedecieron la voz de Jehovah;
y llegaron hasta Tafnes.
8
Entonces vino la palabra de Jehovah a Jeremías, en Tafnes, diciendo:
9
"Toma en tus manos piedras grandes, Escóndelas en la mezcla del pavimento
de ladrillos a la entrada de la casa del Faraón en Tafnes, a vista
de los hombres Judíos,
10
y diles que Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de
Israel: 'He Aquí que yo enviaré y tomaré a Nabucodonosor,
rey de Babilonia, mi siervo, y pondré su trono sobre estas piedras
que he escondido, y él Extenderá su Pabellón sobre ellas.
11
Vendrá y Golpeará la tierra de Egipto: los que a muerte, a
muerte; los que a cautividad, a cautividad; los que a espada, a espada.
12
Prenderá fuego a las casas de los dioses de Egipto y las Incendiará,
y a ellos los Llevará cautivos. Limpiará la tierra de Egipto,
como un pastor limpia su ropa, y Saldrá de Allí en paz.
13
Además, Romperá los obeliscos de Heliópolis, la cual
Está en la tierra de Egipto, e Incendiará los templos de los
dioses de Egipto.'"
La palabra que vino a Jeremías con respecto a todos los Judíos
que habitaban en la tierra de Egipto, que habitaban en Migdol, en Tafnes,
en Menfis y en la tierra de Patros, diciendo:
2
--Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: "Vosotros
habéis visto todo el mal que he Traído sobre Jerusalén
y sobre todas las ciudades de Judá. He Aquí, en el Día
de hoy Están en ruinas y no hay habitantes en ellas,
3
a causa de la maldad que ellos cometieron, Provocándome a ira, ya
que fueron a quemar incienso y a servir a otros dioses que ni ellos, ni vosotros
ni vuestros padres conocieron.
4
Persistentemente os envié todos mis siervos los profetas, para deciros:
'¡Por favor, no Hagáis esta cosa abominable que yo aborrezco!'
5
Pero no escucharon ni inclinaron su Oído para volverse de su maldad,
para dejar de quemar incienso a otros dioses.
6
Por tanto, se Derramó mi ira, y se Encendió mi furor en las
ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén; y fueron convertidas
en ruina y en Desolación, como en este Día."
7
Ahora pues, Así ha dicho Jehovah Dios de los Ejércitos, Dios
de Israel: "¿Por qué hacéis un mal tan grande contra vosotros
mismos, para que de en medio de Judá sean destruidos el hombre, la
mujer, el niño y el lactante, sin que os quede remanente alguno?
8
¿Por qué me Provocáis a ira con las obras de vuestras
manos, ofreciendo incienso a otros dioses en la tierra de Egipto, a donde
habéis entrado para residir, de modo que Seáis exterminados
y que Seáis objeto de Maldición y de oprobio entre todas las
naciones de la tierra?
9
¿Habéis olvidado las maldades de vuestros padres, las maldades
de los reyes de Judá, las maldades de sus mujeres, las maldades vuestras
y las maldades de vuestras mujeres, que hicieron en la tierra de Judá
y en las calles de Jerusalén?
10
Hasta el Día de hoy no se han humillado, ni han tenido temor, ni han
caminado en mi ley ni en mis estatutos que puse delante de vosotros y delante
de vuestros padres."
11
Por tanto, Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel:
"He Aquí que yo pongo mi rostro contra vosotros para mal y para destruir
a todo Judá.
12
Tomaré al remanente de Judá que Decidió ir a la tierra
de Egipto para residir Allí, y Serán exterminados todos en
la tierra de Egipto. Caerán por la espada y por el hambre; Serán
exterminados, desde el menor hasta el mayor. Por la espada y por el hambre
Morirán, y Llegarán a ser objeto de Imprecación, de
horror, de Maldición y de oprobio.
13
Yo, pues, castigaré a los que habitan en la tierra de Egipto, como
castigué a Jerusalén: por la espada, por el hambre y por la
peste.
14
Y del remanente de Judá que Entró en la tierra de Egipto para
residir Allí, no Habrá quien escape, ni quien sobreviva para
volver a la tierra de Judá, a la cual ellos suspiran por regresar,
para habitar Allí. Porque no Regresarán sino los que escapen."
15
Entonces todos los hombres que Sabían que sus mujeres quemaban incienso
a otros dioses, y todas las mujeres que estaban presentes y una gran
concurrencia, todo el pueblo que habitaba en Patros en tierra de Egipto,
respondieron a Jeremías diciendo:
16
--La palabra que nos has hablado en nombre de Jehovah, no te la escucharemos.
17
Más bien, pondremos por obra toda palabra que ha salido de nuestra
boca, para quemar incienso a la Reina del Cielo y para derramarle libaciones,
como hemos hecho nosotros y nuestros padres, nuestros reyes y nuestros
magistrados, tanto en las ciudades de Judá como en las calles de
Jerusalén. Pues fuimos saciados de pan, nos fue bien y no vimos mal
alguno.
18
Pero desde que dejamos de quemar incienso a la Reina del Cielo y de derramarle
libaciones, nos falta de todo, y somos exterminados por la espada y por el
hambre.
19
Y las mujeres dijeron: --Cuando nosotras Quemábamos incienso a la
Reina del Cielo y le Derramábamos libaciones, ¿acaso era sin
el conocimiento de nuestros maridos que le Hacíamos tortas, reproduciendo
su imagen, y le Derramábamos libaciones?
20
Entonces Jeremías Habló a todo el pueblo, a los hombres, a
las mujeres y a todo el pueblo que le Había respondido esto, diciendo:
21
--¿No se Habrá acordado Jehovah, o no Habrá venido a su
mente el incienso que quemasteis en las ciudades de Judá y en las
calles de Jerusalén, vosotros y vuestros padres, vuestros reyes, vuestros
magistrados y el pueblo de la tierra?
22
Jehovah no pudo soportaros Más, a causa de la maldad de vuestras obras
y a causa de las abominaciones que Habíais hecho. Por tanto, vuestra
tierra ha sido convertida en ruinas, en horror y en Maldición, hasta
no quedar habitantes, como en este Día.
23
Porque quemasteis incienso y pecasteis contra Jehovah y no obedecisteis la
voz de Jehovah, ni anduvisteis en su ley, ni en sus estatutos, ni en sus
testimonios. Por eso ha venido sobre vosotros este mal, como en este Día.
24
Jeremías dijo Además a todo el pueblo y a las mujeres: --Oíd
la palabra de Jehovah, todos los de Judá que Estáis en la tierra
de Egipto.
25
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel: "Vosotros
y vuestras mujeres habéis hablado con vuestras bocas y lo habéis
realizado con vuestras manos, diciendo: 'Sin falta cumpliremos nuestros votos
que hemos hecho, de quemar incienso a la Reina del Cielo y de derramarle
libaciones.' ¡De veras que Confirmáis vuestros votos y ponéis
vuestros votos por obra!"
26
Por tanto, Oíd la palabra de Jehovah, todos los de Judá que
Habitáis en la tierra de Egipto: "He Aquí, ha dicho Jehovah,
he jurado por mi gran nombre que no Será invocado Más mi nombre
en toda la tierra de Egipto por la boca de Ningún hombre de Judá,
diciendo: '¡Vive el Señor Jehovah!'
27
He Aquí que yo vigilo sobre ellos para mal, y no para bien. Todos
los hombres de Judá que Están en la tierra de Egipto Serán
exterminados por la espada y por el hambre, hasta que perezcan del todo.
28
Los que escapen de la espada Regresarán de la tierra de Egipto a la
tierra de Judá, en Número reducido. Y todo el remanente de
Judá, que ha entrado en Egipto para residir Allí, Sabrá
de quién es la palabra que ha de prevalecer: si la Mía o la
de ellos.
29
Esto tendréis por señal, dice Jehovah, de que os castigaré
en este lugar, para que Sepáis que ciertamente mis palabras
Prevalecerán sobre vosotros para mal.
30
Así ha dicho Jehovah: He Aquí que yo entrego al Faraón
Hofra, rey de Egipto, en mano de sus enemigos y en mano de los que buscan
su vida, como entregué a Sedequías, rey de Judá, en
mano de Nabucodonosor, rey de Babilonia, su enemigo que buscaba su vida."
La palabra que Habló el profeta Jeremías a Baruc hijo de
Nerías, cuando Escribía en un libro estas palabras, al dictado
de Jeremías, en el cuarto año de Joacim hijo de Josías,
rey de Judá, diciendo:
2
"Así ha dicho Jehovah Dios de Israel, acerca de ti, oh Baruc:
3
Tú dijiste: '¡Ay de Mí! Porque Jehovah ha añadido
tristeza a mi dolor. Estoy exhausto de gemir y no he hallado descanso.'
4
Le has de decir que Así ha dicho Jehovah: 'He Aquí que yo destruyo
lo que edifiqué, y arranco lo que planté, es decir, toda esta
tierra.
5
¿Y Tú buscas para ti grandezas? No las busques, porque he Aquí
que yo traigo mal sobre todo mortal, dice Jehovah, pero a ti te daré
tu vida por Botín, en todos los lugares a donde vayas.'"
La palabra de Jehovah que vino al profeta Jeremías acerca de las naciones.
2
En cuanto a Egipto, contra el ejército del Faraón Necao, rey
de Egipto, el cual estaba en Carquemis, cerca del Río Eufrates, y
al cual Derrotó Nabucodonosor, rey de Babilonia, en el cuarto año
de Joacim hijo de Josías, rey de Judá:
3
"Alistad escudo y defensa; acercaos a la batalla.
4
Uncid los caballos y subid vosotros, oh jinetes. Presentaos con cascos, pulid
las lanzas, Vestíos de cota de malla.
5
¿Por qué los veo medrosos, volviéndose Atrás? Sus
valientes han sido deshechos; han huido buscando refugio, sin mirar Atrás.
¡El terror Está por todas partes!, dice Jehovah.
6
No huya el veloz, ni escape el valiente. En el norte tropezaron y cayeron,
junto a la ribera del Eufrates.
7
"¿Quién es este que sube como el Nilo y cuyas aguas se agitan
como Ríos?
8
Egipto, que se alza como el Nilo, y cuyas aguas se agitan como Ríos,
dijo: 'Subiré, cubriré la tierra; destruiré las ciudades
y sus habitantes.'
9
Subid, caballos; corred, carros, como locos; salid, valientes, los de
Etiopía y los de Libia que toman escudo, y los de Lidia que toman
y entesan el arco.
10
"Pero ese Día Será Día de venganza para el Señor
Jehovah de los Ejércitos, para vengarse de sus enemigos. La espada
Devorará y se Saciará; se Embriagará con la sangre de
ellos. Porque el Señor Jehovah de los Ejércitos Tendrá
un sacrificio en la tierra del norte, junto al Río Eufrates.
11
"Sube a Galaad y toma Bálsamo, oh virgen hija de Egipto. En vano has
multiplicado las medicinas; no hay Curación para ti.
12
Las naciones oyeron de tu afrenta, y tu clamor Llenó la tierra; porque
el fuerte Tropezó con el fuerte, y cayeron ambos al mismo tiempo."
13
La palabra que Habló Jehovah al profeta Jeremías, acerca de
la venida de Nabucodonosor, rey de Babilonia, para herir la tierra de Egipto:
14
"Anunciad en Egipto y hacedlo saber en Migdol; hacedlo saber en Menfis y
en Tafnes. Decid: 'Preséntate y Prepárate, porque la espada
va a devorar tus fronteras.'
15
"¿Por qué ha huido Apis? Tu buey no pudo mantenerse en pie, porque
Jehovah lo Derribó.
16
Hizo tropezar a muchos; Sí, cada uno Cayó sobre su compañero.
Y dijeron: 'Levántate, y volvamos a nuestro pueblo; volvamos a la
tierra de nuestro nacimiento, por causa de la espada opresora.'
17
Allí gritaron: '¡El Faraón, rey de Egipto, es Sólo
ruido! ¡Dejó pasar la oportunidad!'
18
"Vivo yo, dice el Rey, cuyo nombre es Jehovah de los Ejércitos, que
como el Tabor entre los montes y como el Carmelo junto al mar, Así
Vendrá.
19
Prepara tu equipaje para la cautividad, oh moradora hija de Egipto, porque
Menfis Será convertida en ruinas; Será devastada hasta no quedar
habitantes.
20
Una vaquilla Hermosísima es Egipto, pero del norte ciertamente
Vendrá el Moscardón.
21
También sus mercenarios, en medio de ella, son como terneros engordados.
También ellos se Volverán y a una Huirán, sin detenerse.
Porque sobre ellos ha venido el Día de su calamidad, el tiempo de
su castigo.
22
Su sonido es como el de una serpiente que se va. Ciertamente avanzan con
un ejército; vienen a ella con hachas, como leñadores.
23
Cortarán su bosque, dice Jehovah, aunque sea impenetrable; porque
son Más que las langostas; son innumerables.
24
La hija de Egipto es avergonzada; es entregada en manos del pueblo del norte."
25
Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel, ha dicho: "He Aquí
que yo castigo a Amón en Tebas; al Faraón, a Egipto, a sus
dioses y a sus reyes; al Faraón y a los que en él Confían.
26
Y los entregaré en mano de los que buscan sus vidas; en mano de
Nabucodonosor, rey de Babilonia, y en mano de sus servidores. Pero después
Egipto Será habitada como en los Días pasados, dice Jehovah.
27
"Pero Tú no temas, oh siervo Mío Jacob, ni desmayes, oh Israel.
Porque he Aquí, yo soy el que te salva desde lejos; y a tu descendencia,
de la tierra de su cautividad. Jacob Volverá y Estará tranquilo;
Estará confiado, y no Habrá quien lo atemorice.
28
"Tú no temas, oh siervo Mío Jacob, porque yo estoy contigo,
dice Jehovah. Ciertamente haré exterminio en todas las naciones a
las cuales te he expulsado; pero en ti no haré exterminio, sino que
te castigaré con justicia. De ninguna manera te daré por inocente."
La palabra de Jehovah que vino al profeta Jeremías acerca de los
filisteos, antes que el Faraón destruyese Gaza.
2
Así ha dicho Jehovah: "He Aquí, avanzan aguas del norte, se
convierten en torrente e inundan la tierra y su plenitud, la ciudad y sus
habitantes. Entonces los hombres gritan, y gime todo habitante de la tierra,
3
por el estruendo del galope de los cascos de sus corceles, por el retumbo
de sus carros y por el chirrido de sus ruedas. Por la debilidad de sus manos,
los padres no se vuelven a mirar a sus hijos,
4
a causa del Día que viene para destruir a todos los filisteos; para
exterminar a Tiro, a Sidón y a todo aliado que haya quedado con vida.
Porque Jehovah Destruirá a los filisteos, a los sobrevivientes de
la isla de Caftor.
5
Sobre Gaza ha venido rapadura de cabeza; Ascalón ha sido silenciada.
Oh sobrevivientes de los gigantes, ¿hasta Cuándo os sajaréis?
6
Oh espada de Jehovah, ¿hasta Cuándo no te Aquietarás?
Vuélvete a tu vaina, reposa y sosiégate.
7
¿Cómo se Aquietará? Pues Jehovah le ha dado órdenes
para ir a Ascalón y a la costa del mar; la ha designado para ir
Allí."
En cuanto a Moab, Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios
de Israel: "¡Ay de Nebo, porque es destruido! Quiriataim es avergonzada
y capturada; la ciudadela es avergonzada y arrasada.
2
No hay Más alabanza para Moab. En Hesbón planearon el desastre
contra ella, diciendo: 'Venid, eliminémosla de entre las naciones.'
Tú también, Madmena, Serás silenciada; la espada Irá
en pos de ti.
3
"Voz de clamor proviene de Horonaim: '¡Destrucción y gran quebranto!'
4
Moab ha sido quebrantado; Oíd el Griterío de sus pequeños.
5
Por la cuesta de Lujit sube con llanto continuo; por la bajada de Horonaim
los enemigos oyen el clamor del quebranto.
6
Huíd, salvad vuestras vidas y sed como el asno montés en el
desierto.
7
Por cuanto confiaste en tus obras y tesoros, Tú también Serás
tomado. Quemós Será llevado en cautividad, junto con sus sacerdotes
y principales.
8
Vendrá el destructor a cada ciudad, y ninguna Escapará.
También Será arruinado el valle, y Será destruida la
llanura, como ha dicho Jehovah.
9
"Dad alas a Moab, porque se Irá volando. Sus ciudades Serán
desoladas hasta no quedar en ellas habitante.
10
¡Maldito el que haga con negligencia la obra de Jehovah! ¡Maldito
el que retraiga su espada de la sangre!
11
"Tranquilo estaba Moab desde su juventud; sobre sus sedimentos ha estado
reposado. No ha sido vaciado de vaso en vaso, ni ha ido en cautividad. Por
eso ha quedado en él su sabor, y su olor no se ha mutado.
12
Por tanto, he Aquí que vienen Días, dice Jehovah, en que yo
le enviaré quienes lo hagan vaciar, y lo Vaciarán. Dejarán
Vacías sus vasijas y Destrozarán sus tinajas.
13
Moab se Avergonzará de Quemós, como la casa de Israel se
Avergonzó de Betel, en la cual puso su confianza.
14
¿Cómo diréis: 'Somos valientes y hombres fuertes para
la guerra'?
15
Destruido Está Moab; han escalado sus ciudades. La flor de su juventud
Descendió al degolladero, dice el Rey, cuyo nombre es Jehovah de los
Ejércitos.
16
El desastre de Moab Está Próximo a venir, y su calamidad se
apresura mucho.
17
Compadeceos de él todos los que Estáis alrededor suyo; todos
los que conocéis su nombre, decid: '¡Cómo se ha roto el
poderoso cetro, la vara gloriosa!'
18
"Desciende de la gloria; siéntate sobre tierra sedienta, oh moradora
de Dibón; porque el destructor de Moab ha subido contra ti y ha destruido
tus fortalezas.
19
Ponte de pie en el camino y mira, oh moradora de Aroer. Pregunta al que va
huyendo y di a la que se escapa: '¿Qué ha acontecido?'
20
Moab ha sido avergonzado, porque es arrasado. Lamentad y gritad; anunciad
junto al Arnón que Moab es destruido,
21
y que ha venido juicio a la tierra de la llanura; a Holón, a Jahaz,
sobre Mefaat;
22
sobre Dibón, sobre Nebo y sobre Bet-diblataim;
23
sobre Quiriataim, sobre Bet-gamul y sobre Bet-Maón;
24
sobre Queriot, sobre Bosra y sobre todas las ciudades de la tierra de Moab;
las de lejos y las de cerca.
25
Cortado es el poder de Moab, y su brazo es quebrantado, dice Jehovah.
26
Embriagadlo, porque contra Jehovah se Engrandeció; Moab se Revolcará
en su propio Vómito, y también él Será objeto
de burla.
27
¿Acaso no te Sirvió de burla Israel, como si le hubiesen sorprendido
entre ladrones? Porque desde que de él has hablado, has movido la
cabeza.
28
"Dejad las ciudades y habitad en peñascos, oh habitantes de Moab.
Sed como la paloma que hace su nido en los bordes del precipicio.
29
Hemos Oído de la soberbia de Moab, que es muy soberbio; de su
Altanería, de su soberbia, de su arrogancia y de la altivez de su
Corazón.
30
Yo conozco su Cólera, dice Jehovah; pero vano es aquello de que se
jacta, y vano es lo que hacen.
31
"Por tanto, lamentaré sobre Moab; clamaré sobre todo Moab,
y gemiré por los hombres de Quir-jaréset.
32
Lloraré por ti Más que por Jazer, oh vid de Sibma. Tus brotes
pasaban las aguas y llegaban hasta las aguas de Jazer. Sobre tus frutos de
verano y sobre tu vendimia ha Caído el destructor.
33
La Alegría y el regocijo han sido quitados del campo fértil,
de la tierra de Moab. He hecho cesar el vino de los lagares; nadie los pisa
con grito de Júbilo. No hay grito de Júbilo.
34
"El clamor de Hesbón llega hasta Eleale; hasta Jahaz dan su voz. Desde
Zoar hasta Horonaim y Eglat-Selisiyá; porque también las aguas
de Nimrim quedan desoladas.
35
Haré cesar en Moab a quien ofrezca holocaustos en un lugar alto, y
a quien ofrezca incienso a sus dioses, dice Jehovah.
36
Por tanto, mi Corazón gime como flautas por Moab. Asimismo, mi
Corazón gime como flautas por los hombres de Quir-jaréset,
pues perecieron las riquezas que Había adquirido.
37
Porque toda cabeza ha sido rapada, y toda barba rasurada. Sobre todas las
manos hay sajaduras; y sobre los lomos, cilicio.
38
Todo es llanto sobre todas las azoteas y plazas de Moab, porque he quebrantado
a Moab como a vasija despreciada, dice Jehovah.
39
¡Cómo ha sido destruido! ¡Cómo lamentan!
¡Cómo ha vuelto Moab la espalda, avergonzado! Moab ha sido convertido
en objeto de burla y de horror para todos los que Están en su alrededor.
40
Porque Así ha dicho Jehovah: He Aquí que como águila
Remontará vuelo, y hacia Moab Extenderá las alas.
41
Las ciudades Serán tomadas, y sus fortificaciones capturadas. En aquel
Día el Corazón de los valientes de Moab Será como el
Corazón de una mujer en angustia.
42
Moab Será destruido y Dejará de ser pueblo, porque se
Engrandeció contra Jehovah.
43
Terror, fosa y trampa hay contra ti, oh habitante de Moab, dice Jehovah.
44
El que huya del terror Caerá en la fosa; el que salga de la fosa
Quedará atrapado en la trampa. Porque yo traeré sobre él,
sobre Moab, el año de su castigo, dice Jehovah.
45
"A la sombra del Hesbón, los que huyen se detienen por falta de fuerzas.
Porque fuego Salió de Hesbón, y llama de en medio de Sejón;
Consumió las sienes de Moab y la coronilla de los hijos revoltosos.
46
¡Ay de ti, oh Moab! ¡Ha perecido el pueblo de Quemós! Porque
tus hijos son tomados en cautividad, y tus hijas en cautiverio.
47
Sin embargo, al final de los tiempos restauraré a Moab de la cautividad",
dice Jehovah. Hasta Aquí es el juicio contra Moab.
En cuanto a los hijos de Amón, Así ha dicho Jehovah: "¿Acaso
Israel no tiene hijos? ¿No tiene heredero? ¿Por qué ha tomado
Milcom a Gad, por heredad, y su pueblo Habitó en las ciudades de
éste?
2
Por tanto, he Aquí, vienen Días, dice Jehovah, en que haré
Oír grito de guerra en Rabá de los hijos de Amón. Será
convertida en un desolado monte de escombros, sus aldeas Arderán en
el fuego, e Israel Poseerá lo que tomaron de él, ha dicho Jehovah.
3
"Lamenta, oh Hesbón, porque Hai es destruida. Gritad, hijas de Rabá,
Ceñíos con cilicio y haced duelo, y deambulad por los vallados,
porque Milcom va en cautividad junto con sus sacerdotes y oficiales.
4
¿Por qué te Glorías de tus valles, de tu valle que fluye,
oh hija descarriada que Confías en tus tesoros? Dices: '¿Quién
Vendrá contra Mí?'
5
He Aquí, de todos tus alrededores traeré terror sobre ti, dice
el Señor Jehovah de los Ejércitos. Seréis empujados,
cada uno delante de Sí, y no Habrá quien acoja al errante.
6
"Después de esto restauraré de la cautividad a los hijos de
Amón", dice Jehovah.
7
En cuanto a Edom, Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos:
"¿Acaso no hay Más Sabiduría en Temán? ¿Ha
perecido el consejo de los entendidos? ¿Se ha corrompido su Sabiduría?
8
"Huid, volved, habitad en lugares profundos, oh habitantes de Dedán;
porque la ruina de Esaú traeré sobre él en el tiempo
en que lo he de castigar.
9
Si los vendimiadores vinieran contra ti, ¿no Dejarían siquiera
rebuscos? Si los ladrones vinieran de noche, Destruirían Sólo
lo que les bastara.
10
Pero yo he despojado a Esaú; he dejado al descubierto sus escondrijos,
y no Podrá esconderse. Será destruida su descendencia; sus
hermanos y sus vecinos Dejarán de ser.
11
Deja tus huérfanos; yo les mantendré con vida. Y en Mí
Confiarán tus viudas."
12
Porque Así ha dicho Jehovah: "He Aquí, los que no estaban
sentenciados a beber de la copa, de todos modos la bebieron. Y Tú,
¿Serás absuelto del todo? ¡De ninguna manera Serás
absuelto, sino que ciertamente la Beberás!
13
Porque por Mí mismo he jurado, dice Jehovah, que Bosra Será
convertida en horror, en oprobio, en ruina y en Maldición. Todas sus
ciudades Serán convertidas en unas ruinas perpetuas."
14
He escuchado de parte de Jehovah la noticia de que ha sido enviado un mensajero
a las naciones, diciendo: "¡Reuníos y venid contra ella!
¡Levantaos para la batalla!
15
Porque he Aquí que te empequeñeceré entre las naciones,
y Serás menospreciado entre los hombres.
16
El terror que inspiras y la soberbia de tu Corazón te han engañado,
a ti que habitas en las hendiduras de la peña y que te has apoderado
de la altura de la montaña. Aunque eleves tu nido como el águila,
de Allí te haré descender, dice Jehovah.
17
"Edom Será convertida en una Desolación; todo el que pase por
ella Quedará horrorizado y Silbará por causa de todas sus plagas.
18
Como cuando fueron trastornadas Sodoma y Gomorra, y las ciudades vecinas,
ha dicho Jehovah, no Morará Allí nadie, ni la Habitará
hijo de hombre.
19
He Aquí que Subirá como un León desde la espesura del
Jordán, contra el pastizal perenne. Pero de pronto le haré
correr de Allí, y la encargaré a quien sea escogido. Porque,
¿quién es como yo? ¿Quién me Convocará?
¿Quién Será aquel pastor que pueda prevalecer delante
de Mí?"
20
Por tanto, Oíd la Decisión que Jehovah ha tomado contra Edom,
los planes que ha hecho contra los habitantes de Temán. Ciertamente
hasta los Más pequeños del rebaño Serán arrastrados;
ciertamente su pastizal Será devastado junto con ellos.
21
La tierra Temblará por el estruendo de su Caída. Gritará,
y su voz se Oirá hasta el mar Rojo.
22
He Aquí que como águila Subirá y Remontará vuelo,
y contra Bosra Extenderá sus alas. En aquel Día el Corazón
de los valientes de Edom Será como el Corazón de una mujer
en angustia.
23
En cuanto a Damasco: "Hamat y Arfad fueron avergonzadas, porque oyeron malas
noticias. Se derritieron en un mar de ansiedad que no puede sosegarse.
24
Damasco se Debilitó, se Volvió para huir, y el Pánico
se Apoderó de ella. Angustia y dolores se apoderaron de ella, como
de una mujer que da a luz.
25
¿Cómo es que no ha sido abandonada la gloriosa ciudad, la villa
de mi regocijo?
26
Por tanto, sus Jóvenes Caerán en sus plazas; todos sus hombres
de guerra Serán silenciados en aquel Día, dice Jehovah de los
Ejércitos.
27
Prenderé fuego al muro de Damasco, el cual Devorará los palacios
de Ben-hadad."
28
En cuanto a Quedar y a los reinos de Hazor, los cuales Derrotó
Nabucodonosor, rey de Babilonia, Jehovah ha dicho Así: "¡Levantaos,
subid contra Quedar! ¡Destruid a los hijos del oriente!
29
Sus tiendas y sus rebaños Serán tomados; asimismo, sus carpas
y todos sus enseres. Se Llevarán sus camellos, y a causa de ellos
Clamarán: '¡El terror Está por todas partes!'
30
"Huid, emigrad lejos, oh habitantes de Hazor; habitad en lugares profundos,
dice Jehovah, pues Nabucodonosor, rey de Babilonia, ha tomado una Decisión
contra vosotros, y contra vosotros ha hecho un plan.
31
Levantaos, dice Jehovah; subid contra una Nación confiada que vive
tan segura que no tiene puertas ni cerrojos, y que vive solitaria.
32
Sus camellos Serán tomados como despojo, y la multitud de sus ganados
como Botín. Esparciré por todos los vientos a los que se rapan
las sienes. Por todos lados les traeré ruina, dice Jehovah.
33
Hazor Será morada de chacales, perpetua Desolación. No Morará
Allí nadie, ni la Habitará hijo de hombre."
34
Acerca de Elam vino la palabra de Jehovah al profeta Jeremías, en
el principio del reinado de Sedequías, rey de Judá, diciendo
35
que Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: "He Aquí
que yo quiebro el arco de Elam, el principio de su poder.
36
Sobre Elam traeré los cuatro vientos de los cuatro extremos del cielo,
y los dispersaré en todas las direcciones. No Habrá Nación
a donde no vayan los desplazados de Elam.
37
Haré que Elam se aterrorice delante de sus enemigos y delante de los
que buscan su vida. Traeré sobre ellos el mal y el furor de mi enojo,
dice Jehovah. Enviaré tras ellos la espada, hasta que los acabe.
38
Sobre Elam pondré mi trono y destruiré Allí al rey y
a los magistrados, dice Jehovah.
39
Pero en los últimos Días Acontecerá que restauraré
a Elam de la cautividad", dice Jehovah.
La palabra que Jehovah Habló por medio del profeta Jeremías
acerca de Babilonia y acerca de la tierra de los caldeos:
2
"Anunciad en las naciones y proclamad. Levantad bandera; anunciadlo y no
lo Encubráis. Decid: 'Tomada es Babilonia, Bel es avergonzado, Marduc
es hecho pedazos. Sus Imágenes son avergonzadas, y sus ídolos
hechos pedazos.
3
Porque desde el norte Subirá contra ella una Nación, la cual
Convertirá su tierra en objeto de horror. No Habrá nadie que
la habite. Tanto los hombres como los animales Huirán; se Irán.
4
"En aquellos Días y en aquel tiempo, dice Jehovah, Vendrán
los hijos de Israel, junto con los hijos de Judá. Irán andando
y llorando, y Buscarán a Jehovah su Dios.
5
Preguntarán por el camino de Sion, hacia donde Volverán sus
caras, y Vendrán y se Unirán a Jehovah en pacto eterno que
Jamás Será echado al olvido.'
6
"Ovejas perdidas fueron mi pueblo; sus pastores las hicieron errar. Las
descarriaron por las colinas; anduvieron de monte en colina, y se olvidaron
de sus prados de reposo.
7
Todos los que los hallaban los devoraban. Y sus enemigos Decían: 'No
somos culpables, por cuanto son ellos los que han pecado contra Jehovah,
su morada de justicia; contra Jehovah, la esperanza de sus padres.'
8
"Huid de en medio de Babilonia y salid de la tierra de los caldeos. Sed como
los carneros que van delante del rebaño.
9
Porque he Aquí que yo levanto y hago subir contra Babilonia una asamblea
de grandes naciones de la tierra del norte. Dispondrán batalla contra
ella, y desde Allí Será tomada. Sus flechas, como las de un
diestro guerrero, no Volverán Vacías.
10
"Caldea Será para despojo. Todos los que la despojen Quedarán
saciados, dice Jehovah.
11
Aunque os Alegráis y Gozáis, oh saqueadores de mi heredad;
aunque Brincáis como ternera en el pastizal y Relincháis como
corceles,
12
vuestra madre se Avergonzará sobremanera. Se Volverá Pálida
la que os dio a luz. He Aquí, Será la última de las
naciones: desierto, sequedal y tierra árida.
13
Por causa de la ira de Jehovah no Será habitada, y Quedará
totalmente desolada. Toda persona que pase por Babilonia se Asombrará
y Silbará por causa de todas sus plagas.
14
"Disponed batalla contra Babilonia, alrededor de ella, todos los que
Entesáis el arco. Tirad contra ella, no escatiméis flechas;
porque ha pecado contra Jehovah.
15
Gritad contra ella en derredor: '¡Se ha rendido!' Han Caído sus
torres; sus muros han sido derribados, porque ésta es la venganza
de Jehovah. Tomad venganza contra ella; hacedle como ella hizo.
16
Eliminad de Babilonia al sembrador y al que toma la hoz en el tiempo de la
siega. Ante la espada opresora, cada cual Mirará hacia su propio pueblo,
y cada cual Huirá a su propio País.
17
"Oveja descarriada es Israel; los leones la ahuyentaron. Primero la Devoró
el rey de Asiria; y finalmente la Deshuesó Nabucodonosor, rey de
Babilonia.
18
Por tanto, Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel:
He Aquí que yo castigo al rey de Babilonia y a su tierra, como
castigué al rey de Asiria.
19
A Israel traeré de nuevo a su pastizal, y Pacerá en el Carmelo
y en Basán. En los montes de Efraín y en Galaad se Saciará
su alma.
20
En aquellos Días y en aquel tiempo, dice Jehovah, Será buscada
la maldad de Israel, y no Aparecerá; los pecados de Judá, y
no Serán hallados Más. Porque perdonaré al remanente
que yo haya dejado.
21
"Sube contra la tierra de Merataim, y contra los habitantes de Pecod. Desvasta
y destruye tras ellos, dice Jehovah; haz conforme a todo lo que yo te he
mandado.
22
Estruendo de guerra hay en la tierra, y gran quebrantamiento.
23
¡Cómo fue cortado y quebrado el martillo de toda la tierra!
¡Cómo ha sido convertida Babilonia en objeto de horror en medio
de las naciones!
24
Te puse trampas, oh Babilonia. Fuiste tomada, ¡y Tú no lo supiste!
Fuiste hallada y también fuiste apresada, porque contendiste contra
Jehovah.
25
Jehovah ha abierto su arsenal y ha sacado las armas de su furor, porque
ésta es obra de Jehovah Dios de los Ejércitos en la tierra
de los caldeos.
26
"Venid contra ella desde los confines. Abrid sus graneros; convertidla en
montones y destruidla por completo. ¡Que no le queden sobrevivientes!
27
Destruid todos sus toros. ¡Que desciendan al matadero! ¡Ay de ellos!
Porque ha venido su Día, el tiempo de su castigo.
28
¡Voz de los que huyen y escapan de la tierra de Babilonia, para anunciar
en Sion la venganza de Jehovah nuestro Dios, la venganza por su templo!
29
Convocad contra Babilonia a los arqueros, a todos los que entesan el arco.
Asentad campamentos contra ella en derredor. No haya en ella quien escape;
retribuidle Según su obra. Haced con ella conforme a todo lo que hizo;
porque contra Jehovah se Insolentó, contra el Santo de Israel.
30
Por tanto, sus Jóvenes Caerán en sus plazas, y todos sus hombres
de guerra Serán silenciados en aquel Día, dice Jehovah.
31
"He Aquí, yo estoy contra ti, oh soberbio, dice el Señor Jehovah
de los Ejércitos; porque ha llegado tu Día, el tiempo en que
te he de castigar.
32
El soberbio Tropezará y Caerá, y no Tendrá quien lo
levante. Encenderé fuego en sus ciudades, el cual Devorará
todos sus alrededores."
33
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: "Oprimidos Están
los hijos de Israel y los hijos de Judá. Todos los que les tomaron
cautivos los retuvieron; no los quisieron soltar.
34
Pero su Redentor es fuerte; Jehovah de los Ejércitos es su nombre.
Ciertamente Abogará por la causa de ellos para hacer reposar la tierra
y turbar a los habitantes de Babilonia.
35
"La espada viene contra los caldeos, dice Jehovah; contra los habitantes
de Babilonia, contra sus magistrados y contra sus sabios.
36
La espada viene contra los adivinos, y Serán entontecidos; la espada
viene contra sus valientes, y Serán destrozados.
37
La espada viene contra sus caballos y sobre sus carros; viene contra toda
clase de gente que hay en medio de ella, y Serán como mujeres. La
espada viene contra sus tesoros, y Serán saqueados.
38
Sequedad viene sobre sus aguas, y se Secarán. Porque es tierra de
Imágenes, y por sus ídolos horribles se enloquecen.
39
"Por tanto, Allí Morarán las fieras del desierto con las hienas;
también Habitarán en ella las avestruces. Nunca Más
Será habitada, ni Será poblada de Generación en
Generación.
40
Como cuando Dios Trastornó a Sodoma, a Gomorra y a las ciudades vecinas,
dice Jehovah, no Morará Allí nadie, ni la Habitará hijo
de hombre.
41
"He Aquí que viene un pueblo del norte; una gran Nación y muchos
reyes se Despertarán en los confines de la tierra.
42
Empuñan el arco y la lanza. Son crueles; no tienen misericordia. Su
estruendo resuena como el mar. Montan sobre caballos y como un solo hombre
se disponen para la batalla contra ti, oh hija de Babilonia.
43
"El rey de Babilonia Oyó de su fama, y sus manos se debilitaron. La
angustia se Apoderó de él, dolor como de mujer que da a luz.
44
He Aquí que Subirá como un León desde la espesura del
Jordán, contra el pastizal perenne. Pero de pronto le haré
correr de Allí, y la encargaré a quien sea escogido. Porque,
¿quién es como yo? ¿Quién me Convocará?
¿Quién Será aquel pastor que pueda prevalecer delante
de Mí?
45
Por tanto, Oíd la Decisión que Jehovah ha tomado contra Babilonia,
los planes que ha hecho contra la tierra de los caldeos: Ciertamente hasta
los Más pequeños del rebaño Serán arrastrados;
ciertamente su pastizal Será devastado junto con ellos.
46
Ante el grito de que Babilonia ha sido tomada, la tierra se Estremecerá,
y su Griterío se Oirá entre las naciones."
Así ha dicho Jehovah: "He Aquí que yo levanto un viento destructor
contra Babilonia y contra los habitantes de Caldea.
2
Enviaré a Babilonia aventadores que la avienten, y Devastarán
su tierra; porque en el Día del mal Estarán contra ella por
todos lados.
3
No entese su arco el arquero, ni toque su cota de malla. No perdonaréis
la vida a sus Jóvenes. ¡Destruid por completo todo su ejército!
4
"Caerán los muertos en la tierra de los caldeos, y los heridos en
sus calles.
5
Porque Israel y Judá no han enviudado de su Dios, de Jehovah de los
Ejércitos. Ciertamente su tierra Está llena de culpa contra
el Santo de Israel.
6
"¡Huid de en medio de Babilonia! Librad, cada uno su vida, para que
no Seáis silenciados a causa de la maldad de ella. Porque es el tiempo
de la venganza de Jehovah; él le Dará su Retribución.
7
Una copa de oro fue Babilonia en las manos de Jehovah; una copa que
Embriagó a toda la tierra. De su vino bebieron los pueblos, por lo
cual se enloquecieron las naciones.
8
De repente ha Caído Babilonia y ha sido quebrantada. Lamentad sobre
ella; tomad Bálsamo para su dolor. Quizás Sanará.
9
"Quisimos curar a Babilonia, pero no ha sanado. Abandonadla y vayamos, cada
uno a su País; porque el juicio contra ella ha llegado hasta el cielo
y se ha levantado hasta las nubes.
10
Jehovah ha sacado a relucir nuestras justas demandas. ¡Venid y contemos
en Sion de la obra de Jehovah nuestro Dios!
11
"Afilad las flechas; embrazad los escudos. Jehovah ha despertado el
Espíritu de los reyes de Media; porque su Propósito es contra
Babilonia, para destruirla. Porque es la venganza de Jehovah, la venganza
por su templo.
12
"Levantad bandera contra los muros de Babilonia; reforzad la guardia, poned
centinelas, disponed las emboscadas. Porque Jehovah ha hecho un plan y
Realizará lo que ha dicho acerca de los habitantes de Babilonia.
13
Oh, Tú que habitas junto a muchas aguas, rica en tesoros, ha venido
tu fin, el colmo de tu codicia.
14
Jehovah de los Ejércitos ha jurado por Sí mismo, diciendo:
'Yo te llenaré de hombres como de langostas, y contra ti Levantarán
grito de victoria.'
15
"El hizo la tierra con su poder; Estableció el mundo con su
Sabiduría y Extendió los cielos con su inteligencia.
16
Cuando emite su voz, se produce un tumulto de aguas en los cielos. Hace subir
la neblina desde los extremos de la tierra. Hace los Relámpagos para
la lluvia y saca el viento de sus Depósitos.
17
"Todo hombre se embrutece por falta de conocimiento. Todo platero es avergonzado
a causa de su ídolo. Porque sus ídolos de Fundición
son un engaño, y no hay Espíritu en ellos.
18
Son vanidad, obra Ridícula; en el tiempo de su castigo Perecerán.
19
No es como ellos la Porción de Jacob; porque él es el Hacedor
de todo, e Israel es la tribu de su heredad. ¡Jehovah de los Ejércitos
es su nombre!
20
"Una maza y un arma de guerra eres Tú para Mí. Por medio de
ti destrozo naciones; por medio de ti destruyo reinos;
21
por medio de ti destrozo el caballo y a su jinete; por medio de ti destrozo
el carro y a su conductor.
22
Por medio de ti destrozo al hombre y a la mujer; por medio de ti destrozo
al anciano y al niño; por medio de ti destrozo al joven y a la joven.
23
Por medio de ti destrozo al pastor y su rebaño. Por medio de ti destrozo
al labrador y su yunta; por medio de ti destrozo a los gobernadores y a los
dirigentes.
24
"Ante vuestros ojos retribuiré a Babilonia y a todos los habitantes
de Caldea, por todo el mal que ellos hicieron a Sion, dice Jehovah.
25
"He Aquí, yo estoy contra ti, oh monte destructor, dice Jehovah, que
destruyes toda la tierra. Extenderé mi mano contra ti y te haré
rodar de las peñas. Te convertiré en monte quemado.
26
Nadie Tomará de ti piedra para esquina ni piedra para cimiento, porque
Serás perpetua Desolación, dice Jehovah.
27
"Alzad la bandera en la tierra y tocad corneta en las naciones. Reunid contra
ella a las naciones; convocad contra ella a los reinos de Ararat, de Mini
y de Asquenaz. Comisionad contra ella al Capitán; haced subir caballos
como langostas erizadas.
28
Reunid contra ella a las naciones, a los reyes de Media y a sus gobernadores,
a todos sus dirigentes y a la tierra de su Señorío.
29
La tierra tiembla y se retuerce; porque se ha cumplido todo el plan de Jehovah
contra Babilonia, para convertir a Babilonia en una soledad, sin Ningún
habitante.
30
"Los valientes de Babilonia han dejado de combatir y han quedado en sus
fortalezas. Se ha agotado su valor; se han vuelto como mujeres. Han incendiado
sus casas, y sus cerrojos han sido rotos.
31
Un correo sale al encuentro de otro correo, y un heraldo al encuentro de
otro heraldo, para informar al rey de Babilonia que su ciudad es tomada de
extremo a extremo.
32
Los vados han sido tomados, los carrizales han sido quemados a fuego, y los
hombres de guerra Están aterrados.
33
Porque Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos, Dios de Israel:
La hija de Babilonia es como una era. Ya es tiempo de trilla. Dentro de poco
le Vendrá el tiempo de la siega.
34
"'Nabucodonosor, rey de Babilonia, me ha devorado, me ha causado Confusión.
Me ha dejado como un vaso Vacío; me ha tragado como un monstruo
Acuático. Ha llenado su Estómago con mis delicadezas y a Mí
me ha expulsado.
35
¡Caiga sobre Babilonia la violencia hecha contra Mí y mi carne!',
Dirá la moradora de Sion. '¡Caiga mi sangre sobre los habitantes
de Caldea!', Dirá Jerusalén.
36
"Por tanto, Así ha dicho Jehovah: He Aquí que yo juzgo tu causa
y llevaré a cabo tu venganza. Secaré las aguas de ella y haré
que queden secas sus fuentes.
37
Babilonia Será convertida en montones de escombros, en morada de chacales,
en objeto de horror y de rechifla, sin Ningún habitante.
38
A una Rugirán como leones; Gruñirán como cachorros de
León.
39
Cuando estén en pleno calor les serviré sus banquetes; haré
que se embriaguen, de modo que se alegren. Dormirán el sueño
eterno y no se Despertarán, dice Jehovah.
40
Los haré descender como corderos al matadero, como los carneros con
los machos Cabríos.
41
"¡Cómo ha sido tomada Sesac y fue capturada la que era alabada
por toda la tierra! ¡Cómo ha llegado Babilonia a ser objeto de
horror entre las naciones!
42
Las aguas han subido sobre Babilonia, y ha sido cubierta por el tumulto de
sus olas.
43
Sus ciudades se han convertido en Desolación, en tierra seca y desierta.
Es una tierra en la cual nadie Habitará; ni hijo de hombre Pasará
por ella.
44
Castigaré a Bel en Babilonia, y sacaré de su boca lo que ha
tragado. Las naciones no Afluirán Más a él. ¡El
muro de Babilonia ha Caído!
45
"¡Salid de en medio de ella, oh pueblo Mío! Librad, cada uno
su vida del ardor de la ira de Jehovah.
46
No sea que desmaye vuestro Corazón y Temáis a causa del rumor
que se oye en la tierra. Dentro de un año Vendrá un rumor,
y después de otro año, otro rumor. La violencia cunde en la
tierra, y gobernante contiende con gobernante.
47
"Por tanto, he Aquí vienen Días en que castigaré los
ídolos de Babilonia. Toda su tierra Será avergonzada, y en
medio de ella Caerán todos sus muertos.
48
Los cielos y la tierra, y todo lo que en ellos hay, Gritarán de
Alegría por lo de Babilonia; porque del norte Vendrán contra
ella los destructores, dice Jehovah.
49
"Babilonia misma Caerá por causa de los muertos de Israel; como por
causa de Babilonia han Caído los muertos en toda la tierra.
50
Los que escapasteis de la espada, ¡marchaos; no os Detengáis!
Acordaos de Jehovah desde lejos, y esté Jerusalén en vuestra
memoria:
51
'Estamos avergonzados porque Oímos la afrenta; el oprobio ha cubierto
nuestros rostros, porque vinieron extranjeros contra los santuarios de la
casa de Jehovah.'
52
Por tanto, he Aquí que vienen Días, dice Jehovah, en que yo
castigaré sus ídolos, y en toda su tierra Gemirán los
heridos.
53
Aunque Babilonia suba hasta el cielo, y aunque fortifique en alto su baluarte,
hasta ella Llegarán de mi parte los destructores, dice Jehovah.
54
"Estruendo de Griterío hay en Babilonia; gran quebrantamiento, en
la tierra de los caldeos.
55
Porque Jehovah destruye Babilonia y quita de ella el gran bullicio. Sus olas
rugen como caudalosas aguas, y resuena el estruendo de sus voces.
56
Porque el destructor ha venido contra ella, contra Babilonia, y sus valientes
son tomados prisioneros. Su arco ha sido hecho pedazos, porque Jehovah es
un Dios de Retribución. Ciertamente él Dará la recompensa.
57
"Embriagaré a sus magistrados, a sus sabios, a sus gobernadores, a
sus dirigentes y a sus valientes. Dormirán el sueño eterno
y no Despertarán, dice el Rey, cuyo nombre es Jehovah de los
Ejércitos.
58
Así ha dicho Jehovah de los Ejércitos: La ancha muralla de
Babilonia Será demolida por completo. Sus puertas altas Arderán
en el fuego. Los pueblos Habrán trabajado para nada, y las naciones
se Habrán fatigado Sólo para el fuego."
59
Estas son la palabras que Envió el profeta Jeremías a Seraías
hijo de Nerías, hijo de Maasías, cuando iba con Sedequías,
rey de Judá, a Babilonia, en el cuarto año de su reinado.
Seraías era el jefe de campamento.
60
Jeremías Escribió en un libro acerca de todo el mal que Había
de venir sobre Babilonia, todas las palabras que Están escritas contra
Babilonia.
61
Jeremías dijo a Seraías: "Cuando llegues a Babilonia, cumple
en leer todas estas palabras.
62
Y Dirás: '¡Oh Jehovah, Tú has dicho de este lugar que
lo Habrías de destruir, hasta que no quede en él quien lo habite,
desde los hombres hasta los animales, y que Sería una perpetua
Desolación.'
63
"Cuando acabes de leer este libro, le Atarás una piedra y lo
Arrojarás al Eufrates,
64
diciendo: 'Así se Hundirá Babilonia y no se Levantará,
a causa del mal que yo traigo sobre ella, de manera que Serán abatidos.'"
Hasta Aquí son las palabras de Jeremías.
Sedequías Tenía 21 años cuando Comenzó a reinar,
y Reinó 11 años en Jerusalén. El nombre de su madre
era Hamutal hija de Jeremías, de Libna.
2
El hizo lo malo ante los ojos de Jehovah, conforme a todo lo que Había
hecho Joacim.
3
Ciertamente el furor de Jehovah estaba sobre Jerusalén y Judá,
hasta que los Echó de su presencia. Sedequías se Rebeló
contra el rey de Babilonia.
4
Y Aconteció el 10 del mes décimo del noveno año de su
reinado que Nabucodonosor, rey de Babilonia, vino con todo su ejército
contra Jerusalén. Luego acamparon contra ella, y construyeron muros
de asedio contra ella en derredor.
5
La ciudad estuvo sitiada hasta el año 11 del rey Sedequías.
6
En el noveno Día del mes cuarto, Prevaleció el hambre en la
ciudad, y no Había alimentos para el pueblo de la tierra.
7
Entonces se Abrió una brecha en la ciudad, y huyeron todos los hombres
de guerra. Salieron de noche de la ciudad, por la puerta que Había
entre los dos muros, junto al Jardín del rey, mientras los caldeos
estaban junto y alrededor de la ciudad. Se dirigieron hacia el Arabá,
8
pero el ejército de los caldeos Persiguió al rey Sedequías
y lo Alcanzó en las llanuras de Jericó; y todo su ejército
fue dispersado de su lado.
9
Entonces prendieron al rey y lo llevaron ante el rey de Babilonia, en Ribla,
en la tierra de Hamat, y éste Pronunció sentencia contra
aquél.
10
El rey de Babilonia Degolló a los hijos de Sedequías en su
presencia, y también Degolló en Ribla a todos los magistrados
de Judá.
11
Y a Sedequías le Sacó los ojos y le Aprisionó con cadenas
de bronce. El rey de Babilonia lo hizo llevar cautivo a Babilonia y lo puso
en la Cárcel hasta el Día en que Murió.
12
El 10 del mes quinto del año 19 del reinado de Nabucodonosor, rey
de Babilonia, Entró en Jerusalén Nabuzaradán, Capitán
de la guardia, que Servía en la presencia del rey de Babilonia.
13
Incendió la casa de Jehovah, la casa del rey y todas las casas de
Jerusalén; Incendió todo edificio grande.
14
Todo el ejército de los caldeos que estaba con el Capitán de
la guardia Demolió todos los muros alrededor de Jerusalén.
15
Nabuzaradán, Capitán de la guardia, hizo llevar cautivos a
algunos de la gente empobrecida y al resto del pueblo que Había quedado
en la ciudad, a los desertores que se Habían pasado al rey de Babilonia
y al resto de los artesanos.
16
Sin embargo, Nabuzaradán, Capitán de la guardia, hizo quedar
una parte de la gente Más pobre de la tierra, como viñadores
y labradores.
17
Los caldeos destrozaron las columnas de bronce que estaban en la casa de
Jehovah, Así como las bases de las pilas Móviles y la fuente
de bronce que estaba en la casa de Jehovah; y se llevaron todo el bronce
a Babilonia.
18
También se llevaron las ollas, las palas, las despabiladeras, los
cucharones y todos los utensilios de bronce con que Servían.
19
El Capitán de la guardia se Llevó también las copas,
los incensarios, los tazones para la Aspersión, las ollas, los
candelabros, las cucharas y las tazas, tanto los de oro como los de plata.
20
En cuanto a las dos columnas, la fuente y los doce bueyes de bronce que estaban
debajo de ella, y las bases de las pilas Móviles que Había
hecho el rey Salomón en la casa de Jehovah, no hubo manera de pesar
el bronce de todos estos objetos.
21
En cuanto a las columnas, la altura de cada columna era de 18 codos, y su
circunferencia era de 12 codos. Eran huecas, y el espesor de sus paredes
era de 4 dedos.
22
El capitel de bronce que Había sobre ella era de 5 codos de alto.
Y sobre el capitel alrededor Había una red de granadas, toda de bronce.
La segunda columna, con sus granadas, Tenía una labor semejante.
23
Había 96 granadas en cada hilera. Todas ellas sumaban 100, encima
y alrededor de la red.
24
El Capitán de la guardia Tomó también a Seraías,
el sacerdote principal; a Sofonías, el segundo sacerdote; y a tres
guardias de la puerta.
25
Y de la ciudad Tomó a un funcionario que estaba encargado de los hombres
de guerra, a siete hombres de los Más íntimos del rey que se
hallaban en la ciudad, al escriba principal de la milicia, quien reclutaba
al pueblo de la tierra, y a sesenta hombres del pueblo de la tierra que se
hallaban dentro de la ciudad.
26
Nabuzaradán, Capitán de la guardia, los Tomó y los
Llevó al rey de Babilonia, en Ribla.
27
Y el rey de Babilonia los Hirió y los Mató en Ribla, en la
tierra de Hamat. Así fue llevada cautiva Judá lejos de su tierra.
28
Este es el Número del pueblo que Nabucodonosor Llevó en cautividad:
En el séptimo año hizo llevar cautivos a 3.023 Judíos.
29
En el año 18, Nabucodonosor Llevó cautivos a 832 personas de
Jerusalén.
30
Y en el año 23 de Nabucodonosor, Nabuzaradán, Capitán
de la guardia, Llevó cautivos 745 personas de los Judíos. Todas
las personas fueron 4.600.
31
Aconteció el 25 del mes duodécimo del año 37 de la
cautividad de Joaquín, rey de Judá, que Evil-merodac, rey de
Babilonia, en el primer año de su reinado, Indultó a Joaquín,
rey de Judá, y lo Sacó de la Cárcel.
32
Habló con Joaquín amigablemente y puso su sitial Más
alto que los sitiales de los reyes que estaban con él en Babilonia.
33
Cambió su ropa de Prisión, y Joaquín Comía en
la presencia del rey siempre, todos los Días de su vida.
34
Continuamente le fue dada su Ración de parte del rey de Babilonia,
cada cosa en su Día, todos los Días de su vida, hasta el Día
de su muerte.